Capítulo 12

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Su sabia abuela le dijo una vez que, con la luz de la mañana, quedaban al descubierto los pecados de la noche, y vaya que tenía razón esa mujer. Su abuela fue una santa y siempre tuvo la razón en todo.

Jin se había despertado para descubrir que estaba solo en la cama, eso no le sorprendió. No se había dado cuenta a qué hora JungKook se había marchado, pero estaba seguro de que no se había quedado con Jin mucho tiempo.

Tampoco le sorprendió que, por la mañana, actuaran como dos completos desconocidos, ni siquiera se miraban a los ojos.

¿Qué esperaba? Que a la mañana siguiente entrara Jeon JungKook en la cocina y le diera un beso de buenos días, con un te amo. Jin bufó. Los silencios entre ellos como siempre fueron llenados por EunJi, la cual le contaba a su tío que tenía muchas ganas de subirse a las lanchas en el parque, hoy era sábado, así que Jin había planeado llevar a EunJi al parque, además de que necesitaba hacer unos recados.

—Tu tío tiene mucho trabajo, cielo— Jin le sonrió entregándole un vaso con jugo —Yo te llevaré, mi pequeño colorete—Hizo reír a la niña, pero EunJi era muy lista.

—Yo quielo que mi tío también vaya con nosotlos— Miró a su tío con esos ojos de borrego tan lindo. Y que ella no supiera pronunciar bien las palabras, la hacía todavía más adorable e irresistible. Jin no quería estar en los zapatos del hombre, EunJi era como YoonGi, siempre se salía con la suya.

—Te divertirás más con Jin— dijo su tío, despeinando uno de sus rizos.

—Yo me divielto siemple contigo, tío Kookie. Te amo mucho— Jin intentó no reír, esa niña… sería todo un peligro para los hombres cuando creciera.

—Yo también te amo, cariño— Dijo JungKook colocando a la pequeña sobre el mostrador para quedar a su altura. —Pero mientras tus papis no regresen yo tengo trabajo que hacer— Con la mención de sus padres, la pequeña abrazó a su tío.

—Quielo que mis papis, reglesen pronto—

—Pronto, ya los verás— la consoló JungKook —Mientras, podrás divertirte con Jin en el parque ¿te parece? — la niña se separó de su tío y lo miró con ojos bañados en lágrimas no derramadas.

—¿Vendlás con nosotlos?, polfis… — y cuando Jin vio que a Jeon JungKook le tembló la barbilla… sabía que el gran hombre de negocios había perdido la batalla.

—Iré, pero solo un rato, los alcanzaré allá—

—¡Siiiii! — La pequeña abrazó a su tío y le dio besitos en la mejilla, la barbilla, y la nariz <<Que afortunada ella>> pensó Jin caprichosamente pero no podía quitarse de la cabeza que, él no había podido besar a JungKook anoche… y muy apenas recordaba que ni siquiera en su noche juntos en navidad, lo había besado. Era tan frustrante.

—Muy bien— JungKook bajó a EunJi de la encimera —Los veré más tarde, tengo que irme— JungKook podría haber hablado en plural pero solo se había dirigido a EunJi. Evitando que la cobardía lo invadiera, Jin colocó en la esquina de la encimera un recipiente.

—El almuerzo— dijo, había preparó almuerzos para los tres en los últimos días, ese día ni Jin ni EunJi irían a la escuela y al trabajo, pero cuando se dio cuenta de lo que hacía, ya había terminado de prepararlo. Se sintió ridículo, Jin se giró y se entretuvo fregando platos, en realidad, ni siquiera Jin sabía si JungKook se comía los almuerzos que preparaba, no hablaban de ello, preparaba el almuerzo para JungKook porque EunJi esperaba que lo hiciera, a lo mejor JungKook lo tiraba a la basura en cuanto llegaba a la oficina. Que era un simple emparedado con ensalada comparado con los almuerzos que el hombre podría ordenar a su oficina. Pero a Jin le daba ilusión prepararlos.
Poco segundos después escucho a JungKook despedirse de EunJi, la niña era ajena a la incomodidad del momento. Sin mirarlo, Jin le deseo un buen día y le aseguró que estarían en contacto, solo cuando escucho la puerta principal cerrarse, Jin se giró. Exhaló el aliento que había estado conteniendo y una sonrisa estúpida se pintó en su cara al ver que el almuerzo que había preparado, no estaba. <<Soy un reverendo idiota>>

Propósito de Amor [KookJin] |Adaptación|Where stories live. Discover now