Un brujo malvado, esta harto de seguir el destino, que impuso un ascendiente, esta harto de vivir como fue educado, durante toda su vida. El odia a toda su sangre, y sólo quiere una vida algo normal.
El brujo, tiene una idea, crea y encantar un cuer...
Hace algunos días la ciudad de Ogyn, una gran urbe que había crecido gracias al comercio y las apuestas, experimento el desastre cuando un extraño y lúgubre comerciante, llegó al pueblo y le vendió a un joven mago un gremio de tapa oscura. Gracias al grimorio el mago fue tan poderoso y esto llamó la atención de otras personas, que fueron a comprar más libros al comerciante.
Pronto una gran parte de la población, tuvieron una copia de aquel grimorio, sea magos y no usuarios mágicos aprendieron sobre la magia utilizando aquel grimorio, los habitantes estaban felices con esos libros, pero los ciudadanos que tenían esos libros, se volvieron locos, rabiosos y le invadió la ambición de poder, ellos atacaron a otros habitantes de la ciudad, produciendo varios altercados, y aunque las autoridades intervinieron, poco pudieron hacer para detener la ola de destrucción y sólo fueron cuestión de días, para que la ciudad se quedase en ruina.
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Sobre un edificio se encontraba el comerciante, un tipo que estaba vestido con una túnica, y una capucha negra, y que observaba todo el caos con una sonrisa en su rostro, había agregado una ciudad más a los dominios de su señor, el cual domina a los grimorios y el caos que procede de estos libros oscuros.
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Mientras la ciudad de Ogyn se consumía en el caos, la joven Nisha recorría el camino que le llevaría hacia la fortaleza, el destino en donde debía entregar la carta que llevaba el moribundo mensajero que se había encontrado en su viaje. La joven viajera no despejaba su vista del mapa, mientras caminaba por un sendero, y siguió caminando sin desviarse del camino hasta que llegó frente a una muralla fortificada.
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