Capitulo: 40

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Maraton 2/2

Cooley

Ese era el nombre de la empresa que Jake había encontrado. Y justo en este momento nos encontrábamos frente a ella. Tenia los nervios a flor de piel, Jake parecía estar mas tranquilo, pero sabia que los nervios también le invadian.

Hoy podía ser el día en que conociese a mi familia biológica, todavía me era difícil asumirlo todo, pero tenia que estar preparada para enfrentarme a ella.

Antes de entrar le cogí la mano a Jake para sentir su apoyo y no arrepentirme de lo que estábamos apunto de hacer.

Las puertas de cristal se deslizaron, abriéndose de par en par por el sensor de moviento.

Todo el interior era precioso; las paredes eran blancas, con el suelo de madera, las lamparas colgaban del techo como telas de araña, la gente iba muy bien vestida y había un olor en el lugar a vainilla que me fascinaba.

-¿Os puedo ayudar?- nos preguntó una mujer rubia con gafas desde detrás del mostrador.

-Si, buscamos al dueño de la empresa- le dijo Jake.

-En este preciso momento se encuentra en una reunion-

-¿Sabe cuando terminará?- le pregunté.

-No puedo saberlo, pero le avisaré de que le esperais-

-Gracias-

Nos alejamos de la mujer y nos sentamos en los sillones de una gran y preciosa sala de espera.

Todo estaba colocado en su sitio, el color oro de las lamparas resaltaban por todo el lugar.

-No me siento preparada para esto-

-Llevamos una vida entera engañados, es el momento y lo afrontaremos juntos-

Le asentí y volví la vista a todo el lugar obserbando cada milimetro.

Estubimos varios minutos esperando hasta que la mujer de antes apareció frente a nosotros.

-El señor ya ha salido de su reunion, podeis pasar a su despacho-

-Muchas gracias-

Me aferré al brazo de Jake cuando nos levantamos.

¿Cómo será?

¿Cómo reaccionará al vernos?

Un millon de preguntas se plasmaron en mi cabeza en solo pensar en que pasará.

La mujer nos guío hasta el ascensor indicandonos que subieramos, pulsó el botón de la última planta. El ascensor comenzó a ascender, hasta que la puerta se abrió haciendo un pequeño ruido.

Ella salió primero y nosotros la seguimos con nerviosismo.

Nos llevó hasta una puerta de madera, dió varios golpes en ella y una voz grave de un hombre avisó que podiamos pasar.

-Pasad chicos- nos dijo la mujer.

Jake me miró intentando darme fuerzas para cruzar la puerta donde mi verdadero padre se encontraba.

Le asentí y él abrió la puerta. Al igual que yo, estaba muy nervioso pero él lo sabia ocultar.

El hombre nos daba la espalda mirando por el ventanal de cristal.

-Señor,...- cuando oyó la voz de Jake se giró mirandonos con superioridad.

-Mi nombre es Marcus Brown-

Tenia los ojos celestes, celestes como los mios. Era mi padre, queria llorar, sentía la gran necesidad de gritar y soltar toda la impotencia que sentia.

Mi Historia [+18] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora