Capitulo 1: "Origen"

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Conocida como "κόρη της αγάπης" hija del amor y de una pareja peculiar. Mi nacimiento fue diferente, mis madres soñaban por conocerme pero el resto tenia más curiosidad por verme, se dijeron muchos rumores de mi antes de mi nacimiento y después de el. Me mencionaban como un mito, un monstruo, un arma fabricada por el olimpo para conquistar las tierras, el origen del caos y algunos pocos comparaban mi futura vida con Pandora la mujer que libero todos los males. 

El inicio de mi vida fue distinto, no nací del mar como lo hizo mi madre Afrodita y tampoco de un dolor de cabeza como llego a la vida mi madre Atenea. Nací de su amor y era lo que se encontraba en medio de la balanza entre matarse y amarse, era yo la que mantenía su equilibrio y no me dama merito por eso porque al final solo nací por el amor que entre ellas existe. Yo crecí dentro del vientre de una de ellas y las olas del mar me protegieron en su interior, fui un milagro y también una bendición, se les otorgo el don de dar amor una a la otra y ese mismo amor se volvió vida siendo yo el resultado. Bajo el nombre de Asteria fue como me bendijeron los dioses brindándome su protección y toda su buena fortuna. Hija de dos de las favoritas del olimpo y sobre todo una posible amenaza o eso rumoraban las deidades menores. 

Apenas fui un bebé unas semanas o más bien unos cuantos días, mis madres decidieron ocultarme de los ojos del mundo y si yo hubiera tenido que tomar la decisión seria la misma. No tenia cara deforme o me habían maldecido el resto de los dioses, no era un arma de guerra o un monstruo marino. Eran mujeres celosas y celaban la idea de tener que compartirme con alguien que no fuera ellas y aun más odiaban la idea que los ojos del resto se posaran en mi solo por curiosidad y con fin de murmullos. Nos encontrábamos lejos del resto del mundo, era un castillo precioso digno de unas diosas, un lugar enorme y cada habitación se encontraba calidad fuera por el fuego que se encontraba en el centro de la habitación o por el delicioso clima que gozábamos. Teníamos docenas de figuras esculpidas de mis madres, las pareces se decoraban de oro y algunas otras piedras hermosas, regalos que se habían echo por obtener su favor. Mis madres solían narrar noche tras noche una historia diferente, el origen de la vida, el caos llegar, las guerras contra los titanes, la calma en sus manos, su vida, lo que disfrutaban, historia sobre ellas y algunas otras de mortales. 

Vivíamos en una isla peculiar, yo la llamada "γοητεία" encanto, estábamos frente al mar, el paraíso azul y del otro lado la belleza del bosque, disfrutábamos del clima tropical al igual que el  clima cálido y en invierno el bosque con su frio nos acogía. Había algunas ninfas algunas eran entrenadas por mi madre Atenea y otras más seguidoras de mi madre Afrodita buscando el elipsis de la belleza, lo cual era ridículo ante nuestros ojos, ella podía dar su favor pero eso no garantizaba la belleza absoluta y si lo pudiera hacer lo negaría.

Entre mas crecía más parecido tenia a ellas, fuera por mi físico o mi carácter pero en cada momento me asemejaba a mis amadas madres. Escasos años trascurrieron y ya era una joven, no era un monstruo como se rumoraba o un mito como los mortales se dirigían a mi existencia. Era la mujer que gozaba de toda la belleza de mis madres y su sabiduría, las ninfas que eran seguidoras de mi madre Atenea mencionaban en susurros que entre todas las mujeres mortales y divinidades era yo la joya que resaltaba en medio de todo el carbón, mientras que el resto de las ninfas solo sabían fanfarronear y causar dolores de cabeza. 

Desde el momento en el que pude sostenerme de pie y poder moverme con mayor libertad comencé a entrenar, mi madre me guiaba  a una sala especial, era enorme existía todo tipo de equipo para la batalla que puedes imaginar. La sala era diferente al resto, no había ni una sola antorcha que brindara luz y tampoco una forma en la que el sonido pudiera salir de ahí pero lo que la volvía tan especial era la inexistencia de un techo que te cubriera en verano quemaba la piel del sol insoportable y en invierno el frio podría matarte si continuabas más de dos horas ahí para mi fortuna yo era una diosa y esas cosas no influían en mi. 

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⏰ Last updated: Jan 25, 2022 ⏰

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AsteriaWhere stories live. Discover now