Perfecta para nosotras - Katie McGrath, Melissa Benoist y tú (Ellas G!p)

¿Más? ¡Más!

⚠️ ADVERTENCIA ⚠️

Antes de que sigan leyendo, quiero avisarles que esta historia será muy explícita y tendrá ciertas cosas como fetiches o practicas sexuales que podrían no gustarles, así como son el bondage, dominación, masoquismo y sadismo (BDSM), también el Sploshing (esparcir ciertos alimentos, como helados o jarabe, por el cuerpo mientras se tiene sexo), Bluetoothing (Juguetes sexuales en público, conectados por Bluetooth) y otras muchas cosas.

Además, a veces añadiremos a otros famosos con el objetivo de dejar a Rayis en silla de ruedas con más razones jajsjaj ♿️

En resumen, esta historia será mayormente sexual y muy muy muy explícita.

Así que si no les agrada este tipo de variedad, les recomiendo que dejen de leer jajsjajaj.

Pero si les interesa o llama la atención, les invito a quedarse y disfrutar de todo lo que leeran, que les aseguro, les encantará tanto como a rayis  😏

———

Narras tú

Ya habían pasado unas horas y desperté de mi siesta. Me estiré un poco y me levanté de la cama, ya que aún me dolían los músculos por lo de la noche anterior.

Cuando salí, vi a Melissa y Katie en el mini gimnasio haciendo ejercicio. Vi la hora y noté que llevaba casi un día sin comer, así que decidí prepararme algo. Fui a la cocina y me hice un sándwich, ya que no tenía ganas de cocinar otra cosa más elaborada. Fui hacia la mesa y cuando le iba a dar la primera mascada, Katie lo sacó de mis manos.

–Oye...– me quejé –Muero de hambre– fue a la cocina y volvió sin mi pan.

–Come esto– dijo dejando un yogurt en la mesa.

–Pero yo quiero mi sándwich– su camiseta estaba levemente pegada a su cuerpo por el sudor.

–Tienes que comerte tu yogurt– negué y ella suspiró, abrió el envase y lo dejó frente a mí. Metió su mano al short y la miré sorprendida, ya que tomó su miembro y lo liberó.

–Katie...– tomó el yogurt y metió la punta de su miembro en este.

–Abre la boca– miré sus ojos.

–Tengo mucha hambre– acarició mi mejilla.

–Te hice una sopa– fruncí mi ceño.

–¿Por qué no quieres que coma mi sándwich? No eres mi mamá para decirme qué comer, ni ella lo hace– acercó su miembro a mi boca, dejándolo a pocos centímetros.

–¿Te gustó lo de anoche?– asentí –Hoy será mejor– saqué mi vista de su rostro para mirar su miembro.

–¿Quién dijo que voy a acostarme hoy con ustedes?– se rió.

–¿No vas a hacerlo?– puso su miembro sobre mis labios y suspiré.

Abrí mi boca para pasar mi lengua y luego le di un beso. Metí la cabeza en mi boca y gimió, así que comencé a besarla y pasando mi lengua por sus alrededores, para dejarla limpia.

–Bueno, gracias– dio un paso atrás, sacándola de mi boca –No quiero que te sientas obligada a hacer algo con nosotras, así que si no quieres intentar algo nuevo hoy, no insisti...– tomé la base de su miembro antes de que se alejara más y la atraje hacia mí para seguir –Así me gusta– dijo acariciando mi mejilla y sacó su miembro de mi boca para volver a meterlo en el yogurt.