UN TRATO Y POCO AMOR ✔ [ ¡¡EN PAPEL!!]

Pt.2; Cap. 9

¡Hey hey!

Nuevo capítulo, como avisé en Instagram. La verdad, me estoy divirtiendo mucho con esta segunda parte. 

Como ya dije, estaré leyendo los comentarios las próximas horas + poniéndome al día con el resto. Así que, ¡No os cortéis y comentad! 

Gracias por vuestra paciencia y disfrutad de este cap.

PD: Quizá tenga una sorpresa muy importante respecto al libro en sí. Ya se irá viendo *se frota las manos*

Os quiero, xx

—

Le miraba con el mismo recelo que él a mí; insegura de su siguiente ataque. Pero no le iba a dejar pillarme tan fácilmente.

Me provocó con la mirada, entornando los ojos y se movió lentamente sin apartar la vista de mí. Y yo tampoco le perdí de vista.

El juego se había convertido en algo serio y teníamos que acabar con el otro.

Entonces, alguien pasó entre nosotros y supe que era el momento. En menos de un segundo ambos disparamos hacia el otro, pero fallamos. Acto seguido eché a correr por la casa, huyendo de él mientras de vez en cuando echaba la vista atrás y soltaba algún que otro disparo.

—¡Estás acabada, Lua! —gritó Alarick.

—¡Ja! ¡Que te lo crees tú! —respondí y lancé otro disparo. Fallé, maldiciéndole mentalmente.

Esquivábamos cualquier cosa a nuestro paso, como si estuviésemos metidos ya en la película que acabábamos de montarnos.

Me dirigí hacia la cocina y esquivé a los cocineros, cruzándola. Alarick seguía viniendo detrás de mí, dispuesto a atraparme. Pero yo ya había trazado un plan para acabar con él.

Sonriendo de lado, cambié de dirección bruscamente y conociendo la casa ya a la perfección, fui hacia la parte trasera.

Disparó, casi dándome, y mi corazón dio un vuelco.

—Calma —dije para mí misma.

Miré hacia ambas direcciones y recordé cuáles eran las habitaciones que conectaban. Entonces, me escabullí para despistarle.

Y eso hice, le di esquinazo, me escondí, pero rápidamente cambié de habitación para atraparle por el otro lado.

Ya era mío.

Alarick Harris iba a morir.

Le oí buscarme. Sonreí de lado y entonces, tan pronto salí y le apunté. Él se percató de mi presencia fugazmente e hizo lo mismo con suma rapidez.

Él me apuntaba a la frente, de igual modo que yo a él y nos retábamos con la mirada.

—¡Nedra Lua Vernon! —escuché gritar y me giré de ipso facto.

Vi a Kaia viniendo hacia mí, enfadada y a paso firme.

Alarick disparó, dándome con el arpón de juguete en el cogote.

—¡Au! —me quejé y le miré de mala gana, rascando mi cabeza—. ¡Eso no vale!

—Has perdido, Lua —dijo, sonriendo de lado victorioso.