CAP 1

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"Pasando una nueva hoja". Eso es un buen dicho. Dejar atrás el pasado, ser una buena persona es lo correcto. Sin embargo, sería mejor tener una situación en la que no tenga que pasar una nueva hoja en primer lugar.

Desafortunadamente, no estaba en la mejor situación. Porque era un completo idiota, como el típico rufián. Desde la escuela secundaria, me suspenden con frecuencia por hacer todo tipo de cosas malas y me expulsaron de la escuela secundaria después de no asistir durante un año.

Mi madre, que nos crió a mí y a mi hermano sin su esposo, también dejó de regañarme con cara de desesperación cuando me expulsaron de la escuela. Ella debe haber estado muy cansada. Debió haber querido renunciar a su hijo ya que estaba ocupada trabajando en un restaurante desde el amanecer y ganándose la vida. Después de no asistir a la escuela, pensaba que mi mundo era como un potrillo sin riendas, así que hice todo lo que quería. Tomé dinero a la fuerza de personas de la misma edad que vestían uniformes escolares, robé el dinero de los borrachos y bebí alcohol todos los días. Libre de la interferencia de nadie, fumaba dos o tres paquetes al día, y luego comencé a consumir drogas, comenzando por lo que alguien me daba. Me hice un tatuaje para presumir, monté una motocicleta, salí con tipos como yo y luché.

Probablemente porque lo único que sabía hacer era pelear, lideraba el grupo y disfrutaba haciendo hazañas peligrosas en la motocicleta en medio de la noche. Pensé que era genial en ese momento. Pensé que era un gran tipo. Todos me tenían miedo, ni siquiera se atrevían a mirarme a los ojos. Poco sabía que todo esto gradualmente me adormeció y me empujó a un abismo ineludible.

De vez en cuando, escucho algunas historias sobre personas que cambiaron de página, una de las cuales dice que un día de repente se sintió escéptico acerca de sí mismo y volvió en sí. ¿Qué bueno sería si yo pudiera hacer eso también? Hubiera sido bueno si me hubiera mirado al espejo y me hubiera sorprendido por el delincuente de cabello rubio y hubiera recuperado mis sentidos. Sé que es inútil arrepentirse ahora, pero cuando pienso en el pasado, la culpa pesa sobre mi corazón.

Cuando otras personas alcanzaron la edad en la que tenían que apresurarse para prepararse para los exámenes de ingreso a la universidad, trabajé para un negocio de préstamos y les dije que estaba consiguiendo un trabajo. Lo que hice fue cobrar el dinero. La mayoría de las personas que no podían devolver el dinero eran personas que apenas podían vivir, pero que no tenían adónde huir porque eran muy pobres. Sin embargo, en mi opinión, era solo un pago extra. Cometí violencia, amenacé a niños y mujeres, esperé hasta la medianoche y los amenacé con un cuchillo. Hice cualquier cosa para conseguir el dinero.

La cantidad de dinero que gané fue mayor de lo que pensaba y estaba tan orgulloso como siempre. Mira, ganar dinero es fácil. Todo el mundo todavía me tenía miedo y parecía que no había nada que no pudiera hacer. Mi madre, que pasó una década trabajando en el restaurante y no podía salir del alquiler mensual de una habitación individual en el sótano, era lamentable e irritable. Así que nunca traje a casa el dinero que ganaba. Estaba ocupado usándolo para entretenerme. Bebía licor caro todos los días, deambulaba por bares y pubs de lujo y disfrutaba sintiéndome una persona increíble.

La única persona en la que gasté dinero fue en mi amante, Myeongshin. Habiendo abandonado la escuela secundaria como yo, era un hombre guapo que podía hacer creer a la gente que era una mujer. Myeongshin, quien me hizo darme cuenta por primera vez de que podía dormir con hombres, no hablaba mucho, solo me seguía como un cachorro, estimuló mis instintos protectores. No había necesidad de preocuparse por quedar embarazada y podíamos satisfacer las necesidades fisiológicas en cualquier momento si era necesario. Al principio fue solo eso, pero después de conocerlo durante un año, comencé a pensar que era mi mujer .

VENGANZA[PAYBACK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora