Antes del siglo XX dónde una joven (t/n) Swan luchó al lado de los caballeros de bronce, Seiya, Shiryu, Hyoga, Shun e Ikki. Pero antes de ella hubo otra chica, Violetta (Quién en este caso será (t/n)) quién así como (t/n) del siglo XX lo hizo, ella...
La imagen era bastante horrible, como si los corazones de los guerreros explotaran, ya que estabas tirados en el suelo con los corazones fuera de sus pechos
Luego todos atacaron con sus técnicas a la puerta, pero esta rechazó los ataques y en frente apareció una espectro, era Pharao de Esfinge si mal no recuerdo, empezó a agarrar los corazones de los guerreros que estaban en el suelo, al parecer seguían vivos pero eso terminó cuando Pharao puso sus corazones uno por uno en una balanza con una pluma y cuando este era más pesado que la pluma de Maat, los cuerpo se hacían cenizas - el cuerpo de aquel cuyo corazón no se balancee con la pluma de Maat es destruido hasta el alma - dijo Pharao - ¿Qué pasó con los corazones que aman la paz? Su espíritu de lucha... ¿Acaso todo eso fueron simples mentiras? Athena, ____, siento lástima por ustedes - Sasha apareció detrás de nosotros
- No es así, sus corazones siempre han estado con nosotras apoyándonos - dije
- ¡Confiamos en los caballeros! ¡Y no te estamos mintiendo! - le dijo Sasha
- ¿Están diciendo... Que ustedes pondrán sus corazones en la balanza? - me puse nerviosa porque Sasha y yo somos diferentes, Sasha es una persona pura sin pecado alguno, en cambio yo... Viví como humana normal, con todo lo que hice antes de venir a este siglo, mis deseos carnales, mi egoísmo, mi maldad, mi mundanismo... Definitivamente moriría si pongo mi corazón ahí, no soy pura ni una diosa como tal como Sasha... Varias escenas vinieron a mi mente, cuando bebía con mis amigos considerando que soy menor, cuando provocaba a chicos, cuando peleaba con otras chicas en la calle después de la escuela... Cuando robaba otros juguetes cuando era niña o arrancaba flores del suelo solo porque me gustaban...
- ¡Así es! ¡Te los entregaremos gustosas! - dijo Sasha
- ¡¿Qué?! - dije asustada
- ¡Athena! -
- No hablamos de esto Sasha... - le dije al oído
- Confía en mi... ¡Son los corazones que derrocarán a Hades! -
- ¡No será así, momia del demonio! ¿Qué te parece si primero mides mi corazón? - dijo Tenma
- ¡No lo hagas Tenma! ¡Eso debo hacerlo yo...! -
- No hay de que preocuparse, yo no moriré en vano -
- Tenma... - dije mirándolo... Si el puede hacerlo yo también...
- Es mejor que yo sea quien pase por eso y no unas jóvenes como ustedes... -
- Oye Tenma... -
- No ____ - me interrumpió - esta vez no me acompañarás y es mi última palabra
- Muy bien, Pegaso. Si me llevó tu corazón, el señor Hades se pondrá muy feliz - dijo Pharao - MALDICIÓN DE LA BALANZA... - entonces Sísifo se interpuso
- ¡No lo hagas, Sísifo, retrocede por favor! ¡En este momento estás desgarrado hasta tus nervios por la pelea contra el juez! - le ordenó Sasha
- Con todo respeto, Athena... Me rehuso a que ustedes hagan algo tan imprudente, así que no me quedaré callado ¡Lo mismo va para ti Tenma! Y también... ¡PARA TODOS USTEDES! - dijo refiriéndose a todos los que estábamos en el barco mientras se quitaba la venda de sus ojos - No serán arrebatados de sus corazones por el plan del enemigo. Tirar sus vidas tan fácilmente sin ver más adelante podrá triste a Athena y a ____, para nosotros que peleamos con todo nuestro fervor... ¡Conservar la vida hasta el final es nuestra arma, porque es nuestra esperanza! - Pharao aplaudió hipócritamente
- Qué espléndida y pretenciosa declaración. Pero si no arriesgan sus vidas ahora no abrirán esta puerta, ¿qué van a hacer? -
- Je... Yo seré el único que lo haga a tu manera, será solo entre tú y yo. Así que, ¿porqué no mides mi lealtad hacía las señoritas? - vaya que suerte tendrá su esposa si es que llega a tenerla
- ¡Tienes gran confianza en tu lealtad! - entonces le arrancó el corazón
- ¡Sísifo! - puso su corazón en la balanza con la pluma y...
- La balanza no se equilibra... Tu lealtad sno solo puras habladurías - dijo Pharao, y era cierto pero entonces...
- Lo sabía - dije cruzándome de brazos con cara orgullosa
- ¡SE BALANCEÓ! ¡¿Porqué?! -
- Parece... Que no lo entiendes... - dijo Sísifo
- ¡IMPOSIBLE! ¡Pero se supone que no se balancearía! -
- Manipulando la balanza con tu cosmos. ¡Mi lealtad no cedería ante eso! ¡Eres un falso enjuiciador que pisotea los corazones de las personas! -
- ¡¿Qué?! ¡MALDITO! - se lanzó hacía el pero Sísifo fue más rápido y con un ataque de su puño lo golpeó terminando de matarlo y logrando abrir la puerta del Lienzo Perdido
- ¡SEÑOR SÍSIFO! - Sísifo cayó al suelo ensangrentado pero en frente suyo la puerta por fin se abría
- Por fin... - entones esta se detuvo
- ¿Porqué? - era Pharao
- No se sientan aliviados aún, caballeros... - dijo mientras se interpuso - ¡Esta puerta no se abrirá más que eso! No puedo dejar que ustedes pasen con facilidad. La maldición de Pharao... -
- ¡¿Qué quieres decir?! - le gritó Tenma
- Si quieren pasar no les queda más que destruirla, pero hablo de algo que también es imposible para ustedes. Crear un Big Bang está fuera de sus límites... - todos empezaban a decir que era imposible y cosas así
- ¡Aunque se trate de nosotros, todavía existe un método para crear un Big Bang! - dijo Shion, y es cierto...
- ¡No...! - dije
- ¡¿Qué dices, Shion?! Si existiera ese método lo hubiésemos usado desde el principio... - le dijo Regulus
- Pero este... Será imposible si no están presentes tres caballeros dorados. Tu, yo y una persona más... Ahora, ya es tarde para eso - completó Shion... Entonces Sísifo se levantó... Y se pusieron en posición... Guau...
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Un gran explosión se sintió en todo el lugar con un brillo celestial, pero Sasha empezó a llorar...
Un momento... Ahora entiendo todo... Sísifo, tu sacrificio... Tu lealtad... Van más allá... Tienes un sentimiento diferente al de un caballero...
La lealtad que fue más allá de servir a Athena... Los sentimientos desbordados de un hombre sucumben junto al guerrero...
- Así es... -
- Sísifo! - me hablaba desde su cosmos
- Pelea junto a Athena, por la tierra y para protegerla a ella... - No pude evitar llorar... - Te encomiendo el futuro de este mundo... Y...
