Worst Behavior. |z.m

Capítulo 4. Miradas y silencios.

Jav's POV.

Escuché la pregunta de Kim y tragué saliva.

- No, no tengo novia Kim - dije - ¿por qué la pregunta?

- Tu ayer me preguntaste si tenía novio... - dijo - así que ahora era mi turno de preguntar.

- Está bien topi, ¿estás contenta con la respuesta?

- No seas engreído Malik - me dijo ella.

Reí y me quedé callado pensando, ella también y luego seguimos caminando.

Kim's POV.
Cuando le pregunté si tenía novia, sus ojos se volvieron negros, parecía nervioso.

No le tomé importancia porque quizá lo tomé de sorpresa.

Nos quedamos en silencio un rato y luego me dijo.

- Tengo hambre.

- ¿Vamos a comer? - pregunté.

- Sí, quiero mariscos.

Y nos guiamos hacia la cabaña.

Entramos y ya estaban los chicos ahí comiendo.

- Hey Kim, Jav, siéntense acá - dijo Kaya.

Caminamos hacia donde nos dijo y nos sentamos.

- Hola Jav, soy Kaya, amiga de Kim y novia de Ryan - le tendió la mano.

- Hola Kaya, soy Jav amigo de Ryan y - me volteó a ver riéndose - supongo que amigo de Kim - estrecharon sus manos.

- Hey, no digas que yo empiezo eh - le dije.

- Era broma pequeña - dijo besando mi cabeza.

Noté que Kaya y Mel se voltearon a ver.

-Hola Kim, soy Antony - me dijo el chico más alto.

- Hola, yo soy Danny - dijo el otro chico.

Les sonreí y dije.

- Hola a los dos, soy Kim - les di mi mano a cada uno y me sonrieron.

Cada uno nos sentamos alrededor de una mesa larga y un señor se acercó a tomarnos la orden.

- Yo quiero un coctel de camarón - dijo Kaya.

- Que sean dos por favor - dijo Danny.

- Yo quiero filete con mucha verdura al lado - dijo Melody.

- ¿Qué vas a pedir topi? - me dijo Jav al lado.

- No sé, quizá camarones empanizados y sopa, ¿y tu?

- Suena rico, creo que solo un coctel.

- ¿No era que tenías hambre? - le dije levantando las cejas.

- Sí, pero todo es tan rico que no sé que elegir - dijo levantando los hombros.

Me reí y le dije.

- Pide lo que más se te antoje.

Vio mis labios y se mordió los suyos.

- Todo se me antoja topi, ese es el problema - dijo.

- Qué glotón eres - le dije riéndome.

- Oye, no es justo, los mariscos son deliciosos.

- Estoy de acuerdo, pero si sigues pensando en que elegir jamás vas a comer.

- Bueno, es verdad. Al carajo, voy a pedir lo que sea - dijo muy decidido.

Entonces el señor nos preguntó a nosotros la orden y dije.