¿Y si fuéramos a marte?

Epílogo

Esto es porque me di cuenta que nunca escribí un epílogo, que pena, disculpen de antemano, y tal vez siga escribiendo por acá y se los suba como extras, en unos días estará de vuelta el extra de halloween por cierto es que, es importante en la historia de Nathan y Holland, pero como se me olvido que había escrito, los capítulos no coincidían, así que lo volveré a escribir.
Ahora si, lean y disfruten, besos <3.

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3:00 am en Francia.

¿CÓMO CARAJOS PRETENDAN QUE DUERMA?.

Los pongo en contexto, soy Ara por cierto, hace un año finalice mis estudios, mentira, ser médico no es una carrera corta, pero la prime etapa finalizó hace un año, estoy estudiando ahora un posgrado de medicina, eso es otro tema, lo importante es que Katie llevaba casi dos años de haber finalizado arquitectura. Ahora tengo 25 años y ella cumplirá 26 años, somos dos adultas, decididas, locas y desesperadas, yo estoy desesperada mejor dicho, ella ha conseguido muy buenos trabajos y ahora se encuentra en una empresa dedicada exclusivamente a la arquitectura, esta en el área de paisajista, aunque en realidad ella no se especializo en esa área, aún así acepto, ahora vivimos en Francia por esa razón y decidí ingresar a estudiar acá, por las tardes trabajo como asistente de un empresario bastante exitoso, eso es lo de menos.

Un día hablando con el sobre las relaciones interpersonales, fui una bocaza y hable de ella, realmente no esta mal, solo que él en ese momento no estaba pasando una linda etapa, aun así esto lo sorprendió, y bueno gracias a ese charla, terminé tomando valor y pidiéndole matrimonio a mi chica, sorpresa la mía cuando aceptó, bueno no fue una gran sorpresa, pero los nervios en ese tipo de situaciones siempre están a flor de piel, ella es quien se encargo de su mayoría de los preparativos porque, bueno mi jefe decidió hacer cortos viajes que me impidieron ser más participe, aún así nunca me excluyó.

Ahora teniendo esto claro, comprenderán que estoy apunto de casarme.

Si, voy a casarme.

Quién lo diría, yo rechace a esa chica hace unos años, porque bueno era ingenua y no entendía mis sentimientos, irónico porque ahora que los se, yo di el siguiente paso en nuestra relación, ese que va marcar aun más todo.

Y si, no he dormido nada, que les digo, así es nuestra vida.

Justo ayer, llegaron en su mayoría los invitados más cercanos, con esto me refiero claro a Naths, Holland, Lexa, Leah, Fede, Morgan de estos dos también sus respectivas parejas, Samuel y Sebastián, si, Sebastián, mis padre llegarían hoy al amanecer y Holly se encargaría de ellos pues Nathan estaría ocupado con los suyos, el resto de invitados, amigos de la universidad, ellos se alojarán en hoteles cercanos y bueno, honestamente nos preocupamos más por nuestros chicos.

Katie a mi lado duerme tranquilamente, está cómoda, parece tan en paz que no puedo evitar salir de la cama para tomar una foto, aunque la iluminación sea una mierda, aun así la fotografió, es tan linda.

Dejó el celular, no sólo necesito dormir, debo hacerlo, si no al mediodía estaré vestida elegante y tendré cara de muerta y no me conviene, no hoy que sera nuestro gran día.

Las horas han pasado y los nervios están a flote, ¿pueden creer esto?.

Yo estoy a punto de casarme.

No yo no lo creo... Aun apesar de verme frente al enorme y lujoso espejo, mi silueta resalta gracias al corto y ajustado vestido, uno blanco muy lindo y bastante sencillo, Katie decía que debía usar un lindo vestido, cuando le conté que quería un traje no se negó, aun así no parecía del todo feliz, así que busque algún vestido lindo y este me gusto, es precioso y acompañarlo con un elegante y blanco saco era lo ideal, a su vez usaba unas medias y mis característicos tacones rojos. Todo era perfecto.