-Todo comienza cuando el padre de Kiara es herido de gravedad por un disparó y en ese tiempo el mundo se va a la mierda y el mejor amigo de su padre saca a Kiara, su hermano y su madre de la ciudad, creyendo que su padre había muerto y salvandolos d...
Abraham comenzó a mirar el camión para ver si podía arreglarlo.
- íbamos en un convoy y al llegar a una duna, vimos un camello que parecía que iba a vomitar, seguramente porque el enemigo le había metido explosivos por el culo, estábamos a seis metros de la explosión, que mando la joroba del animal al otro lado del desierto y nos fuimos a casa, así que dime como cojones has podido averiar este camión - comentó Abraham mirando a Eugene.
- con un estado de euforia y desconocimiento sobre armas de fuego graneado - respondió Eugene.
Rosita se agachó y cogió algo del suelo.
- ¿es tuyo? - me pregunto dándome una foto.
La cogí y era mía, era la foto con papá, Carl y Judith.
Mire a rosita pero no dije nada Y me guarde la foto.
- siento lo del camión, espero que lleguéis a Washington - le dijo Gleen a Abraham, y luego se marchó.
Tara se acercó a Rosita y le dio un arma - Esperame - le gritó a Gleen.
Luego me acerqué a Rosita y hice lo mismo dándole una pistola - suerte - le dije y me giré para ir con Gleen y A Tara.
- ¿qué coño vamos hacer si, no? - escuche a Rosita decir.
- ir a Washington ¡y salvar este maldito mundo! - grito Abraham.
Cuando me giré vi que rosita venía detrás.
[...]
Estuvimos caminando por un rato Abraham y Eugene venían también.
- tengo que reconocerlo, ese hijo de puta es muy persistente, entiendo por que le sigues, eres una tía leal y buena persona, me gusta, pero lo que hacemos... no se como decirlo, salvar el mundo es... mucho más importante, por que aunque encontrará a su mujer ¿qué pasaría? ¿cuánto tiempo durará su felicidad si no llevamos a Eugene a Washington? - me pregunto Abraham.
- ¿crees que seguir a Gleen me convierte en buena persona? Pues No lo soy - respondí.
- claro que si - dijo Abraham riéndose.
- no sabes nada de mí, igual que yo no se por que vas a Washington, entiendo por que va Eugene, es el único que sabe como solucionar esto y Rosita creo que te quiere, te seguira a cualquier parte, pero ¿por qué has aceptado cruzar medio país para llevarle allí? - pregunté.
- ¿tan difícil es creer que quiera salvar el mundo? - contestó Abraham.
- ¿porque eres buena persona? No tienes que decírme por qué, pero no me mientas - le respondí con seriedad.
[...]
Pasaron un par de días y seguíamos caminando, llegó la noche Abraham sacó unas lata de comida para cenar, Rosita comenzó a repartir un poco a cada uno.
Unas horas después todos se fueron a dormir y me apoyé en un árbol para vigilar, Abraham estaba también despierto y se sentó a mi lado.
- ve a dormir, yo me encargaré - le dije a Abraham cuando le vi bostezar.
- no te ofendas, pero no voy a dejar la vida de Eugene en tus manos - me respondió Abraham.
- vinisteis con nosotros porque querías ayuda - le contesté.
- tu ayudas, pero no mandas, iremos con vosotros hacia el norte, hasta que encuentre un vehículo, entonces los seis serán tres - me dijo Abraham.
- o dos - respondí.
- cada uno tiene su misión - dijo Abraham - necesitas dormir, aún no te he visto hacerlo... pensaba que era porque estabas enamorada de él, una chica enamorada de un tipo al que ayuda a buscar a su chica, si fuera ese el caso... cerrar los ojos sería una tragedia.
- si ese fuera el caso - respondí sería.
- si, vi como le mirabas el escote a Rosita, cuando te servía la cena, esos pechos son hipnóticos - dijo Abraham riéndose - Eugene se pasa la mitad del día mirándole el culo, no estoy loco, solo significa que mi teoría no es cierta.
- lo siento en el alma.
- bueno A veces me equivoco ¿es por algo que hiciste o algo que no hiciste? - me pregunto Abraham.
- por algo que hizo, tu eras militar, todo ese discurso entusiasta de que la mision es tu vida - respondí.
- si, claro.
- si, así que los dos tenemos nuestras razones, nuestra misión ¿qué harás cuando se acabe la tuya?
Abraham, no respondió Y se levantó.
- deberías dormir - me dijo y se marchó.
[...]
Llegó la mañana y volvimos a seguir nuestro camino, Rosita se me acercó mientras estaba sola.
- Hola - me dijo poniéndose a mi lado.
- eh... Hola... - respondí.
- ¿qué ocurre? - pregunto Rosita.
- nada, ¿por que iba a pasar algo? - contesté.
- porque pareces nerviosa - comentó rosita.
- no, no lo estoy.
- me di cuenta - respondió Rosita.
- ¿cuenta de que?
- ayer cuando servía la comida, mirabas mis pechos más que la comida.
- no se de que hablas - respondí algo nerviosa.
- no importa, no eres la primera persona que lo haces, Tara hizo lo mismo y Eugene se lleva todo el dia mirándome el culo - respondió Rosita.
- ¿Tara? - pregunté.
- Lo siento, no sabía que ella era... - Dijo Rosita algo incómoda.
- ¿ella que? No entiendo - respondí Confundida.
- ¿ella te gusta? ¿o es tu novia? - pregunto Rosita.
- No, No soy lesbiana - dije algo sería.
- pues para no ser lesbiana, parecía que prefería comerme a mi, que la misma comida - respondió Rosita riéndose, dejándome atras.
¿pero qué acaba de pasar? ¿porque me ponía nerviosa? Cuando me habla me siento rara...
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