"ME ELEGIRÁS A MÍ" [KuroSenku x Gen]

CAPÍTULO 6: DESESPERACIÓN.

ADVERTENCIA: Este capítulo contiene descripción de escenarios vi0lent0s que pueden sensibilizar al lector, favor de leer bajo su propio criterio y con la responsabilidad debida. 

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Después de que Gen se desmayará KuroSenku cargo con él de regreso a su pequeña choza, donde lo cuidó con devoción. 

El bicolor permaneció con los ojos cerrados dos días enteros, la fiebre no bajaba y a juzgar por sus gestos y balbuceos espontáneos, las pesadillas también eran bastante persistentes. El azabache se encargó de mantenerle cobijado, con una fogata como fuente de calor y un pedazo de piel húmedo para colocar en su frente y limpiarle el sudor, sin quitarle la mirada de encima, ni tampoco su deseosa sonrisa. 

A la tercer noche Gen por fin mantuvo abiertos los párpados por algunos minutos, lo suficientemente lucido como para intentar incorporarse de inmediato, pero con el cuerpo igualmente agotado para obligarle a permanecer en reposo. 

—Hola Gen...—KuroSenku le sonrió afablemente mientras acariciaba su frente para comprobar la temperatura de su cuerpo. 

—Kuro-chan...—Gen habló con esfuerzo, su garganta estaba completamente seca a causa de la deshidratación que la fiebre le generó. Las orbitas de sus ojos viajaron de un lado a otro en un intento de estabilizarse. Una pequeña gota de agua salada que rodó desde su mejilla hasta sus labios le hizo percatarse de la resequedad que había en estos, esa sensación pegajosa en la comisura le obligó a parar de llorar y a intentar hacer una petición, estiro su mano hasta el brazo de Kuro tomándole con suavidad. 

KuroSenku le observó inmediatamente—¿Qué pasa Gen?—, los suaves movimientos casi imperceptibles que la boca de Gen hicieron le hicieron acercar su rostro a una distancia muchísimo más corta, cruzando su cuerpo con la ayuda de sus brazos y permitiéndose percibir la súplica de Gen a través de un susurro a su oído—Claro—respondió al escucharla—, era de esperar que tuvieras sed, descuida Gen. Ya he preparado un poco de suero para ti, espera un minuto.

KuroSenku regresó a su pose original antes de darse la vuelta y preparar un vaso con aquella bebida que Gen le había solicitado. Esto sin saber que, con su pequeña acción de hace un momento, había generado todo un remolino en el corazón del mentalista, uno que le genero un inmenso dolor en el pecho. 

Cuando Kuro le volvió a ver le sujeto con suavidad la espalda para ayudarle a incorporarse apropiadamente ya que antes no lo había logrado. 

—Aquí esta, vamos. Bebe con calma—KuroSenku le indicó acercando el vaso a sus labios. 

Esta vez Gen no hizo algún esfuerzo en intentar rechazarlo, tampoco dejó que lo viera llorando, no dio pie a que alguna otra lágrima le traicionara. Estaba lo bastante cansado como para tomarse esa molestia. 

—Es un suero que hice con agua dulce, un poco de cloruro de potasio y jugo de cítricos. Puede que sea un poco fuerte al principio, pero tienes que acostumbrarte y beberlo todo, tiene los elementos suficientes para derrotar esa temperatura alta que ha invadido tu cuerpo y para que repongas energías lo antes posible, ¿Bien?—el ojí carmín le comentó mientras le ayudaba a beber el suero al contrario en su totalidad. 

Y Gen así lo hizo, cuando terminó dibujó una pequeña sonrisa debido a la explicación antes dada y agradeció delicadamente—Gracias Kuro-chan...

Las mejillas de KuroSenku se tiñeron de rojo ante eso, inútilmente intento cubrirlo con una de sus manos y desviando su mirada—Sí, no es nada—le ayudo a recostarse de nueva cuenta y le cobijo de nuevo—. Ahora descansa, estaré aquí si necesitas cualquier otra cosa, ¿Bien?