||𝘛𝘶́ 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘰 𝘭𝘰 𝘥𝘪𝘫𝘪𝘴𝘵𝘦||~ 𝑆ℎ𝑖𝑛𝑗𝑢𝑟𝑜 𝑅𝑒𝑛𝑔𝑜𝑘𝑢X𝑇𝑢́

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-𝑴𝒂𝒍𝒅𝒊𝒕𝒐𝒔 𝒍𝒐𝒄𝒂𝒍𝒆𝒔- repetía una y otra vez mientras se tambaleaba a lo largo del camino de regreso a su "hogar"

Hacia unos momentos había tomado la última botella de licor que le quedaba y necesitaba desesperadamente más, necesitaba ahogar sus problemas y lo único que lograba sacarlo de eso era el licor, una forma cobarde de no querer estar en la realidad.
Los problemas de ser un pilar, el peso de sus hijos, la muerte de esa mujer que aunque no amo, era la madre de sus pequeños.
Posiblemente en algún momento moriría y que sería de sus hijos?,dos pequeños solos, y si un demonio no lo mataba el licor si lo haría o incluso el mismo.
Su vida se había amargado desde que decidieron casarlo con una mujer un tanto insoportable, tener que acostarse con ella solo para tener los hijos que su padre deseaba y para el final sentirse asqueado por la violencia con la que tenía intimidad, ni siquiera llegaba a disfrutar de ese momento y nunca lo hizo.
El sexo, los hijos, su esposa, nada de eso lo hizo feliz, debía admitir que tenía cariño por sus hijos pero nunca fue feliz, nunca sintió amor, jamás se sintio
humano.

Los pensamientos fueron interrumpidos por leves jadeos que dejaron inquieto al hombre.

-'En medio de la noche??'En un bosque?!'Acaso serian un par de idiotas'- pensó mientras veía a su alrededor
𝑻𝒔𝒌- hizo un leve chasquido con su lengua y prefirió seguir caminando pero mientras más lo hacía más relevantes eran los jadeos y escuchaba algo acercarse.
Se puso a la defensiva tratando de mantenerse firme hasta que vio a una mujer tratando de sostenerse de un árbol ,parecía lastimada

No bajo la guardia y trato de acercarse pero ella inmediatamente cayó al frío suelo.
Shinjuro volvió a analizar su alrededor y con una mueca de desagrado cargo a como pudo a la mujer, odiaba a todos y podía ser un imbécil en muchas ocasiones pero no dejaría a una mujer a su suerte y menos en esas condiciones.

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-𝑲𝒚𝒐𝒋𝒖𝒓𝒐 𝒉𝒂𝒛𝒕𝒆 𝒄𝒂𝒓𝒈𝒐 𝒅𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒐- dijo el hombre con molestia mientras dejaba a la mujer en una habitación.

El pequeño solo asintió con cansancio por lo tarde que era y se acercó a la mujer, mientras Shinjuro salía de la habitación estrellándose con las paredes y tropezando con todo lo que estuviera en su camino.

Llegó a su habitación y se despojo de su vestimenta, quedando expuesto a todo y así se dejó caer en su futón quedando instantáneamente noqueado por el sueño y el licor.

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Unos ruidos hicieron que el mayor se despertara de su largo y tranquilo sueño, algo que rápidamente lo puso de mal humor y ni mencionar el dolor de cabeza que impactó contra el apenas trato de levantarse.

Llegó a la puerta sosteniendo su cabeza y la deslizó encontrándose con un Senjuro sonriente, que apenas le vio se quedó en silencio y su expresión cambio a una de susto.

- Padre - intervino el pequeño Kyojuro - disculpanos no quisimos despertarte - hizo una reverencia con algo de preocupación

El mayor solo observaba al pequeño con severidad hasta que otra voz se hizo presente.

- Señor disculpe mi falta de respeto - dijo una mujer apareciendo y haciendo una rápida reverencia

La cara de Shinjuro era de estallar entre enojo y sorpresa , no sabía quién demonios era esa mujer .

- KYOJURO QUIEN ES ESTA MUJER!!??!? - grito molesto y agarrándose de la puerta
- padre - dijo el mayor poniéndose frente a la mujer, quién cuando se levantó de su reverencia tuvo una mirada de sorpresa y rápidamente un sonrojo asomo sus mejillas - tu la trajiste ayer... Ella venía herida de su brazo y yo hice lo que me dijiste - dijo tratando de tranquilizar a su progenitor - ¿Padre? - repitió el pequeño al ver que su padre había adquirido un color rojo en todo su rostro.

El mayor recién se había dado cuenta que no traía ni la más mínima prenda de ropa y la mujer lo había observado con detenimiento, rápidamente entro en su habitación y cerró la puerta con fuerza.

Tratando de tranquilizarse se vistió con su yukata y respiró hondo antes de volver a salir y recordar todo.

Se dirigió a la cocina donde su olfato fue invadido por el olor más exquisito que jamás pudo tener presente, observó a la mujer que había traído recientemente con desconfianza y a sus dos hijos quienes estaban cada uno al lado de ella mientras preparaba la comida.

- Tu nombre - dijo con voz gruesa y autoritaria logrando que esa extraña se diera la vuelta y chocarán miradas.
- _____ - susurro bajando la vista - creo que debo darle explicaciones Rengoku-sama -

El mayor le lanzó una mirada a Kyojuro quien instantáneamente tomo a su hermano y salió de la cocina, _____ solo observó con detenimiento la acción del pequeño y comenzó a hablar.

- Watanabe _____ - repitió la mujer, mientras Shinjuro la analizaba completamente - ayer en la noche escape de mi hogar - susurro
- Habla alto y mirame - dijo molesto mientras se acercaba a la chica , quedando frente a ella, el tuvo que bajar la mirada ya que ella era pequeña algo que recién notaba .

Al ver que esta no respondía la tomo del mentón y dirigió su cabeza hacia arriba para que su vista chocará con la de el, en el rostro de ella solo se distinguía nerviosismo y sus mejillas tomaban color ante la acción del Rengoku mayor.

- Y bien - hablo Shinjuro - estoy esperando - ambos quedaron en silencio luego de eso, parecía que habían pasado minutos en esa posición ...

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Primer cap. La verdad no vi historias con este personaje así que intento escribir esta, no soy muy buena y sólo he escrito un libro en toda mi vida de Wattpad.

Trato de esforzarme e intentar que esto sea un poco largo, perdón por los errores intento hacerlo bien 🥲