La princesa mimada de Daddy

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Leah Gonzales, así me llamo. Vivo con mi tía ya que mi madre formó una familia y me dejó con mi padre, pero él murió hace algunos meses.
Me llevo muy bien con mi tía, aunque siempre dice que me mimaron demasiado y quedé un poco aniñada por ello, pero no lo creo ya que se más de un idioma y estoy aprendiendo otro y pude terminar mi carrera donde soy contadora (contable) y estoy a unas horas de ir a mi primera entrevista en una compañía bastante grande, pero no le quiero decir a mi tía ya que le quiero dar la sorpresa cuando este segura de que quede en la empresa, no quiero ilusionarme en vano y también quiero demostrarle que puedo hacer cosas importantes por mi misma. Ella ha sido como una madre para mí y sé que estará muy feliz cuando me independice, ella no pudo tener hijos pero me ha dicho muchas veces que me ve como una así que quiero que esté orgullosa de mí.
Actualmente son las 10:43 pm y estoy nerviosa, no puedo dormir, se que debo hacerlo pero mi pancita me hace cosquillas que no son muy placenteras, a veces extraño a mi papito porque él me hacía compañía y me cuidaba cuando me sentía así, también solía hacerme un rico té que me mejoraba pero no recuerdo que llevaba y mi tía dijo que debía aprender a mejorar por mi misma, pero no quiero, quiero que me mimen.
Subo las escaleras silenciosamente revisando si mi tía se encuentra pero al parecer no está en casa, cosa que no es rara ya que ella trabaja como enfermera y desde que murió papá trabaja más. Regresé a mi habitación y agarro uno de mis biberones para hacerme leche, realmente no me gusta tener que prepararla yo misma pero es mejor que no beberla.
Me distraigo con mi teléfono mientras la leche se calienta y recuerdo poner la alarma para las 6:25 am, aunque tengo casi todo listo, de verdad no quiero llegar tarde, nunca suelo llegar tarde a nada y no quiero llegar tarde por primera vez a algo tan importante,  veo que me llega una notificación de Instagram y no tengo que abrirla para saber de qué se trata, mi cantante favorito ha subido algo y me apresuro a revisar qué es, pero algo me detiene antes de poder hacerlo y es el sonido del microondas. Decido que lo mejor será hacerme cargo de mi leche y luego en mi habitación veré que subió.
¡Genial! anunció que asistirá a un concierto aquí en mi ciudad, lo pondré en mi calendario para no olvidarme. Me aseguro de cerrar bien mi puerta y apagar la luz para así acostarme a dormir y apenas termino mi biberón me quedo dormida.
Me despierto asustada por una pesadilla y lo primero que hago es revisar la hora, son las 5:07 am y me vuelvo a acostar, falta mucho para que suene mi alarma y mi entrevista es a las 8:40 am...
5:33 am y lo único que he hecho es dar vueltas en mi cama, no puedo dormir. Lo mejor será levantarme y prepararme. Mi ropa consiste en una camisa blanca formal, pantalones tiro alto negros con caída recta y zapatillas negras con un poco de tacón y para mi cabello he decidido dejarlo suelto con una diadema negra con blanco. Usaré rubor, tinta de labios, sombras café claro y un delineado café, nada muy pesado.
Me apresuro al baño para hacer mis necesidades y darme un baño, tengo tiempo de sobra y se que me va a ayudar a calmarme, lleno la tina y pongo un poco de mi jabón líquido olor a durazno, apenas lo huelo no lo dudo y me desvisto para meterme en la tina, el agua está tibia aún y tenía razón, me ayudó a calmarme.
No se cuanto tiempo ha pasado pero el agua ya está fría, me levanto y cepillo mis dientes, lavo mi cara y me maquillo. Quiero ver la hora pero me doy cuenta de que dejé mi teléfono afuera, meh, puedo esperar, aparte se que me distraerá si lo traigo y usualmente tardó mucho haciéndome el delineado.
