¡Deja de seguirme! [Killugon]

Capitulo 7

Otro día de escuela, otro día de miseria.

Necesitaba hablar con Gon, en la fiesta se descontrolo y termino haciendo cosas que hoy se arrepentía.

Todavía recuerda como tocó todo el torso de Gon y los suspiros que este sacaba en su oído, aunque le cueste admitirlo quería repetirlo pero su orgullo era muy grande.

—No caeré ante el—susurro ocultando la cara entre sus brazos.

—Llevas diciendo eso desde hace un mes y ayer casi tienes sexo con el, no me jodas Killua—hablo Retz haciendo que Killua se sobresaltara.

—¡¿Tu como sabes eso?!—se alteró sonrojado hasta las orejas.

—Se estaban toqueteando enfrente de todos que esperabas—se sentó a lado de él y rio—Ya acepta que te gusta.

—No.

—Eres mas terco que una mula, por eso te vas a quedar solo—le metió un zape.

—Estaré solo pero con mi virginidad intacta.

—Si sigues así con Gon, me temo que no.

—¡Retz!—la regaño todo rojo—Eso no se volverá a repetir.

—Si claro—rodó los ojos y vio a Gon caminando a su dirección—Viene para acá tu novio.

—No es mi novio—rechinó los dientes enojado.

—¡Killua!—el moreno soltaba brillitos y sonreía iluminando todo a su paso.

—Quita esa maldita sonrisa—le reprocho frunciendo el ceño.

—Pero Killua—hizo un puchero haciendo que el albino enrojeciera.

—Gon ni creas que somos algo después de lo de ayer—le advirtió viendo cómo Gon se ponía triste.

—Me dolió pero ¿sabes que me duele más?

—¿Que?—dijo sabiendo de antemano qué diría una estupidez.

—Un México corrupto.

—No mames Gon—lo miro mal.

—Esta bien, lo sé Killua soy consciente de eso.

—Que te quede claro que eso no se repetirá.

—Eso veremos—susurro sonriente.

Indignado lo volteo a ver viendo como sonreía como un bobo, eso le hizo recordar todo lo que hicieron en esa maldita fiesta. Como sus manos recorrieron su cuerpo, las marcas de besos que le dejó en el cuello y él como con un simple beso lo dejó con ganas de más.

De buenas logró reaccionar antes de toquetearlo más de lo que hizo, lo peor de todo es que a Gon no parecía molestarle el haber sido tocado de esa manera, hasta lo disfrutaba el maldito.

—Ugh—lo miro con odio y le volteo la cara.

—¿Ahora que hice?—pregunto inocentemente.

—Nacer.

—Que malo eres—de nuevo hizo un puchero adorable que acabó con la paciencia del albino.

—¡Te odio muérete!—dijo todo sonrojado para avergonzado pararse y huir.

Gon se quedó confundido pensando en que hizo mal.

—Tranquilo Gon esa es su manera de decir que te quiere coger.

—¡Retz!—la regaño poniéndose rojo.

La rubia sonrió y le empezó a chismear de los gays panic de Killua cuando lo veía.