Día 3

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Era una noche perfecta, las estrellas brillaban más que nunca, la luna era hermosa, todo era perfecto


- Aquino

- Si?

- La luna esta hermosa

- Lo sé..

- Y bien, estas listo para ir a la fiesta?!

- Wow, estas más emocionado que yo jaja

- Claro que si! será mi primera vez!

- Me alegra que te sientas tan emocionado

- Y bueno ¿Dónde queda la fiesta?

- Nos pasaran a recoger

- Daarick?

- Nop

- Anthony?

- Nop

- Verga, cuantos amigos tienes?! chico popular eres?

- Tranquilooo, no son muchos.. estoy seguro que te caerán bien

- "caerán" ? es más de una persona? de verdad! cuantos amigos tienes Aquino?! y a que hora llegan?

- Justo.. ahorita!

Alguien toco la puerta, ambos chicos fueron a abrir y se encontraron a dos personas paradas en la puerta

- Hey Locochon, Cejo! tiempo no los veo

- Es verdad, me alegra que hayas decidido venir a la fiesta, cual fue el milagro?

- Pues.. que no vengo solo

Duxo dio un paso al frente dando a entender que el era la razón por la que Aquino estaba yendo a la fiesta

- Te me haces conocido..

- E-Eh? No, no creo.. soy nuevo por aquí

- No es eso.. si no que me recuerdas a una persona..

- Eh..

- Cejo ya déjalo y vamos yaaa que se nos hace tarde y por cierto me gustan sus atuendos


Locochon era el que había hablado, Al parecer el dúo de amigos que estaba en la puerta eran Cejo y Locochon. La ropa que llevaba puesta Duxo era la polera de paloma junto a un pantalón negro con zapatillas moradas, y la ropa de Aquino era una polera blanca con una "A" bordada en una esquina junto a unos pantalones negros y zapatillas rojas.

Se dirigieron a la fiesta y cuando entraron había demasiada gente por lo cual Duxo se asusto.. y si la mascarilla/bufanda no era suficiente? si la gente lo reconocía y sus padres se enteraban? mil cosas se le venían a la mente de Duxo, solo un pequeño golpe en el brazo lo despertó de su mar de pensamientos

- E-Eh?

- Se que te puede dar un poco de miedo el hecho de que haya bastante gente pero, justamente estamos aquí por eso, tu solo déjate llevar que yo te cuido

Dijo el castaño mientras le entregaba una bebida a Duxo, el dudo si de verdad quería hacer esto, pero al final solo tomo el trago para olvidarse un poco de sus temores, lo cual funciono...


demasiado


Duxo pudo socializar como nunca lo había hecho en toda su vida, claro que ahí estaba Aquino cuidándolo de que no haga ninguna idiotez, pasaron las horas y Duxo tomaba más y más, cuando de un momento a otro se encontraba bailando encima de una mesa

- Duxo bájate de la mesa

- NO! Esto es muy divertido

- Duxo.. te vas a caer

7 días contigoOù les histoires vivent. Découvrez maintenant