11. Unas vueltas de amor

66 4 0
                                    

- Sigo sin entender cómo van a unir dos medias máquinas prácticamente rotas - exclamó Ricky sentado en el suelo removiendo el pasto.

- Que no están rotas - repitió Emily -. Es simplemente unirlas.

- Como tú digas, pero que conste que no estoy entendiendo nada.

- Tranquilo, tampoco es tan difícil - dijo con algo de sarcasmo -. Tiene remedio.

- Comencemos cuanto antes - dije y tomé una llave inglesa y un plano donde estaba la máquina del tiempo dibujada.

≫ ──── ≪•◦ ✧ ◦•≫ ──── ≪

- Y bueno, este es tooodo el plan - dijo Noa con un enorme pliego de cartulina con muchos dibujos, flechas y frases en lápiz y marcadores de colores.

- Necesito que me expliques de nuevo ese plan, estoy perdido - dijo Rawy.

- Haz tus preguntas.

- ¿Por qué tenemos que robar la máquina? ¿A qué me va a llevar sacarle información al pantera rosada? ¿Había necesidad de hacer un plan gigante solo por una maquinita?

- Primero, no podemos simplemente decirle a Tara y Emily " Hola, queremos la máquina del tiempo para acabar con ustedes y ser felices para siempre" - exclamó la pelinegra con voz chillona -. Lamento decirte que eso NO FUNCIONARÁ. Segundo, extraerle información al rubiecito ese sobre su amiguita no será problema y ayudará más de lo que imaginas. Tercero, no desprecies mi plan, ya que si fuera mi tarea de secundaria obtendría un 10 en todo el bimestre.

- Si tú lo dices... Espera, lo que quieres es venganza ¿Verdad?

≫ ──── ≪•◦ ✧ ◦•≫ ──── ≪

- ¿Cuánto tiempo llevamos ya en esto? - pregunté exhausta.

Emily encendió su teléfono para ver la hora.

- Tres horas, cuarenta y cuatro minutos y ni siquiera hemos hallado la forma.

- No son cables rotos, ni fuerza electromagnética - suspiré -. Creo que hay algo que no hemos visto...

- Tomen un descanso, o de lo contrario veré cómo explotan sus cabezas - bromeó Xavier -. 

Ambas lo miramos algo raro.

- Aunque pensándolo bien, creo que sí existe la posibilidad de que sus cabezas exploten - dijo Ricky. 

- Creo que a todos nos vendría bien una caminata - propuso René y aceptamos.

Antes de irnos cubrimos la máquina con una sábana negra.

Dimos un recorrido por la ciudad otra vez, pero esta vez guiado por el famoso quinteto de la época, que no paraban de hacerse bromas entre sí.

- Oye - conversaba con Emily -. ¿Cómo pudieron arreglar la máquina para venir?

- Muchos libros y tutoriales - respondió ella -. Yo no entendía nada, pero al menos Noa sí.

- Ey - se adentró Edward a la conversación -, hablando de Noa, ¿dónde está?

Ni siquiera habíamos notado que Noa no había venido con nosotras.

- No la he visto desde la mañana - mencioné.

- Quizás ande cacharreando la máquina - opinó Rawy.

- ¿Pero por qué esperó a que nos fuéramos? - cuestioné. A decir verdad, estaba notando a Noa un poco más distante a nosotras de lo normal.

- No lo sé - dijo Emily dirigiendo la mirada a otro sitio. ¿Hay algo que me están ocultando estas dos?

Edward cambió rápidamente de tema.

- Emily, ¿Recuerdas que había reservado una mesa en aquel restaurante? - dijo señalando un restaurante japonés no muy lejos del lugar.

- ¡Por supuesto que lo recuerdo! - exclamó emocionada, yendo detrás de él.

Edward le sonrió. 

Era más que obvio que, a pesar del poco tiempo, ya habían construido una sólida "amistad".

↠ Emily's POV

Mi emoción estaba a 999. Pensé que al principio Edward estaba jugando conmigo, de que me iba a llevar a un restaurante elegante, pero SÍ ERA VERDAD.

Sé que no debo ilusionarme porque no pertenezco a esta época, y apenas arreglemos la máquina, tendremos que irnos y pasará como si nunca nos hubiéramos conocido. En cambio, Edward no deja de sorprenderme en el poco tiempo en que nos hablamos. Adrián es guapo y todo, pero creo que ya es demasiado egocéntrico.

Entramos al restaurante y Ed me guió hasta una mesa al fondo. Supongo que no quería que descubrieran que era un miembro de Menudo. Pero está bien, creo.

A los pocos minutos,  llegó un mesero y tomó nuestros pedidos. Conversamos un poco.

- Y bien, ¿Entonces Tara es tu mejor amiga desde primaria?

- Claro. Nos conocimos en un trabajo en grupo de la escuela. Nos pasamos nuestros números y nuestra amistad fue creciendo cada vez más. A estas alturas, no sé que haría si le pasara algo o si dejara de hablarme.

- Te entiendo. Y Noa es...

- Su prima. Suele ser algo callada, pero en confianza es imparable. Pero ahora, creo que le está dando la espalda a Tara.

- ¿A qué te refieres?

- Supongo que sigue molesta porque Tara fue la que pudo cambiar de época primero y nosotras dos tuvimos que esperar un poco más para llegar aquí. No entiendo por qué está molesta con ella. Debería estarlo conmigo; fui yo la razón por la que la máquina se dañó para comenzar.

- Tranquila, seguro no fue tu culpa - sonrió amablemente -. Aunque piénsalo: ¿no ha sido divertido todo esto? ¿Y si Edgardo todavía fuera nuestro mánager? Y sin Tara ¿quién sería la chica que hace que Adrián hable menos de sí mismo?

- ¿El mismísimo Adrián Olivares?

- Así él no lo admita, Tara es alguien especial para él.

Reímos un poco.

- Bueno, con el amor de por medio, todo puede girar 180 grados.

Fin del POV

≫ ──── ≪•◦ ✧ ◦•≫ ──── ≪

- Bien, este es el momento - dijo Noa emocionada, con varias chaquetas encima ya que la noche iba a ponerse fría.

- ¿Quieres que te aplaudan o qué? Sabes en el problema en que nos vas a meter por tu tonto capricho.

- Por favor, Rawy. Nuestros intereses son similares y lo sabes. Tú quieres saber qué hay detrás de esa máquina y yo-

- Sí, ya lo sé, quieres venganza - repitió. Ya a este punto estaba harto de la pelinegra.

- Bueno, si te parece tan estúpido todo esto, puedes irte - replicó apuntando con su dedo -. De todas formas no necesito ayuda.

- Está más que perfecto - dijo dándole la espalda -. Patética - musitó antes de marcharse.

Un Menudo CambioWhere stories live. Discover now