La Chica de Vegetta777 (Vegetta, Rubius y Tu)

Epílogo

Tres meses han pasado después de la tormenta que viví, no he vuelto a saber de ninguno de los dos y muchas veces me muero de ganas por coger el móvil y llamarlos... Mis padres tenían sus ojos bien puesto en mi por miedo a que cogiera alguna decisión suicida, pero todo ese miedo ha sido infundido por el psicólogo que trata mi caso, mi madre desde que puse un pie en la casa tomo la decisión de que necesitaba ayuda médica y debe ser por el estado mental deplorable en el que estaba... Una fuerte depresión siguió semanas después donde me prohibieron tener si quiera mi móvil conectado a internet. Pero hace dos semanas empecé a asistir a un taller de fotografía y mi padre con tal de que olvide el mal rato me ha comprado la mejor cámara... Creo que ha sido una de las mejores terapias... Me relaja y disipa todos aquellos recuerdos que me atacan. Sin duda mi vida estaba mejorando... Pero a pesar de todo nada quita el dolor de mi corazón, cuando me doy duchas y nadie puede vigilarme la voz de Samuel y Rubén me atormentan, la culpabilidad había aumentado y la vergüenza de darles algún día la cara era uno de mis mayores miedos... Tres chicas están apoyándome desde ese taller, se han vuelto mis amigas y confidentes, mis padres le han cogido cariño y por fin me dejan salir de la casa pero sólo con su compañía. Según el doctor Rodríguez en un plazo máximo de un año estaré curada y eliminarán la cantidad de medicamentos que me dan antes de dormir, y no hallo la hora en que ese momento pase.

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Los ángeles era una ciudad que estaba disfrutando al máximo, los bellos lugares y la posibilidad de que los juegos lleguen antes eran algo que me tenían encantado. Vivir con uno de mis mejores amigos se ha vuelto una experiencia memorable, las series se han vuelto más fáciles para grabar y hasta por un momento olvido todo aquel tiempo oscuro que viví hace sólo unas semanas atrás. Su partida había sido un golpe duro pero creo que hasta el momento lo llevo de una manera perfecta... Quizás cuando miro a una chica aquí no la encuentro tan linda como aquel amor pero automáticamente mi cabeza me recuerda el asqueroso engaño que cometió e intentó sacar mi mejor inglés para hablarle. Estaba sentado en un pequeño balcón que tenía este piso y entre mis manos tenía una foto del último año que viví a su lado... Admiro lo feliz que éramos antes que conociera a rubius, lo sonriente que se ve ella y lo seguro que estoy yo cogiendo su cintura... Inevitablemente cae una lágrima por mi mejilla y la limpio con mis dedos. Siento una mano en mi hombro y algo asustado me giro para ver quién es.

Celeste- ¿por qué la sacaste de la caja?, sabes que esto no te hace bien y aún la sigues conservando- me quita la fotografía y quedo boquiabierto- no me mires así Samuel, soy tu amiga y solo quiero que superes esto- se agacha hasta quedar a una menor altura, toca mi mejilla con una mirada muy tierna- no sabes cuánto odio verte así de triste-

Samuel- no te preocupes… ella es pasado- me levanto y comienzo a caminar hasta la cocina, celeste había logrado un ascenso y traslado  a los ángeles… desde que llego no me deja solo por nada del mundo

Celeste- eso espero- la miro y veo aquella sonrisa tan tierna que tiene- macho! Que no me mires con esos ojos-

Samuel- por lo menos harás mas divertida mi estadía aquí- me acerco para darle un fuerte abrazo- gracias por esta linda amistad- le doy un pequeño beso en la coronilla. Por ahora solo me estaba apoyando en su amistad.

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Miro a mi alrededor… mangel estaba bailando con una chica rubia de ojos azules y yo aquí en la barra bebiendo lo primero que me sirve el mesero… debería dejar pasar todo este tiempo tan horrible, debería olvidarla por completo. Ella decidió irse sin explicación y yo necesito volver a las pistas como antes. No recuerdo a cuentas chicas he rechazado en estos últimos tres meses pero no quiero darme por vencido, ella está sola y triste… quizás este peor que la última vez que la vi pero ¿Cómo puedo llegar hasta ella? No tengo ni la menor idea  de donde podría estar ni menos si aun sigue en España…

Mangel- Rubiuh... ¿que piensah tanto?- con mi cara intento darle la respuesta más obvio, es mi mejor amigo y me conoce perfectamente

Rubius- nada mi mahe- me levanto del asiento con un vaso en mi mano- vamos a disfrutar la fiesta- solo recuerdo que sus padres vivían en Barcelona…

Mangel- tío… creo que mi Rubiuh ha vuelto- tendría que hacer una búsqueda y llamadas pero me negaba a dejarla ir tan fácil

Rubius- tú no te preocupes mangel… que rubius no se volverá a ir- le doy una gran sonrisa y mi decisión está tomada… aunque me demore meses voy a encontrarla.