𝐁𝐞𝐬𝐨𝐬 𝐒𝐚𝐛𝐨𝐫 𝐚 𝐂𝐚𝐟𝐞 [4𝚃𝚘𝚠𝚗 𝚡 𝙼𝚊𝚕𝚎 𝚁𝚎𝚊𝚍𝚎𝚛]

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No habló, estaba aterrado de la situación, era un chico, incluso su familiar le había aclarado que aquello era solo para las chicas.

—¡doña babosa porque anda queriendo ser furra!—gritó entre chillidos maldiciendo una y otra y otra vez a aquella antepasada de su familia, carajo—¡y luego que la doña aquella no se explica!—tiró de sus orejas tratando de alguna manera quitárselas, cuán error tan grave había cometido contra su propio cuerpo en aquel arrebato de ira, lágrimas de dolor desbordaron por sus mejillas, sentía tanta impotencia ante la supuesta estúpida maldición.

—por favor _____...sal—volvió a decir Aarón "Z", estaba preocupado por su amigo, y es que aunque le pareciera extraño la situación por la que pasaba el muchacho menor aun así quería ayudarlo, debía qué.

Entre pequeños reproches y sollozos abrió la puerta cubriendo su rostro con ambas manos simplemente no quería que lo vieran de aquella manera tan acabada, sabía que a los demás le dolería con mayor frecuencia sabiendo que el (c/c) era bien conocido por su alegría, sin esperar más se lanzó a los brazos del moreno aferrándose a él en un abrazo siendo correspondido de forma cariñosa por el chico atlético dando suaves caricias en su cabellera en un intento de tranquilizarlo.

—me gustan tus orejas, te hacen lucir más lindo—dijo Aarón "T" queriendo tocarlas, le parecía algo curioso y lindo en la cabellera de su amigo pero respetaba que posiblemente le hiciera sentir incómodo y más por el hecho de que todo esto era totalmente nuevo, no es normal ver a un joven en pleno desarrollo con orejas y una cola.

—calla—sorbió su nariz crando aquel sonido de "snif"; sabía que lo decía por hacerle sentir mejor, o bueno, sus pensamientos le decían aquello pues a los ojos del castaño claro aquello era algo fascinante pues solo se podrían ver en peliculas.

—¡pero es enserio!

—¿puedo tocarlas, _______?—sugirió el rubio menor, le era algo tierna la apariencia del (c/c), nunca había visto algo así en humanos y claro, como fiel amante de los animales no podía resistirse ante la tentación de acariciar aquellas orejas afelpadas.

Este, asintió con negación, palabras contradictorias pero verídicas pes mientras que aceptaba para no hacerle "el feo" a su crush, otra parte le importaba que no lo hiciera y simplemente suplicaba tener dignidad.

Sin esperar más tiempo acaricio con una de sus manos la afelpada oreja izquierda del menor quien apenado y un tanto molesto aceptaba las caricias.

—por que...por que son tan lindos—soltó sin pensarlo claramente cayendo en cuenta con rapidez de sus palabras, carajo por que había dicho aquello, maldecía aquella maldita cosa que les había hecho aquella antepasada—estupidos pandas rojos—murmuró con molestia, carajo.

—¿quieres contarnos que sucedió?—el (c/c) solo calló, estaba indeciso y eso parecía un más notorio por sus reacciones, estaba siendo más demostrativo ante su sentir cosa que comenzaba a causarle problemas al menor entre algunos—si no quieres no im-..

—esta bien...esta mierda es por una maldición familiar, Sun Yee es una antepasada de mi familia, la guerra y demás cosas que resumo, no había hombres y ella pidió la fuerza para poder proteger a su pueblo y claro que si, se lo concedieron convirtiéndola en un panda rojo—murmuró esto con molestia—la abuela Wu y mi tía Ming me contaron que eso solo le sucedía a las mujeres y ahora yo tengo esta mierda y no se por que si soy un hombre—tiró de sus orejas enojado pero mierda seguia doliendo como nunca antes había sentido el dolor, curioso para alguien que se lastima hasta bajando del autobús.

—eso es...!genial¡—gritó Aarón "T".

—¿eh?—lo miró confundido.

Robaire se acercó un poco más—puede ayudarte a progresar, ________—sonrió dulcemente.