Corazón de hierro

¿Malas Decisiones?

Los recientes eventos trágicos en el edificio williams no pararon de captar la atención de todos los residentes de aquella ciudad. Todos los medios de comunicación daban a detalle lo que había ocurrido esa noche, aunque no tan detalladamente, pues aún tenían muchas dudas sobre lo que había pasado en realidad, y al parecer el único testigo, y posible sospechoso era Thomas, quien había sido su asistente y mano derecha. Al pobre chico aún se le notaba  nervioso y aterrado por presenciar la imagen de su jefe colgado en el techo de su oficina, y después de que todo se descubrió Thomas no tardo en ser interrogado.

Sin embargo el joven tuvo la enorme suerte de quedar libre de culpas, ya que tweek lo ayudó con eso al dejarle todas las evidencias posibles de que su jefe en realidad era un abogado corrupto que se aprovechaba de las personas de bajos recursos. El también estuvo involucrado en eso, lo admitió con mucho pesar y arrepentimiento, pero no lo hizo por gusto, sino porque vivió años bajo las amenazas de esté y el constante miedo de que hundiera más a su madre en la cárcel por un simple capricho.

Para algunos no sonaba tan convincente su relato, pero toda la evidencia estaba ahí, y con williams ya muerto, el joven finalmente pudo ir a visitar a su madre a la cárcel. La mujer ya cansada de estar viviendo bajo las rejas se alegro de ver a su hijo después de tanto tiempo y sintió una agradable paz al enterarse de que williams finalmente obtuvo su merecido. Ambos estaban felices de verse y poder hablar, sin embargo ahora quedaba el siguiente paso, hacer que dejaran a su madre en libertad, y Thomas haría todo lo posible por conseguirlo.

Aunque ahora debía empezar de cero... Ya era una persona libre, sin más amenazas ni humillaciones, Thomas sabía qué debía trabajar muy duro en su autoestima y confianza, ya que williams se había encargado muy bien en todos esos años de hacerle sentir cómo una completa basura, inútil, y sin ninguna probabilidad de ser alguien en la vida gracias a su condición.

"Eres un chico maravilloso Thomas... Inteligente y capaz de aprender muchas cosas más. Y no lo digo sólo porque sea tu madre, allá afuera hay miles de personas cómo tu, que luchan cada día de su vida por demostrar que pueden hacer lo que sea, y que sus condiciones y discapacidades no son ningún impedimento"

Recordó las hermosas palabras alentadoras de su madre y sonrio mientras veía sus manos y dedos juguetear, eso debido a los leves nervios que sentía al tener que enfrentar el mundo sólo, pero sabía que tenía razón. Levantó su vista aún sentado en aquella banqueta del parque y observo a las personas pasar por su lado. Aún era temprano y el viento soplaba suave, en eso acomodó su chaleco y se levantó con una expresión serena, ya era momento de comenzar a vivir de verdad...

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Su entrenamiento de boxeo ya casi acababa y craig apenas y pudo derribar a tweek en una ocasión, aunque dudaba de que este en realidad haya "bajado la guardia" más bien le pareció que quizo darle una oportunidad. Al final no le dio mucha importancia y se dejo caer lentamente en el colchón del ring mientras recuperaba la respiración.

—Lo has hecho bien craig — dijo tweek, sentándose a un lado de este y sujetando una botella de agua.

—Si... De maravilla... — respondió con una pizca de sarcasmo. Sabía que no era tan rápido cómo el y hasta en fuerza también le superaba — ¿cómo es que no te ves tan cansado cómo yo?

—Bueno, es que le pones demasiado esfuerzo a cada golpe que das, es por eso que te cansas con rapidez. Ah... Y porque soy mucho mejor que tu en esto — le recordó con una pequeña sonrisa de superioridad que craig no tardo en notar.

—Y en serio disfrutas hacerme sentir cómo un debilucho ¿eh? — le mostró una sonrisa amarga, pero en el fondo le gustaba jugar así con el rubio.