Luego de rabietas y casi ponerme a llorar, logré que mi maquillaje quedase parejo... el problema es que sigo sin saber la hora y siento que llevo demasiado tiempo en el baño, corro a vestirme y aun sin abotonarme el pantalón veo la hora y AH! SON LAS 7:20, NO PODRÉ DESAYUNAR ACÁ YA QUE LA EMPRESA QUEDA LEJOS Y TENGO QUE IR EN TRANSPORTE PÚBLICO.
Me visto lo más rápido que puedo y me cepillo lo mejor que puedo, guardo todo en una mochila pequeña y veo mi biberón de anoche, olvide lavarlo pero no tengo tiempo, subo a la cocina lo más silencioso que puedo ya que no se si mi tía está pero no quiero despertarla y lo enjuago, me devuelvo a mi cuarto y lo dejo abierto para que se seque, cuando vuelva hago el proceso completo de esterilización.
Salgo y cierro con seguro, me aseguro de tener todo y me dirijo a la estación de metro hasta que me llega una notificación, es mi mejor amiga Emma deseándome buenos días y ese mensaje me llena de energía, le digo buenos días de vuelta, guardó el teléfono  y apresuró el paso.
Wah, casi pierdo el tren pero pude llegar a tiempo, saco mis audífonos y batallo un poco mientras desenredo el cable hasta que por fin lo logro, me toca ir parada pero eso no significa que tenga que aburrirme. Llegó a las 8:15... vale quizá estaba un poco paranoica pensando que sería más lejos pero lo bueno es que me da chance para poder comprar algo de comer, primero voy a la empresa, pero aun no pienso entrar, y de ahí parto a ver qué cafeterías quedan cerca, no pasan ni 1 minuto cuando encuentro una que se ve llena pero desprende un aroma delicioso, decido entrar y hasta ahora soy consciente del frío que hace afuera y yo no he traído abrigo, espero pacientemente hasta que me doy cuenta que la fila avanza pero la persona que está frente a mi no lo hace, la verdad es que no quiero molestarlo pero tengo personas detrás de mí y se están impacientando 
-Disculpe, señor, no quiero molestarlo pero la fila está avanzando y las personas detrás de mí se están impacientando, perdón si le interrumpí pero si aún no sabe qué pedir puede darle pase a las personas detrás de mí, yo tampoco se que pedir aún. 
-Oh, claro, lo lamento mucho, ya mismo avanzo. -WOW, ESTE CHICO ES HERMOSO-
-No se disculpe, de seguro estaba haciendo algo importante.
Saco mi teléfono para ver la hora y tan solo han pasado 5 minutos, de verdad necesito calmarme, estoy demasiado nerviosa. Llega mi turno y decido pedir un muffin de zanahoria y nueces, una botella de agua y un jugo de naranja. Pago y espero pacientemente mi pedido mientras busco una canción que me distraiga. 
-LEAH, tu pedido está listo.
-Oh, muchas gracias.
-No hay de qué.
Busco donde sentarme pero todo está lleno, pienso en comérmelo afuera hasta que veo una mano moviéndose de un lado a otro mientras ven a mi dirección, volteo a ver si se refiere a otra persona pero no veo a nadie viendo a la misma dirección, vuelvo a dirigir mi mirada a él y me señalo a mi misma mientras él asiente mientras sonríe, no sé qué querrá pero de todas formas me acerco.
-Hola, ¿está todo bien?
-Sí, es que te vi como un perrito perdido y no hay asientos, ¿quieres compartir mesa?
-Oh muchísimas gracias, supongo que sí estaba un poco perdida, mi nombre es Leah por cierto, Leah Gonzales.
-Mucho gusto Leah, yo me llamo Andrew. Jamás te había visto por acá.
-Es mi primera vez por aquí, de hecho vine a una entrevista, wow esto está delicioso.
-Jajajaja, eso parece.
-¿Quieres probar?
-¿Puedo?
-Claro, espera, ¿eres alérgico a las nueces o zanahoria?

-No sé hasta donde yo sé, pero gracias por preocuparte.

-No hay de que, lo aprendí de mi tía quien es enfermera aparte tampoco me sentiría bien si la primera vez que te veo te causo alguna reacción alérgica.

-Si está bastante rico, ya se para pedirlo a la próxima.

-Y, ¿trabajas por acá?

-Sí