La venganza de la princesa

Capítulo 23

Él está besando cada parte de mi cuerpo, pero, sus caricias no son suaves, sino agresivas cada parte de mi cuerpo que él ha besado ha dejado una marca y la principal una mordida que ha dejado en mi hombro. Este Lucas no lo conocía, siempre ha sido dulce conmigo, pero ahora puedo sentir su enojo en sus caricias y la verdad es que me da miedo esta versión de él.

Y creo que Lucas se da cuenta de esto cuando se detiene y me mira a los mis ojos, notando la expresión de miedo que tengo en mi rostro. Se levanta y se sienta en un lado de la cama y yo, en cambio, me alejo de él y me recuesto en el espaldar de la cama.

Lo siento, Athy, desde que escuche a las sirvientas diciendo que la princesa se había comprometido me enoje muchísimo al enterarme vine de inmediato aquí, para que me expliques esto—Refiriéndose a mi

Estoy cansado Athy, has cambiado mucho, ya no queda mucho de aquella dulce chica de la que me enamore y sé que quieres vengarte, pero no me dices nada para ayudarte y, en cambio, me entero de cosas como estas por rumores.

Si he cambiado, es por culpa de ellos, cada vez que tengo que actuar linda ante ellos, solo siento repulsión y ganas de matarlos a todos de una vez. Ya me deshice del padre de Kiel y ahora será su turno, pero para eso debo seguir con este teatro—Le informo

Lo siento por ocultarte las cosas importantes, no pensaba que te fueras a enojar tanto.

Pues claro que lo estoy, tengo mucho enojo en este momento—Dice gritándome

Lucas, creo que es mejor que te vayas y te calmes, así no voy a estar contigo, me estás asustando y me temo que puedas lastimarme—Le exijo

Lo siento cariño, perdóname, quiero comprendas que como no quieras que esté molesto, cuando otro hombre está diciendo al mundo que eres suya. Cuando cada parte de ti me pertenece, no puedo soportar tal cosa. No me iré, no quiero dejarte así.

Otra cosa, no tienes por qué tenerme miedo, yo nunca te haría daño y lamento haberte gritado—Dice acostándose en un lado de la cama

Ven, acuéstate a mi lado—Dice ofreciéndome su mano. Dude un momento, pero al final acepte.

Me deslicé entre sus brazos y cuerpo está cálido. Lucas me besa, se detiene un momento y comienza a quitarse su ropa quedándose completamente desnudo, se coloca encima de mí y en medio de mis piernas.

Lucas comienza a besar mi cuerpo y esta vez es gentil, cambia de lugar y me besa aquel lugar en el cuello que hace excitarme y hace que de mi voz salgan gemidos, no intento callarme porque sé que nadie nos podrá oír.

Puedo sentir el miembro de Lucas que está muy duro y roza con mi vagina.

Athy, puedo comenzar, no creo poder aguantar más- me susurra al oído—Claro que puedes.

Lucas se introduce dentro de mí y comienza a moverse, desde ese momento mi mente se ha quedado en blanco, solo puedo pensar en el placer que Lucas y yo estamos sintiendo en este tiempo. La verdad es que no considero que exista otro hombre que pueda seguirle al ritmo como a Lucas y la verdad quiero que él sea y siga siendo el único hombre en mi vida, él y yo podemos durar horas si queremos, como esta noche. Cuando terminamos ya ha pasado la medianoche.

Justo antes de quedarme dormida, abrazo a Lucas y antes de sumergirme en sueño profundo puedo oír que él dice algo.
Te amo hada
Y yo a ti cariño.