Taiju Shiba

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- taiju mas~ - suplico la femenina con deseo mientras pasaba sus suaves manos por sobre su cuerpo desnudo.

- cómo me encanta que supliques por más - el chico aumento el movimiento con sus dedos, bombeando el interior de la femenina con velocidad.

- si!~....asi~ - tocaba su clítoris de manera apresurada para llegar a su orgasmo, y el chico notando eso bombeo más rápido logrando el orgasmo tan deseado.

El bicolor acercó su rostro a la feminidad contraria, sostuvo una de sus piernas y la puso por sobre su hombro logrando exponer mas su sexo.

- aah!~ - la chica sostuvo los cabellos ajenos y acercó más su rostro a su vagina, la estaba sobrestimulando y le encantaba.

Rápidamente llegó a su segundo orgasmo por la experta lengua de su novio, poco le importaba a ellos que los escuchen los vecinos.

- es mi turno nena - la chica velozmente se puso de rodillas sobre la cama acercando su rostro a la erección desnuda del chico, la tomo con las dos manos y la empezó a masajear de arriba a abajo, admirando la punta rosada de esta.

Acercó su pequeña boca a la punta de su pene, metiendo primero la punta y succionandola, retiro su boca y escupió sobre su pene, haciendo que la lubricación sea perfecta.

- aah....~ - el chico soltó un fuerte suspiro inclinando su cabeza hacia un lado, disfrutando de la calidez de las manos ajenas, tomo el cabello de su novia y presionó su cabeza sobre su erección, soltando un fuerte gémido al conseguir que la chica metiera su erección hasta el fondo de su cavidad.

El mismo controlaba los movimientos de la chica, empujando su cabeza haciendo un vaivén provocando que la chica peli____ se ahogara de vez en cuando, basto unas cuantas lamidas a su glande para que se corriera en su boca.

- aah~... Bien - la chica se volvió a hincar en la cama, tragando el semen de su pareja y llevando a su boca lo que estaba fuera de esta - cariño ven.

El bicolor llamo a la chica calmando su respiración por su recién de orgasmo, tomo a la chica de la cintura y la pego a una de las cuatro paredes de la habitación.

Empezó a frotar su erección contra su trasero, metiéndolo entre sus nalgas y apretando las mismas para hacerlo más placentero.

- voy a entrar - menciono mientras agarraba una de sus piernas y la alzaba levemente permitiéndole acceso a sus dos entradas - 1 o 2?

La chica se mostró claramente confundida por la repentina pregunta.

- 1? - dijo dudando.

- dos entonces - el chico no espero otra respuesta de la peli_____ y entro en su entrada trasera sacando un gran gémido de ambos, uno de dolor y otro de exitacion pura.

Después de unos cuantos segundos para que la chica se acostumbrara se empezó a mover duramente en su interior.

- le-lento...~ - la chica apenas podía formular una palabra, los azotes contra su tracero evitaban su habla, y eso al shiba mayor lo exitaba en exceso, saber que por el y su miembro la chica se encontraba flaqueando y gimiendo, y solo por el.

- Taiju!~ - la chica gimió fuertemente contra la delgada pared de la habitación, sintiendo como era alzaba y volteada provocando que su espalda chocará contra la pared, el chico saco su miembro y lo introdujo de imprevisto en su húmeda vagina, embistió de manera lenta pero profunda.

La femenina se agarró de su espalda mientras que enterraba sus uñas en ella, sin mencionar que el chico con el que se encontraba follando le había pagado las uñas.

- más...~ - ella misma empezó a moverse de arriba hacia abajo, llendo mas rápido que antes, el chico cumplió su pedido y empezó a moverse más rápido, dirijio su boca hacia los senos redondos de la chica, mordiendo levemente los pezones.

Después de unos cuantos minutos sus embestidas se empezaron a hacer irregulares, dió unas cuantas embestidas más y la chica se corrió, seguido del chico.

Ambos relajaban sus respiraciones lentamente, el bicolor se dirijio a la cama y se acostó sobre ella, con la chica todavía encima de el, sin mencionar que todavía no había salido de su interior.

- otra vez! - la chica alzó la voz con una sonrisa pidiendo más.

- amor estoy cansado...- el shiba mayor dirijio su mano al tracero de su novia y lo apretó levemente sin causarle daño.

La femenina no satisfecha con su respuesta empezó a mover sus caderas sobre su miembro, bastaron unos delicados y sensuales movimientos por parte de la chica para que el contrario ya tuviera su miembro erecto.

La chica claro que sabía cómo tratar con el shiba mayor, y el sabía que ella podía dominarlo, y así por las suaves palabras y sensuales movimientos de la chica logro que volviera a caer a sus pies.

De esa manera empezó a mover su cadera para satisfacer a su princesa.

One shots • Tokyo revengers ✓ +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora