•Capítulo 24•

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-¡Hermano, reacciona! -gritó Yuri, ella no deseaba pelear a muerte contra su hermano.

Rika corrió hasta ella y trató de matarla con un golpe en la cabeza, pero esta logró ser más rápida y esquivar.

-¡Vamos Yuri!, puede ser más fuerte que este idiota, ¡entra en su mente! -alentó Mayuko, mientras ataba al castaño, de manos y pie.

-Tienes razón, Mayu. ¡Lo voy a salvar! -Yuri se alentó, y cerró los ojos concentrando todo su poder para poder entrar en la mente de su hermano. -Ay, espero no estar dormida por mucho tiempo.

-No te preocupes, Yuri. Vé, yo protegeré sus cuerpos. -habló Mayuko con seguridad, agarrando con fuerza su cuchillo, lista para eliminar a cualquier enemigo que se metiera.

-Uno de ustedes morirá, y nadie podrá evitarlo. -habló Aikawa, desesperado, con ambos ojos tensos mirando a su alrededor con odio.

-¿Y tú? Cierra la boca. -habló Mayuko, poniendo su cuchillo rosando el cuello de este.

-¡Rika!... -gritó Yuri, segundos antes de caer desmayada al suelo, junto con su hermano.

-Vamos Yuri... tu puedes.. -hablaba para si misma Mayuko.

Mientras tanto, el francotirador no se había rendido, ya había buscado en cada habitación y rincón de cuatro edificios cercanos, y nada le daba una pista de su mujer.

~Franqui.

-¿¡Mujer?! -Yuka se dió vuelta, esperanzado de haber escuchado a su mujer. Retrocedió y volvió a buscar en las habitaciones anteriores, mientras repetía; -, ¡mujer!. Mierda, ¡mierda!.

..

Narra ____.

Desperté tan adolorida, mi estómago se sentía como bolsa de boxeo.
Me levanté del suelo algo mareada, hasta acercarme a la ventana más cercana y ver en donde estaba.

Muchos edificios, que novedad.

Recibí un inesperado golpe en la cabeza, hasta caer al suelo.

-Ahora nadie podra detenerme, zorra. -habló una enmascarada, esa maldita de cabellos rosados. -Lo mejor fue que el maestro Ai, me ordenó matarte, ¡Ja! -rió alegre, sonriendo con maldad.

No dije nada y me levanté, no alcancé ni a respirar hondo debido a que me dio una patada en el estómago, luego caí arrodillada, y me tomó del pelo con fuerza.
-Te voy a dejar agonizando, vas a estar tan destrozada que ni tu maldito "Franqui" te va reconocer, zorra.

Dijo Franqui..

CIERTO, debo encontrarlo, tiene que saber la verdad, no puedo morir aún.

-Saluda al doctor Mamoru de mi parte. -acercó su puño cerrado hacia mi rostro, pero lo detuve con ambas manos, agarre y doblé su muñeca. Luego esta soltó mi cabello soltando un quejido.

Me puse de pie, y antes de que ella se pusiera derecha y firme, lancé una patada hacia su estómago, haciendo que esta casi se cayera de espaldas.
Mierda, si que es fuerte.

-Con que si sabes moverte, bien, veamos hasta donde, ¡maldita!. -se lanzó sobre mí, sus manos trataban de reguñarme el rostro, pero la sostenía de los codos con mis manos.

Sentía mi sangre recorrer mi cuerpo.. o no, creo que más bien era una especia de electricidad que me hacía sentir más viva, que locura.

De repente se me vino el recuerdo de cuando entré en la mente de Franqui, ¿por qué? No lo se.

La enmascarada trató de pegarme en el estómago con su rodilla, pero un mini segundo antes de lograrlo, puse mi abdomen tenso. Espera, ¿desde cuando tengo un abdomen marcado? Que.

Noté que ella hacia las cosas sin pensar, y era algo lenta, pero si que tenía fuerza y resistencia.
Trató de darme un cabezazo, pero antes de que me llegara a tocar, la pateé en las rodillas, esta se inclinó pero seguía estando de pie. Me alejé.

Sacó un cuchillo corto, vi que traía un arma pero no lo pretendía usar.

-¿Por qué directamente no disparas? -pregunté estando lista para esquivarla.

La loca de pelo rosa comenzó a reír.
-¡Voy a matarte, lento! -se me acercó y apuntó su cuchillo hacia mi estómago, detuve su ataque con una mano, agarrando cerca del filo del arma cortante.

De repente siento mucha sed, mierda.

Volví a recordar, Ross.

¿Quién era él?

Mi cabeza duele.

¿Estoy pensando esto, mientras una enmascarada trata de apuñalarme? a.

Apreté con fuerza su mano, esta comenzó a moverse desesperada y cayó encima mío.

PUTA, CAÍ AL PISO.

Con su mano libre, trató de asfixiarme, o más bien si lo estaba haciendo.

-¡Ahora si! Maldita -me gritó cerca del rostro, yo abrí mi boca para tratar de respirar pero era complicado.

Con mi mano libre, aproveché su acercamiento hacia mi rostro, y posé mis dedos en su ojo, apretando este de una manera algo rara, algo super doloroso.

-¡AAH! -comenzó a gritar tan fuerte, pero seguía sosteniendo el cuchillo y ahorcándome.

Tragué de tratar saliva, y apreté su muñeca, de la cual su mano me asfixiaba,. Logré alejarla de mi cuello con dificultad, esta me miraba con odio, y con un ojo cerrado.

Con su otra mano, trate de levantarme, cosa que no se me hizo tan difícil, y lo hice con fuerza hasta hacer que ella quedara sobre el suelo.

Quebré su muñeca con la que anteriormente trataba de asfixiarme, ella logró, no se como, apuñalarme, clavando el cuchillo en mi pierna. La pateé muchas veces, sentía que mi rostro no generaba ninguna expresión. ¿Qué me estaba pasando?

Dejé de patearla al ver que ya no podría hacerme nada.

Quité el cuchillo de mi pierna y me lo guardé dentro del brasier.
Es que mis otros bolsillos estaban ocupados. Si.

Nuevamente, huí del lugar.



🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄🐄

Feliz navidad? :D

Hola reviví.

No subí más capítulos porque no sabía que escribir, pero ya que estoy de vacaciones tendré mucho tiempo e inspiración para otras historias.,.,.,.,

Disculpen las faltas de ortografía, escribo esto algo rápido, 5% de batería 👺

Bueno, eso.
Hasta el próximo cap

•Mi Ángel 2•  ▪︎Invasión en las alturas/tenkuu Shinpan▪︎ Franqui Where stories live. Discover now