𝐌𝐞 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬 • ᴋᴏᴋᴏɴᴜɪ •

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𓏲 Los ojos finos de kokonoi mostraban furia pura, se sentía celoso y decepcionado en cierto punto, aquel rubio al que marco como su propiedad nuevamente se burlaba de él y buscaba a alguien más en su vida, lo mejor no fue dejarlo, debió llevárselo con el.

— ¿ Cómo se llama el chico ? ¿ A qué se dedica ? — pregunto mientras miraba la carpeta de fotos que le llevaron aquellos guardaespaldas

— Por lo que sabemos el chico es de nacionalidad japonesa, desconocemos su nombre pero se dedica a estudiar su  universidad aún que heredará la empresa de sus padres — respondió firme el primer sujeto

— ¿ El vive con inupi ? — guardo las fotos en la carpeta nuevamente

— No, pero el rubio a estado empacando sus cosas para mudarse — respondió el segundo sujeto de tés morena

— ¿ Donde vive el pelirrojo ? — recargo su cabeza en sus manos

— No lo sabemos señor —

— Quiero que investiguen donde vive, como se llama, quienes son sus padres y que es de inupi — ordenó

— Perdón que lo interrumpa, señor, pero el chico rubio es la pareja actual del pelirrojo, en la quinta foto que logramos tomar se ve claramente las muestras de afecto — dijo intentado no sonar nervioso

— Oh ... — abrió la carpeta y vio la quinta foto donde en efecto se mostraba como aquella pareja se besaba

Koko tomo la foto con fuerza haciendo que se comience a arrugar un poco, una pequeña vena del enojo se notaba en su frente, sus ojos volvían a tener esa mirada molesta que intimidaba a cual quiera.

— Quiero que llamen a ... — fue interrumpido por cierto tipo que entraba a su oficina con alegría

— ¡ Belial ! Mi señor — dijo el tipo con quien firmó el trato hace dos días

— Que sorpresa, justo estaba por llamarte — sonrió levemente

— Con permiso, señor — dijeron ambos guardaespaldas para después salir de la oficina del peli blanco

— ¿ Para que me necesitabas ? — tomo asiento como si estuviera en su casa y metió un cigarro a su boca

— Quiero pedirte cierto favor, el primero de los favores —

En aquella oficina la tensión se podía ver incluso en el aire, KoKonoi en verdad se estaba corrompiendo y ni el mismo sabía el porque, no todo era dinero lo sabía bien, pero si no lo hacía por dinero entonces ¿ por quién o que lo hacía ?

— Muy bien entonces, ¿ quieres que capture al chico ? — dijo dudoso

— Espera, creo que mejor hay que planear bien esto, si me descubren podría echar todo a perder — puso su mano en su barbilla y miro la carpeta con fotos

— ¿ Entonces ? — lo miro

— Dejame planear algo, investigaré un poco más cuando esté listo te llamaré, si hago todo tan rápido la policía podría descubrirme, sobretodo el oficial Naoto Tachibana, ese idiota finge que si es leal a su trabajo, no acepta los tratos por más dinero que le dé — bufo

— Bueno, tu das la orden yo estoy para servirte — se levantó y dejo el cigarro en el cenicero

— Si, yo te llamo puedes irte — miro las fotos nuevamente