A Family Woman ✔️

Capítulo 5

A la mañana siguiente, Cheryl se levantó muy temprano, decidida a arreglar lo que había causado la noche anterior. Decidió que no quería volver a ver el dolor y la decepción que vio en los ojos de Antoinette la noche anterior, nunca más

Decidió ceñirse a lo que conocía de sus años de noviazgo con Toni en la universidad y a los recuerdos grabados en su mente. Así que compró una taza de café negro y un pedido de panecillos extra tostados en la panadería local favorita de Toni, y también compró un ramo de amapolas, las flores favoritas de Toni

Llegó a tiempo para encontrar a Keila de pie, somnolienta, en medio del salón

- Oye - susurró Cheryl, adorando el bonito pijama de dinosaurios de Keila

Keila tarareó un saludo y bostezó, lo que provocó la risa de Cheryl

- Ahora mismo vuelvo para prepararte la leche con chocolate, dormilona - le revolvió el pelo cariñosamente

De puntillas hacia su dormitorio, se asomó al de Anthony para asegurarse de que el pequeño seguía durmiendo

Toni seguía dormida bajo las sábanas. Se sentó con cuidado en el borde de la cama y apartó un mechón de pelo de la cara de Toni

- Buenos días - susurró Cheryl, acariciando el pómulo de Toni con el pulgar

Antoinette se removió, parpadeando suavemente

- ¿Pasa algo? - Preguntó con voz ronca

Cheryl negó con la cabeza

- Te he traído algo - dijo, levantando la mano que sostenía la bolsa de papel y el ramo

Antoinette miró los regalos presentados con confusión, y una pequeña sonrisa amenazó con aparecer en sus labios

- Sé que ayer me comporté como una idiota - comenzó Cheryl con sinceridad - quería compensarte

- Entonces, ¿te estás disculpando? - Antoinette enarcó una ceja, sin moverse aún de su posición bajo las sábanas

- Me disculpo por la forma en que me comporté - asintió Cheryl - Y aunque no me arrepiento de haberle comprado a Keila los nuevos patines, sí me arrepiento de no haberlo consultado contigo primero

Antoinette movió la cabeza lentamente, asimilando las palabras de Cheryl

- No volverá a ocurrir, lo prometo - añadió Cheryl

Ante esto, Antoinette sonrió alegremente, sentándose y besando a Cheryl profundamente en la boca

- Eso es todo lo que quería oír; gracias

Cheryl enarcó las cejas, sorprendida por el calor y el cosquilleo que el beso evocaba en su cuerpo

- ¿Tienes café y panecillos dobles tostados en esa bolsa para mí? - preguntó Toni con una sonrisa

Cheryl negó con la cabeza y volvió a centrarse en la mujer que tenía delante

- ¿Tal vez?

- ¿Y eso es un ramo de amapolas para mí? - preguntó Toni de nuevo, con la alegría pintada en sus rasgos

- Tal vez - Cheryl se encogió de hombros, con indiferencia

Toni sonrió

- Veo que aún conoces el camino a mi corazón - batió las pestañas

Cheryl se rió y le dio las ofrendas de paz a Antoinette, que olió las flores con una sonrisa encantadora y se lanzó a por la comida

Anthony se puso a llorar desde su habitación, rompiendo su pequeña burbuja