¡No me lo puedo creer! ¡Este hombre es gilipollas! Por alguna razón sentía que tenía que haberme quedado en Londres.
Yo: ¿Qué haces aquí?
Sean: Quería hablar contigo, Emma.
Le miro incrédula y pongo los ojos en blanco. Sé está proponiendo cabrearme hoy. ¡Debería haberme quedado en Londres!
Yo: ¿Ahora quieres hablar? ¡Has tenido cuatro años para hacerlo y sin embargo no lo hiciste! ¡Preferiste a tu puta barata antes que a tu propia hija!
Se lo suelto todo de golpe y bien clarito para que lo entienda. Estoy muy enfadada con él por habernos dejado justo antes de venirme a España. Casi no pude venir por el estado de mi madre y mi hermano no estaba. Nos dejó solas.
Sean: Emma, no grites. Déjame que me explique.
Yo: ¿Cómo te atreves a venir aquí y pensar que voy a callarme? Tengo muchas cosas que decirte y no son buenas ninguna.
Sean: Sé que estás muy enfadada, pero necesito decirte que he vuelto para estar contigo, que quiero volver a tu vida. No espero que me perdones...
Yo: ¡Por supuesto que no te voy a perdonar! ¿Acaso crees que soy tan gilipollas?
Este tío se pincha si se cree que le voy a perdonar todo lo que hizo. Engañó a mi madre, a mí y a mi hermano y después se fue, como si fuéramos mierdas que no sirven para nada más que para oler mal.
Sean: Emma, por favor, deja que me explique.
Yo: ¡No! ¡Fuera de aquí! No quiero volver a verte. ¡Fuera!
Suspira, resentido, agacha la cabeza y sale por la puerta. Cuando la cierra, me desplomo en la silla y oigo un ''toc, toc'' en mi puerta.
Yo: Adelante...
Javi aparece asomado por el hueco recién abierto de la puerta con cara de preocupado.
Javi: ¿Estás bien? ¿Quién era?
Yo: Mi supuesto padre. No sé cómo sabía que trabajaba aquí. Lo siento si he molestado.
Javi: Tranquila. Ted está fuera y te busca. ¡Qué majosidad de ser viviente!
Nos empezamos a reír y me levanto para salir fuera y ver a Ted. ¿Qué hará aquí? ¿Habrá escuchado la discusión con mi padre? ¿Se habrán encontrado? Salgo y le veo sentado en la pequeña sala hablando con Javi.
Javi: ¿Y cómo funciona? Me refiero a ¿cómo es capaz un chip en soportar toda esa velocidad?
Ted: Javi, no le des más vueltas. Están diseñados para eso. ¿Por qué los aviones pueden aguantar la presión atmosférica? Porque están preparados.
Javi: Es cierto...
Ted: Además, yo solo diseño el programa que permite leerlos, no el chip en sí.
Me acerco a ellos y Ted, al verme, me dedica una de sus sonrisas. No sabe lo que ha pasado y menos mal. Sé que habría sido capaz de ir tras él y matarlo o algo. No es algo que quiera presenciar de momento. Javi vuelve a su despacho pero antes, al pasar por mi lado, me coge del codo.
Javi: Cuéntaselo.
Le miro con miedo y él me sonríe y vuelve a andar hacia su despacho. Ted me mira y se acerca a mí.
Ted: ¿Te ocurre algo? Javi te da una hora para comer conmigo.
Yo: No pasa nada. ¡Qué maravilla! Normalmente tengo media hora. ¡Gracias, Javi!
Javi: ¡De nada, guapa! ¡Todo un placer!
Los tres empezamos a reír y Ted me coge de la mano y salimos a la calle, al restaurante italiano de la esquina.
VOCÊ ESTÁ LENDO
Buscando a mi Grey (CANCELADA)
Fanfic¿Crees que el destino existe? ¿Que los libros se hacen realidad? Eso piensa Emma hasta que le cruza en su camino alguien que le cambiará la vida y se la pondrá patas arriba, que hace que no crea en el destino pero empiece a preguntarse si los libros...