My Queen [Lukloe]

Capitulo 33. ¿Nueva Oportunidad?

Habia una enorme tensión en la habitación, el chico observaba como Chloe caminaba de un lado a otro, tratando de encontrar las palabras correctas a lo que estaba por venir.

-Se que esto es muy repentino, y ambos tenemos una vida lejos del otro, desde un hotel el cual esta saliendo a flote y tu una carrera musical -Sus ojos estaban llorosos mirando, al azul celeste del Couffaine quien sonreía tranquilamente.

-My Queen... -Se acerco a ella posando una mano en su mejilla. -¿Dime que quieres de esto? -Ella abrió la boca, mientras el plantaba un beso en su frente.

-Luka...

-Yo se lo que quiero... Y es a ti... Solo a ti. -Fueron las unicas palabras que pudo decir, haciendo que pequeñas lagrimas se asomaran en los de la rubia. -Te amo Chloe, nunca deje de hacerlo.

El corazón de Chloe estaba latiendo rápidamente, sabia lo que sentía y tenia miedo, miedo a fracasar una vez mas y que todo lo hermoso que vivió con el Couffaine se fuera por la borda, una vez mas tener que separarse del amor de su vida, sabiendo que el era todo lo que tenia en ese momento y era suficiente, durante cinco años rechazo citas de altos herederos de New York por estar enamorada del su mechas azules, por años enteros se arrepintió de no haber dejado que el hablara como deberia, de decirle que lo amaba y que lo extrañaba demasiado... Sus ojos estaban llorosos y se hundió en el pecho del hombre, un hombre que ahora tenía 25 años ya no era el chico que ella habia conocido. Los brazos del hombre la rodearon acariciando su cabellera dorada, estaba ahi con el en su habitación, los sentidos estaban a flor de piel y sus corazones se habia sincronizado.

Sabia que necesitaba ese momento para ellos, sabia lo que queria y solo queria estar en ese momento con el, en esa pequeña burbuja que los llenaba. Se sentia calido, y seguro hace mucho que no sentia eso.

-Probablemente aun tenemos oportunidad... -Pensó durante unos minutos antes de hablar
-Luka...

-Dime Chloe

-Salgamos un momento, necesito aire -El asintió, saliendo de la habitación.

¿Es posible que podamos estar nuevamente juntos?
Se pregunto, mientras el chico caminaba a su lado, por la cera había silencio y tensión. El ya no era el mismo chico del que ella se enamoró ahora tenia 25 años pero realmente estaba bien con ello, Chloe Bourgeois observaba como había parejas en las grande ciudad de Manhattan, algunas veces cuando pasaba en su auto, ponía cuidado a ciertas parejas que corrían en la lluvia, cubriéndose con una paraguas y reían. Imaginando que al llegar a su casa harían la cena juntos y verían algunas series, otra veces miraba a los niños en Central Park corriendo para alcanzar a sus papás.
Todos ellos tenían una vida y un propósito que era llegar a dónde los hacia felices, sin embargo a pesar de tener un hotel creciendo, ella tenía un vacío, un lugar a dónde llegar y ser recibida con un vaso de chocolate caliente mientras que abrazaban a las mantas de la cama mirando películas de Disney o animadas.
La última vez que sintió ese calor fue con Luka un chico que llegó para cambiar su vida frívola, por una mas calida. Aun puede recordar como sus ojos se conectaron en el río sena, hace casi siete años. Aun puede sentir sus ojos celestes brillando a la par de la noche como dos estrellas, sintiendo que solo eran para ella.

Fue un suspiro leve, pero pesado captando la atención del Couffaine, estaban en Central Park las seis de la tarde se acercaban. Ella necesitaba hablar y sacar de una vez por todas, lo que a ella le sofocaba, era tan ahogador ese pensamiento que tomo asiento en una banca, invitando a que el hiciera lo mismo.

Observando los colores del otoño, entre café y verde, sabiendo que prontamente vendría el invierno, las hojas de los arboles caian lentamente, los gritos de los niños alrededor jugando con su familia. Sus pensamientos fueron sacados cuando el peli-negro tomó su mano, delicadamente entrelazando con ella sus dedos.