Capítulo 8

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Emma:

Mamá, Leigh y candy habían ido al mercado fuera del pueblo. Así que si, estaba sola.

Subo mi habitación y al entrar veo a Frey. A Frey frente a cama, con la cara llena de gotas rojas y con un cuchillo en su mano.

—¿Q-qué...?

Frey, quien se quedo unos segundos en silencio, se acerca a mi hasta quedar frente a frente, hago mi cabeza hacia atrás para poder verlo.

Cierra la puerta detrás de mi y oigo como le coloca el seguro.

Empieza a pasar la punta del cuchillo por mi mandíbula, —No hagas ruido ¿si?

¿Es normal que esto me esté exitando?

Ya me estoy volviendo loca.

Me quedo en silencio, con la respiración pesada y sintiendo el frío metal de la punta del cuchillo pasar de mi mandíbula a mi cuello.

—Eres muy obediente, Emma. — dice cerca de mi boca.

—Me enseñaron a serlo. — digo en defensa.

La verdad, tener a Frey con este aspecto muy cerca de mi y con el cuchillo paseándose por mi cuerpo es algo...exitante.

Altísimo, perdóname por mis pecados impuros y todas las estupideces que pueda llegar a hacer, amén.

—Frey...— digo, tragando al sentir el cuchillo por mi cuello.

El cuchillo prácticamente presiona mi piel algo fuerte, no para lastimarme o si quiera sacarme sangre, pero si como para ponerme nerviosa.

—Shhh. — dice poniendo el dedo índice en mi boca, en señal de silencio.

—Seguramente ya sabías esto gracias a tu amiguita ¿no? ¿Cómo era que se llamaba? ¿Mandy? ¿Candy? ¿Landy?

Trago en seco, —Candy...

Una sonrisa se forma en el rostro de Frey y retira el cuchillo de mi cuello.

—¿Te lo contó todo? ¿Cómo vio que mate a ese hombre? ¿Cómo vio que la alfombra se manchaba? ¿Te contó cómo la amenaze?

Me quedo callada, sin saber que decir mientras solo veo los ojos grises de Frey.

—Dímelo, Emma. No te pasará nada. — vuelvo a sentir el frío del cuchillo en mi mandíbula.

Abro la boca, e hago movimientos con ella, intentando que algo salga pero es imposible, estoy tan nerviosa que ni siquiera se que decir. ¿Qué me había preguntado?

Como si Frey leyera mi mente, vuelve a pasar el cuchillo a mi cuello y habla, —¿Te lo contó todo o no?

Lo veo a los ojos, mientras respiro agitadamente, —Si...

—Bien.

Dicho eso, aleja el cuchillo de mi cuello y se aleja un poco, solo para quedar frente a frente.

Se oye como la puerta del piso de abajo es abierta y como mamá grita, —¡Llegamos!

—¡¿Emma?!— oigo a Candy, lejos de nosotros.

—¡¿Estas arriba?!— dice mientras la oigo acercarse.

—Adelante, grita. — dice Frey, mientras toma asiento, despreocupado en una silla al lado de mi cama.

Pero simplemente no puedo decir nada.

Se ve como están intentando abrir la puerta, girando la manija que no deja ya que tenía seguro. Pero eso solo hace que me ponga más nerviosa.

—Emma, abre ¿que haces ahí?— oigo al otro lado de la puerta.

Mi mirada va de la puerta a Frey, de Frey a la puerta y así sucesivamente.

—¿No quieres pedir ayuda?— dice Frey, mientras juega con el cuchillo en su mano.

Ayuda.

No, no quería. Prácticamente no estaba en peligro, si así fuera, el ya me hubiera matado o si quiera golpeado, pero no fue así.

Me quedo callada, en silencio sin moverme.

—Emma— escucho al otro lado de la puerta la voz de Brad.

¿Qué hacia Brad en mi casa?

Frey parece oír la voz también y se pone a trazar líneas con fuerza en la silla de madera.

—Emma, ¿Puedes hablar conmigo un momento? Venía a decirte algo importante.

Frey deja de trazar líneas y se levanta de la silla.

—Me voy, te dejo tranquila con tu noviecito y amiga.

Dicho eso, guarda el cuchillo en la bolsa de su pantalón y sale por mi ventana.

—Emma...estoy esperando...

Acudo al llamado de Brad y abro la puerta, quitando el seguro antes. Al abrir la puerta, veo los ojos café de Brad y su cabello negro desordenado.

—¿Si?— digo finjiendo una sonrisa.

—¿Por qué no abrías?— dice confundido.

Veo hacia ambos lados de mi habitación y le sonrió, —Estaba dormida, al oír tú voz me desperté.

El asiente y me sonríe, —¿Podemos hablar?

Asiento con la cabeza mientras lo dejo pasar a mi habitación, y Candy, quien tenía una sonrisa pícara en su rostro, solo se esfumó.

[...]

Nota de la autora: Perdón si no era lo que esperaban :(.

Muchas gracias por haber leído esto <33. Besos.

Tentaciones [Frey Stein Y Tú]Where stories live. Discover now