Zona Cero K-045 (En pausa)

𝐏𝐑𝐎𝐋𝐎𝐆𝐎

𝐏𝐑𝐎𝐋𝐎𝐆𝐎
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La Zona Cero... El lugar conocido por donde inicio todo.

El lugar donde se desato el maldito infierno sobre la tierra, en donde la humanidad dejo de tener un nombre.

Era una noticia falsa según muchos, una situación aislada que parecía de película.

Que equivocados estaban.

El virus K-045 se propago en menos de quince días por todo el mundo infectado a cada persona que fuera atacada.

La ciudad se convirtió en un campo de batalla y los lugares rurales un refugio seguro.

El virus por lo que se tiene entendido salió de un laboratorio a las afueras de Rusia a inicios de marzo hace tres años al ser descubierto por el científico Nikolái Ivanovich en unos de los glaciales más importantes del mundo.

El virus estaba congelado cuando lo encontraron, se indicó que estuvo inactivo por más de tres millones de años, eso significaba que lo hacía inofensivo o eso pensaban.

El virus fue trasportado a Estados Unidos con la intención de hacerle pruebas, pero cometieron el error que sentencio a toda la humanidad al caos. Descongelaron el virus y, sin darse cuenta, lo había activado de nuevo después de tanto tiempo.

No se sabe con certeza cuando se creó la persona cero o por cuánto tiempo lo ocultaron los altos mandatos tanto de Estados Unidos como los de Rusia, se desconoce por qué no se deshicieron de él o que tanto experimentaron con aquella persona que tuvo la desdicha de convertirse en un muerto viviente.

Pero de algo que se sabe con certeza es que no estábamos listos para algo así, nadie lo estaba cuando el primer contagiado apareció en la ciudad a causa de un descuido de quienes lo crearon.

Pudieron prevenir el fin del mundo que conocíamos, pero la avaricia y lo nuevo siempre llama la atención, y entendimos tiempo después que a ellos no les importaba si nosotros moríamos.

Al virus con el largo de los años se le denomino "La colmena" por la manera de actuar de los infectados, era igual que ver un enjambre de abejas, todos los infectados se reunían en un solo lugar para adueñarse del sitio, infectando y matando a todo lo que consideraban intruso u amenaza.

No son tontos, ni mansos, son demasiado listos y por esa razón quedamos muy pocos en este lugar.

No se sabe más que eso sobre el virus, los servicios de telefonía, de luz y de internet se cayeron y nunca volvieron.

Fue como volver años y décadas atrás de golpe, un mundo extraño al que no estábamos acostumbrados.

Pero, pese a los años trascurridos, los recuerdos de ese día jamás se van, siempre están ahí, como un eco a lo lejos.

Es imposible no soñar con los gritos de auxilio de mis compañeros antes de que esas cosas los atacaran sin piedad.

Los rastros de sangre que dejaba a su paso... los cuerpos sin vida.

Esa sirena a todo volumen sonando en cada pasillo aturdiéndonos y poniéndonos nerviosos.

Los gritos de desesperación indicando que huyeras del lugar antes de ser alcanzados... antes de morir comidos vivos.

Todas aquellas personas huyendo en manada en una sola dirección importándoles poco a quienes empujan para salvarse. En ese lugar no existían los amigos o conocidos, solo eras tu.

Entre todo ese caos recuerdo perfectamente escuchar la voz de mi padre en mi cabeza, escuchar su estricta voz repitiéndome una y otra vez sus refranes que parecían más una lección de vida que otra cosa.

"El más frágil es al que siempre dejan, Anna", "El fuerte siempre acaba con el más débil, ¿Por qué crees que estas aquí?"

Sin embargo, mi padre no tomo en cuenta la hija que tenía, pues nunca fui la fuerte, la valiente del cuento, la que iba preparada para enfrentarse al mundo a capa y espada, yo era todo lo contrario, yo fui aquella chica a la que empujaron y la dejan a su suerte con tal de salvarse, a la que le cerraron la puerta en la cara para usarla como carnada.

En su momento me pareció estúpido y sin sentido escuchar lo refranes de mi padre como cualquier adolescente en su etapa de rebelde, pero después de vivir eso en carne propia fue inevitable para mí que durante los primeros años del caos eso malditos refranes salieron de mi boca, aunque no quisiera.

Pero con todo lo que había vivido, con los años trascurridos y sin mi padre me empecé a cuestionar su manera tan estricta y cerrada de criarme...

¿Qué pasa cuando el más débil decide defenderse de su agresor hasta la muerte?

Él nunca me respondió mi pregunta, pero yo sabía en carne propia la respuesta.

Sobrevive eso es lo que pasa.

Y sin darme cuenta eso es lo que he estado haciendo durante todo este tiempo, como todos aquellos que aún quedaban.

Todas ellas personas que tuvieron la desgracia o fortuna de seguir vivíos hasta punto se reuniones en distintas cuidades creando las rebeliones, algunas más privadas que otras, pero era un punto al cual podíamos acudir si lo necesitamos, tenía pocos recursos al inicio, pero cuando el gobierno perdido todo el poder que alguna vez llego a tener eso cambio.

Los militares y todas las fuerzas armadas nos abandonaron a nuestra suerte días después de que en las radios se anunciaran la pérdida total de los países más importantes de mundo y la caída de los gobiernos existentes.

El comunicado que soltaron por toda la ciudad en helicópteros ese mismo día solo confirmó que estamos solos y que aquellas personas que aun tenían esperanza de ser salvados eso jamás pasaría.

"¡¡¡A todos los supervivientes del virus K-045 o conocido mejor como "La Colmena" de la ciudad de Lennox se les informa que no podrán ser rescatados, ni auxiliados de alguna forma!!!

¡¡¡Desde ahora en adelante están por su cuenta!!!

¡REPETIMOS!

¡¡¡Desde ahora en adelante están por su cuenta!!!

¡SUERTE A LOS SUPERVIVIENTES!"

Los supermercados se vaciaron tiempo después de ese comunicado, no había comida ni agua potable.

Pero pesé a lo que pueden creer en un mundo así con el tiempo dejas de tenerle miedo al virus en cuanto te das cuenta de que los supervivientes son más agresivos que los que estaban infectados.

Por ese en este mundo la frase "sobrevive si puedes" toma mucho sentido.