Capitulo 1

90 11 9
                                    

A penas comenzó el verano y hace un día precioso y por alguna extraña razón Lia y yo estamos en mi casa supongo que me dejé convencer por ella para quedarnos viendo pelis y pasar una tarde de chicas.

Lia es mi mejor amiga desde que tengo uso de razón, nos conocemos de pequeñas y desde entonces somos amigas inseparables, ella es alta y un poco morena tiene el cabello largo y en unas ondas perfectas de color marrón oscuro que le caen por sus hombros, sus ojos verdes claros le combinan perfecto con su cabello, tiene una sonrisa perfecta todo lo contrario a mi que soy pálida y bajita a penas mido 1.50 mi cabello es negro y me llega por los hombros mis ojos no son claros como los de ella más bien son oscuros.

—Lía porque estamos aquí si hace un día fabuloso y apenas empezó el verano— le digo con cara de cansancio.

—Jess por favor prometiste una tarde de chicas antes de irme a Francia—La abuela de Lia vive en Francia por eso esté verano lo pasará allá y pues lleva recordándome que tenemos que pasar tiempo juntas antes de irse desde hace muchos meses atrás.

—Si, ya sé que lo prometí pero la verdad prefiero ir algún lugar. Este aburrimiento me está matando Lía— le digo con cara de asco.

—Bueno si tanto lo prefieres podemos salir un rato esta noche y así nos distraemos porque ya veo que andas algo estresada últimamente—eso último lo dice un poco divertida.

Lía es de esas personas pasivas, que no son de muchos amigos, es tímida, de echo creo que soy su única amiga, no le gustan mucho las fiestas ni nada que tenga que ver con socializar y que me haya dicho de salir me parece algo rarísimo así que algo sé traerá entre manos.

—Milagro!!, Lía la que no le gusta socializar quiere salir de fiesta—le digo de manera divertida

—No seas boba solo quiero disfrutar un poco contigo antes de irme nada más—y lo dice tan tranquilamente que hasta llego a creérmelo pero aún así presiento que trama algo,  no le digo nada más y seguimos viendo la peli muy tranquilamente.

Ya es de noche y estoy arreglándome, Lía no deja de llamarme como loca para que me apresure. Lo sé admito que siempre llego tardes a todos lados.

Intento apresurarme todo lo que puedo y me pongo lo primero que encuentro en mi armario, un vestido negro ajustado con un escote un poco largo que me queda perfecto, hace marcar mi cintura y mis caderas, aliso mi pelo todo lo que puedo y me maquillo rápidamente, me miro al espejo unos segundos me veo perfecta, eso me encanta.
Bajo las escaleras en tiempo récord y justo como lo pensé, Lia estaba frente a mi puerta.

—Tantas ganas tienes de salir que no dejas de llamarme— le digo levantando una ceja
—Sabes que siempre llegas tarde, quería asegurarme de que está ves no lo hicieras. Vamos el taxi está esperando.

Llegamos a un antro de lujo, estaba todo oscuro con luces neón por diferentes partes, hay mesas finas y una barra toda lujosa con un chico detrás de ella de unos 20 años un poco delgado y rubio, el que miró a Lia como si se hubiese encantado con ella, y si, aunque Lia sea esa chica tímida y de poco socializar tiene un poder enorme para encantar a los chicos.

Una de las chicas del antro nos dirigió a las mesas lujosas que estaba cerca de la barra.

—Lia este lugar está de lujo—digo asombrada
—Lo se, sabía que te iba a gustar, y espera a lo que falta por llegar—Me dice con cara divertida.
No había acabado de terminar la frase cuando  se nos acercó un chico...

Oh dios no!, por favor díganme que no es Jake.

No seas tonta Jessica obvio que es Jake o que más esperabas que se le pudiese ocurrir a Lia. Juro que la voy a matar.

Almas opuestas Where stories live. Discover now