MI AMOR IMPOSIBLE - TERMINADA

CAPITULO XXI

X: - escucha un sollozo - estás bien?

- me enamoré - susurro -

X: Wow... Que bueno - un poco confundida -

- no, no lo es si la persona piensa en otra mientras está contigo

X: wow - asombrada - quieres hablarlo

- por eso te llamé

X: bien dame unos minutos y te vuelvo a llamar, antes dime con quién quisieras hablar? Tu psicologa, tu terapeuta, tu amiga, tu ex?
- rie un poco -

- rie - con la que menos me regañe

X: - rie - hablaré con mi esposa y ya te escribo

- si estás ocupada dejémoslo para otro momento

X: no, ella lo entenderá, lo sabes y además no debes posponer tanto tu desahogo o te juro que voy por ti

- no, tranquila espero tu llamada

Efectivamente minutos después hacían una videollamada, Diana contó todo desde un principio o mejor dicho desde su llegada a México fueron muchas horas las que estuvieron hablando, al finalizar y luego de unos cuantos regaños, a lo lejos en la videollamada se escuchó un "amor"

- llegó?

X: si, ya sabes que tienes que hacer Diana, piensa bien que quieres para ti y si quieres continuar sintiendote así

Por el lado en el que salía la voz Diana vio como una mujer se acerca a su amiga y la besa apasionadamente, ella vira los ojos luego la mujer se fue

- dile que deje los celos - un poco molesta -

X: la que lo está es otra - rie mientras cierra su agenda -

- si claro, lo hace no más para "marcar territorio"

X: - rie con más ganas - no hablamos de ella, estamos hablando de ti

- yo ya terminé

X: bueno hablamos después y no te desaparezcas, ya sabes lo que opino pero la decisión la tomas tu

- asiente - gracias

X: no hay de que, te dejo que me espera una noche larga

- estúpida - rie y cuelga la llamada

Miro a su alrededor y estaba llena de papel usado por toda su habitación boto todo lo que tenía en la cama al suelo y se acostó en el centro de ella Tania muchas cosas que pensar y esperaba encontrar una pronta solución

*Rancho*

Cuando Diana se fue Isa entró a la casa sus lágrimas seguían cayendo, su esposo se acercó para preguntarle qué le sucedía y ella solo le dijo que volvieran a la ciudad, durante el camino ninguno hablo, José Manuel estaba preocupado por su esposa, podía sentir la tristeza que la embargaba, llegando a la ciudad

I: puedes dejarme en casa de Mayte?

JM: no te gustaría hablar primero?

I: lo haré con ella esposo - le toca su mano sin verlo - en su momento te diré a ti

José Manuel no dijo nada y siguio avanzando unos minutos después parqueaba al frente de la casa de May, Isa se bajó sin esperarlo saco su bolsa y fue hacia la puerta, timbro insistentemente, hasta que la voz de May se escuchaba al otro lado de la puerta

M: ya voy, ya voy, pero ni que se fuera acabar el mundo - abriendo la puerta - Isa

Ella ingreso hacia la sala José Manuel la miró