—. ¿Cuándo me quitarán las suturas? — Los orbes azules buscaron el rostro del pelirrojo mientras éste colocaba shampoo en sus mechones dorados.
—. No estoy muy seguro, le preguntaré a Karen cuando la vea hoy. — Pasó a tomar el jabón con cuidado para colocar sobre la piel del rubio, el menor se tensó como ya era costumbre ante eso, Axl intentaba hacerlo rápido pero no era tan fácil, algo que llamaba su atención era lo suave que era la piel del menor y los escalofríos que le provocaba tocarla aunque fuera por cortos segundos.
—. Ella... Ella se va a enojar contigo por lo de ayer, ¿Verdad? — Rose soltó una risita negando con su cabeza, no quería preocuparlo, ya suficiente tenía con las cosas que pasaban con su familia.
—. No importa, mientras tú estés bien creo que no se va a enojar. — El rubio cerró sus piernas por inercia cuando los dedos del pelirrojo llegaron a sus muslos, ya era normal y Axl no peleaba por ello, solo esperaba a que tomara confianza de nuevo para terminar con su trabajo.
—. Lo siento... Eso no debió pasar... — Apretó sus labios hasta el ojiverde tomó la regadera para limpiar toda la espuma y el jabón sobre su cuerpo.
—. No es tu culpa, tu padre es peor de lo que pensé. - Apartó sus cabellos de su rostro notando que el menor parecía estar un poco desconcentrado, cuando sus miradas se cruzaron sintió la necesidad de abrazarlo, de verdad se sentía culpable de todo lo que sucedía a su alrededor.
—. ¿No te duele? — A penas pudo señalar su labio por la bolsas en sus brazos, el pelirrojo negó levantándose para ir por las toallas, secó sus cabellos y luego su cuerpo para quitarle las bolsas.
—. ¿Por qué? ¿Te enseñaron que para quitar el dolor hay que besar los golpes? — Bromeó notando como las mejillas del ojiazul tomaban un intenso rubor y desviaba su mirada.
—. No... — Axl le ayudó a salir de la bañera pasándole las prendas para que se vistiera, el menor se apresuró a hacerlo sintiendo una gran tranquilidad cuando la tela cubrió su cuerpo.
—. Debo irme, el desayuno ya está listo y el almuerzo está solo de calentar, mañana iremos a hacer despensa. — Explicó saliendo del baño, siendo seguido por el rubio hasta que llegaron a la sala.
—. De acuerdo... Ten cuidado. — Con algo de duda se acercó a abrazar al colorín, Rose correspondió el gesto al instante ocultando su rostro en el hombro del menor, el aroma al jabón mezclado con el aroma natural de Cobain logró embriagar sus sentidos por completo.
—. No dejes que Erin te venga a molestar, come bien y cuídate, por favor. — Dejó una pequeña caricia en su espalda antes de soltarle dedicándole una amable sonrisa.
Se alejaron por completo, Axl salió del departamento llevándose consigo su mochila, fue hacia el ascensor sacando una liga para el cabello, una desventaja del trabajo que ahora llevaba era que le exigían atarse el cabello, no podía negarse porque para eso estudió durante casi diez años de su vida. Al llegar a recepción terminó de recoger sus mechones dejando solo su flequillo y un par de mechones un tanto libres, eran los que no eran demasiado largos.
—. Oh, Axl, ¿Estás ocupado hoy en la noche? — La voz de Erin le hizo detenerse, la volteó a ver con una mueca de disgusto.
—. Sí, Kurt no debe preparar la cena, eso lo hago yo. — Y salió del edificio con una sonrisa bastante amplia, tal vez debería ir buscando otro edificio para vivir y no tener que soportar a esa chica.
Pidió un taxi que lo llevó de camino a su trabajo, al llegar se adentró al hospital yendo hacia las salas de descanso, fue dejar su mochila en su casillero para acomodarse su uniforme, estaba por salir cuando se adentró Karen con rapidez cruzando sus brazos sobre su pecho, maldita loca con ojos de halcón.
—. Se puede saber, ¿Qué mierda te pasó? — Señaló el labio del pelirrojo, Axl tenía media hora antes de ir a una cirugía así que se sentó en uno de los sofás dejando escapar un suspiro.
—. El papá de Kurt me golpeó porque no pensaba darle el dinero por ser un puto grano en los huevos... Karen, Kimberly vive en un ambiente horrible, tiene que usar órtesis y muletas por el síndrome pospoliomielítico y su padre la trata fatal. — Intentó desviar un poco el tema para no comentarle que devolvió los golpes al hombre de mayor edad.
—. Dios mío... Pobre chica, ¿Pensaste en lo que hablamos el sábado? — La rubia se sentó en el sofá individual, Axl mordisqueó su labio negando con su cabeza de forma lenta.
—. Estuve muy ocupado luego de que fuimos a dejarte tu regalo, fuimos con Izzy y le quite varias cosas, Kurt se llevó unas guitarras, es muy talentoso, ¿Sabes? Aparte de pintar y dibujar, toca muy bien, se ve tan feliz cuando lo hace y... Me gustaría verlo así todos los días. — Karen se quedó en silencio ante la forma en que Rose se expresó acerca del rubio, se acomodó en su lugar inclinandose hacia él.
—. ¿Escuchaste lo que dijiste? — Los orbes de color esmeralda pasaron de estar en la nada para ahora mirar a su amiga, formó una mueca de confusión sin entender a qué se refería.
—. ¿De qué hablas, Karen? — La mujer se sorprendió al ver que no entendía, o al menos que no se daba cuenta de la forma en qué hablaba sobre ese chico.
—. Axl... ¿Te gusta Kurt?
Oh...
♡
Happy birthday to the king of my heart, the love of my life, the reason I exist:
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Lo amo más a él que a mi propia existencia. Feliz cumpleaños a dónde sea que estés, mirey. <33
