~7

3 1 0
                                    

Llegamos a casa e hicimos que el hogar se calentara para así cocinar, esta vez Tae puso una lámina de metal para que calentará y puso aceite para freír los huevos.

Después de freír los huevos agarró una olla más pequeña e hizo una salsa con tomate, pollo y leche, que estaba deliciosa, lo comimos todo con un pedazo de pan que, según Tae, hizo koo.

– Hermano–

– si mimi?– dijo mientras llevaba un pedazo de pan y huevo a su boca

– cuál es el nombre real de koo?–

– él se llama Jungkook, pero todos le dicen koo o jk– contesto mientras comía el panecillo

– que nombre difícil– dijo con una cara que expresaba cansancio, pero que se veía muy graciosa

– eso dicen todos, por eso le pusieron esos apodos, de hecho dice que le gustan múcho esos apodos– dijo ligeramente sonriente

– que bueno que le gusten sus apodos– dijo Jimin

– si, hablando de eso, hoy cuando vayamos al gallo de oro mejor te debería llamar por tu nombre–

– por qué?– dije confundido mientras comía de la salsa que Tae preparo

– porque "Mimi Corazón De León" queda raro– dijo con una pequeña risa que no pudo contener

– jajaja tienes razón– me reí con él

Ya era de tarde y fuimos al mismo puente en el río para pescar algo y comerlo en la noche Flecha y Alas estaban dormidos a unos cuantos metros de nosotros, eso también me gustaba mucho, los árboles no estaban muy juntos asique se podía ver todo al rededor sin que te tapara un gran bosque color rosa y blanco.

Pescamos un pez que no reconocí y Tae dijo que era lo suficientemente grande para que los dos comiéramos.

Cocinamos el pez al vapor y lo comimos con verdura, hoy era una luna llena y entraba una luz muy bonita de color celeste por la ventana de la habitación, y se mezclaba con la luz cálida del farol que estaba de centro de mesa.

Después de comer subimos en Flecha y Alas rumbo al pueblo, al gallo de oro precisamente.

Llegamos a un lugar con un cartel gigante que tenía un gallo dorado, atamos nuestros caballos en un tronco alargado donde habían más caballos y entramos al lugar.

Era una taberna, muy acojedora, parecía una cueva de hadas, era muy bonito y había muchas mesas con gente hablando y riendo entre sí.

– oh Tae!– dijo un hombre muy hermoso de unos 30 años

– hola Jin, como has estado?–

– ocupado, pero feliz, nam y yo al fin adoptamos un niño–

– oh que felicidad Jin– dijo abrazando amistosamente al hombre llamado Jin

– Jin ayudame en la cocina que no voy a poder solo– dijo un hombre también de unos 30 años, de piel bronceada y de ojos  alargados

– ya voy Nam!– dijo en un grito no muy fuerte– tengo que ayudar a nam o le van a salir canas verdes por el estrés– le dijo a Tae haciendo que los dos rieran un poco, se saludaron con la mano y Jin ayudo al tal nam en la cocina.

Solté el aire que retuve mientras estaba ese hombre con mi hermano, me había escondido ágilmente detrás de Tae y al parecer no me vió

– por qué te escondes de Jin?– me preguntó

– es que entre en pánico y no pensé en nada más que en esconderme– dije un poco nervioso

– está bien, aveces uno entra en pánico– dijo con una sonrisita Taehyung

Caminamos hacia una mesa donde estaba koo solo hablando con una mujer de edad algo avanzada, cuando noto nuestra presencia se despidió de la mujer y nos invitó a sentarnos.

Comimos un budín de pan que estaba delicioso, Jin y Nam hacían un buen equipo de cocina, y cuando todos ya habían pedido su comida o trago, Jin y Nam salieron de la cocina con un niño más pequeño que yo, debía tenér unos 6 años, y lo presentaron a unos hombres de una mesa cercana, luego pasaron por nuestra mesa, y Jin, al parecer, noto mi presencia esta vez.

– oh Tae es tu hermano?– dijo emocionado

– si lo es– dijo orgulloso

– oh ya ah llegado que alegría, Yoongi ya sabía de ti antes de que llegaras– dijo mirando al niño albino y de ojos grises que se encontraba a su lado, éste asintiendo tímidamente a lo que había dicho el hombre aparentemente llamado Nam

– oh que bueno, nosotros estábamos esperándote, nos contaron cosas muy bonitas de ti– dijo Jin con una sonrisa

– el es su hijo?– dijo Tae inclinándose para ver al niño que se escondió detrás de Nam

– si, el es Yoongi, lo adoptamos hace una semana y por el momento se pega mucho a su padre– dijo poniendo una cara muy graciosa, a lo que me aguante la risa

– tal vez conecto primero conmigo pero vas a ver qué ya lo hará contigo Jin– dijo con una sonrisa mostrando unos oyuelos encantadores en su rostro

– Nam tiene razón Jin, ya verás que conectará contigo, solo no lo obliques a hacerlo– dijo riendo koo

– y como se llama tu hermano Tae?– preguntó el bronceado hombre de cabello rojizo

– se llama Jimin– dijo volteando a verme

– mucho gusto jimin– me saludo Jin

– mucho gusto señor Jin– dije un poco nervioso

– no me digas así que me siento viejo– dijo en chiste y estrujando su pecho con un puchero exagerado que hizo que todos rieran

– yo soy Nam, el orgulloso esposo de Jin– se presentó volteando a ver a jin quien sonrió con las orejas rojas por el halago

– mucho gusto señor esposo de Jin– dije con una sonrisa haciendo que la pareja sonriera

– porque no llevan a Yoongi a dormir, miren su carita cachetona, se ve cansado– dijo koo levantándose de su silla y tomándole una mejilla suavemente al niño, que la verdad, si se veía cansado

– tienes razón, disfruten el budín, nosotros llevaremos al niño a dormir, cuiden que el lugar no se incendie– dijo Jin guiñando un ojo a koo y a Tae quienes sonrieron suavemente

La noche paso rápido entre risas y canciones a las que se unieron todos en una ronda a bailar, donde un hombre joven de 25 años aproximadamente se lució totalmente, se veía alegre, se notaba que le gustaba bailar, y saco a todos los niños a bailar con el a lo que todos se divertían juntos.

Ese día dormí muy tranquilo sabiendo que estaba en Nangijala, en el paraíso donde las fogatas y cantores aún eran parte de la vida cotidiana, donde los artistas pintaban y la gente los aplaudía, donde aún había vestimentas sencillas y cómodas por dónde el aire recorría tus brazos, donde la gente es buena y no necesitan el dinero para sobrevivir, donde con dar algo tuyo recibes algo de los demás.
Dónde no hay escuela, porque no necesitas saber lo que hizo un rey de hace 800 años y solo, vives, vives feliz, vives libre y despreocupado, no hay una muerte cercana a cada segundo que vives.

Vives de verdad

Corazón De León -TaeKook/KookV-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora