Capítulo 2: Días

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Día 1: 9:24AM

Rouge se despierta con lentitud, la luz del sol cruza por su ventana alumbrando sus ojos, observa a su alrededor y ve un desayuno ya preparado en el velador a su lado. Se sienta con incomodidad, poniendo el desayuno encima de sus piernas. Un pan medio quemado con un poco de leche en polvo, un desayuno bastante simple y fallido para ser de Omega, suspira y se limita a comerlo en silencio.

La murcielago todavía procesaba su situación, recibiendo un cambio brusco para ella como para el erizo y el robot. Empieza con la murciélago levantándose a manos de Omega, donde recibe ayuda del mismo para vestirse, no quiere saber como será el almuerzo. Pasan a los análisis, que van siendo recopilados por Omega, donde posteriormente serán enviados a los centros cientificos de G.U.N. para ayudar a curarla. El resto del día se la pasan viendo películas y series.

Día 1: 18:36PM

Omega se levanta a lo que Rouge para tratar de romper la tensión entre ambos empieza a hacer uso de sus viejos coqueteos -.Sabes esto puede ser un momento algo romántico, en cualquier momento podríamos cruzar nuestra mirada, después de todo, tus ojos me dicen más que tus palabras querido.- Dice la murciélago tirando ciertos coqueteos y bromas al erizo a su lado. No responde, por primera vez en mucho tiempo, no la mira, ni siquiera suelta una leve mueca, ella queda en silencio. Se repite lo mismo que el día anterior

Día 3: 14:33

Dos días pasan, la rutina se nota, la murciélago empieza a aburrirse, notando como su relación con su compañero se distancia, la falta de palabras siempre había estado presente, porque no las necesitaban para saber lo que piensan, pero ahora ya no se atreve a mirarlo, pues lo conoce tan bien, que no necesita que el diga una palabra para notar el dolor que está pasando, no sabe que decir. Omega está demasiado ocupado entregando informes o analizando a su compañera.

Para romper la rutina, la plateada se dirige a la cocina en silla de ruedas, empieza a observar y a criticar la comida que prepara el azabache, dado a que prefiere molestarlo antes que estar sola con sus pensamientos.

-.Lo estás haciendo mal, es mucha sal, el que seas tan salado con todos no significa que debas de serlo conmigo querido.- Dice la mujer molestando un poco.

-.Como si pudieras ver desde tan abajo.- Responde el erizo, después de tanto silencio al fin le regresa una broma.

-.Es que e estado tantas veces en tus brazos que se como los mueves para agarrar las cosas, deja te enseño como se hace.- Regresa el palo que le devolvió su amigo, aunque con su típico coqueteo tapandose la boca para evitar reírse.

-.¿Entonces como me vas a enseñar si no puedes observar?.- Dice deteniendo sus manos mirando a las ojos esmeralda.

-.Ponme encima del mesón y te enseñaré como una profesional.-

La rutina se rompe durante un tiempo, Rouge vuelve a ver esa mirada de conformidad con su vida en su amigo, como si nada hubiera pasado, el tono reservado de Shadow, siendo roto por los coqueteos y broma de Rouge, la vida inunda la casa, todo esto siendo observado y anotado por Omega.

Un mes después, llegan los primeros medicamentos experimentales para ver cuáles dan un mejor resultado en la recuperación de su agente, estos acompañando la comida por el desagradable sabor que tienen, aunque amargan un poco todo el avance que a tenido Shadow en la cocina.

-.Justo cuando mejoras en la cocina, me dan esto, que sabe incluso peor que tus primeros días en la cocina.- Alega tras tomarse la pastilla con el vaso de jugo de damasco.

-.Mientras no sean tan malas como tus bromas, vas a seguir tomandolas.- El erizo suelta una leve sonrisa, pese a que el silencio ya no los incomodaba, ahora era la falta de mirarse lo que incomodaba a ambos. Pese a que el dolor se había aliviado en dicho erizo, todavía era perceptible para ella, por lo que solo miraba cuando el respondía a sus bromas, pero jamás abría los ojos al dirigirse a ella.

-.Oh querido, en el fondo sé que te gustan, a menos que yo te guste lo suficiente para soportarlas.- El erizo queda en silencio, no sabe como responder, eso hizo que detuviera sus bromas, se dedica a comer su almuerzo.

La murciélago va pasando por las múltiples series disponibles, documentales de joyas ya vistos, tesoros por descubrir que solo le recuerdan su estado actual, ella simplemente respira profundo y decide poner una serie aleatoria, algo que la mantenga distraída de su situación y de la falta de respuesta de su compañero ante aquella broma, quizás para evitar malinterpretar aquel silencio, que no supo interpretar. Finalmente encuentra una serie, no le gusta del todo los superhéroes pero es la más interesante que logra llamarle la atención.

Omega se acerca y se detiene junto a ella, en caso de alguna necesidad y por curiosidad, dado a que nunca le había visto el valor a los tesoros, esperaba buenas escenas de acción en dicha serie, la violencia siempre a sido su mayor interés, el erizo se acercaría en silencio, sentandose a su lado, tal vez por curiosidad de ver algo fuera de lo común para todos o por aburrimiento. Hacía tiempo que no veían algo entre los 3, y con ello una sonrisa se asoma por la murciélago.

Shadouge: EnfermaWhere stories live. Discover now