Todo lo que quise //Choni//

27.

Pov Cheryl

-2 días antes-

Salía corriendo de la casa hacia un campo de altos girasoles.
Corría por el camino que lo atravesaba.

Corría hacia el sol, el atardecer.

Pronto sería la noche y no me importaba.

Solo quería llegar.

Al final del camino había una mujer, alta, pelirroja, pálida, vestida de un largo vestido color blanco. Mi madre.

Corrí más rápido para alcanzarla, pero una silueta de un hombre se posicionó delante.

Era alto, moreno, de piel algo pálida también, con ojeras, heridas y los ojos rojo, usaba un traje gris oscuro con una corbata igual y una camisa negra. Daivid.

Me paré en seco al verlo. Empecé a temblar, él se fue acercando lentamente, llevaba un arma en la mano. A su lado apareció una señora, algo mayor, con el pelo color azabache, una túnica morada con detalles dorados y turquesas. Mónica. Me miraba con una cara psicópata.

Al otro lado de Daivid apareció otro hombre, aún más alto que el resto, pelirrojo, pálido y vestido de un traje negro con la corbata roja y la camisa negra. Clifford. Mi padre.

Lágrimas empezaban a caer por toda mi cara, el sol llegaba a su fin y apenas unos rayos eran visibles, los girasoles se marchitaban y agachaban, una ola de frío recorrió la zona.

Empecé a temblar del miedo, frío, ansiedad e impotencia por no poder llegar con mi madre. Tenía frío porque solo llevaba un vestido beige que me llegaba hasta la mitad de la pantorrilla, sin zapatos, despeinada y el rímel corrido haciendo parecer que tengo ojeras (que también).

Fui andando lentamente hacia atrás, los tres me siguieron, corrí y corrí, pero no llegaba a nada.

En un momento me giré para verlos, y tropecé. Empezó a llover, una tormenta con rayos y truenos. Los tres se me acercaron, iban a tocarme, pero aparecieron mis amigas y mi hermano, los echaron. Toni me cargó como recién casadas.

De repente, me dejó caer, pero no toque el suelo en ningún momento. Seguía cayendo mientras veía todo a mi alrededor en llamas.

—¿¡QUE COJONES!?— grité al despertarme del sueño.

Bajé más temprano de lo habitual, y me puse a hacer crêpes, cuando me las estaba comiendo llegaron Betty y Pilar... Creo que ya sabéis el resto.

-Actualidad-

—Cher?— se escuchó a través de la puerta mientras daban unos golpecitos en ella.

Hice un sonido de disgusto y de confusión.

—Soy Toni, ¿Puedo pasar?— lo decía con una voz tan dulce y delicada, ahg, creo que me sigue gustando. NO CHERYL, ella tiene novia, déjala ser libre, eres una egoísta de mierda, solo piensas en ti. AHAAHGGGG. ¿¡Porqué tengo que ser así!?

—Vale...— dije en tono bajo. Solté un suspiro y enterré mi cara en la almohada. Recordando otra vez el raro sueño de ese día. Sigo queriendo recuperar a mi madre, pero antes quiero disfrutar de la feria junto a mis amigas, y disculpa por mí comportamiento del otro día.

Ella entró delicadamente a la habitación.

—¿Quieres hablar?—

—Nop, solo quiero estar tirada en esta cama todo el día—