Souta se había enfermado, solía pasar con el cambio de clima, ya que el otoño estaba entrando de manera inesperada, su cuerpo tenía leves escalofríos que eran incomodisimos, estornudos y tos
Rindou parecía un cachorrito, deseando ir a cuidar y darle mimos al omega, pero este se negaba por si se contagiaba, eso enternecía al mayor ya que su omega se preocupaba por el
Rindou-Souta~-lloriqueo y el peli-azul sintió su corazón estrujarse por el puchero que formó en sus cara
Las videollamadas había sido la salvación de aquel alfa
Souta-Que no
Rindou-Pero...
Souta-No, puedes enfermar tu también
Rindou-Si eres tu quien me contagia no me importaría la verdad-Dijo guiñandole el ojo
Las mejillas del omega se tiñeron de rojo y puso la cámara del móvil mirando hacia el techo, cosa que hizo sonreír al alfa
Souta-Eres un idiota, solo tu dirías algo así
Rindou-Pero es la verdad