black holes and revelations | ls

𝐨𝐮𝐫 𝐡𝐨𝐩𝐞𝐬 𝐚𝐧𝐝 𝐞𝐱𝐩𝐞𝐜𝐭𝐚𝐭𝐢𝐨𝐧𝐬

Starlight- Muse

—Deja de intentar entrar en mi mente, no va a funcionar.

Harry lo siente de golpe. Él le ha sacado de una forma tan brusca si quiera antes de poder entrar, que lo resiente en lo más profundo de su estómago.

Sus mejillas se vuelven ardientes cuando sus duras palabras chocan. Los gélidos iris zafiros aún le provocan escalofríos cada que se posan de aquella penetrante manera hacia su rostro enrojecido, y a pesar de que este puede entrar en sus pensamientos sin problema alguno de forma experta en aquel preciso momento, no lo hace.

Se pregunta porqué.

Pero al mismo tiempo logra aliviar el ligero bochorno insufrible, porque entonces sus juicios hormonales de adolescente enamorado no se verían totalmente expuestos. A pesar de que a veces no ha podido evitar ser tan jodidamente obvio.

Carraspea la garganta, y su mirada se desvía hacia el libro abierto a la mitad de su regazo, para evitar la vista ajena que casi parece humillarle.

—Lo siento.

Louis no responde, más bien, le dedica un último vistazo aburrido en señal de que su pequeña conversación ha terminado. Así que vuelve a concentrarse sobre el pergamino en el que ha estado trabajando durante los últimos minutos.

El silencio que le sigue después es tan abrumador, que casi quiere salir huyendo de él, ya que eso le da pase libre a que sus avergonzados pensamientos le torturen de una y mil formas que hasta ahora desconocía. Como que se ha expuesto a si mismo de la peor forma.

¿En que demonios estaba pensando? Seriamente Harry, ¿intentar usar legeremancia de principiantes con Louis puto Tomlinson?

Por supuesto que se iba a dar cuenta, por supuesto que él no lo iba a permitir jamás. Inmediatamente que sintiera su insípida magia intentando penetrar sus barreras de acero, las bloquearía hasta dejarle con un punzante dolor de cabeza si no es que un destino peor.

Fue estúpido, y humillante. Pero no pudo se tan severo consigo mismo cuando apenas hacía algunas semanas que se había leído todos los libros posibles que pudo encontrar en la biblioteca en la sección permitida o en el salón de defensa contra las artes oscuras respecto a aquella disciplina, así que solo quiso probarse.

Aquel tipo de magia no se la enseñaban en clases, y era demasiado miedoso o tímido de pedir ayuda a algún profesor. Ni siquiera tuvo el valor con la dulce maestra de confianza Merrythought. No era que fuera prohibida o algo como el estilo, el tema estaba en su antigüedad y complejidad que dejó de estar dentro de los programas académicos debido a su naturaleza demandante.

Nadie en su sano juicio querría dedicar horas, semanas, meses y si se era optimista años, a aquella avanzada enseñanza a un grupo enorme de adolescentes inmaduros.

Aún así, lo intenta.

Zayn había sido su conejillo de Indias por lo que respectaba a los últimos días. Ambos se quedaban despiertos a altas horas en su cama del dormitorio con un hechizo de protección hacia el dosel, para no ser molestados. Por supuesto las primeras veces no funcionó, y su compañero se quejaba enormemente de que el sueño le consumía, pero cuando la noche de antier Harry pudo observar difusamente la última conversación con Niall en los baños del segundo piso, todo pareció iluminarse.

Porque entonces estaba aprendiendo más rápido de lo que creyó.

Y eso le llena de orgullo.

Aunque no en aquellos instantes donde el ambiente ha tomado un tinte incómodo. Con el aire más pesado de lo normal y el silencio más vacío que de costumbre en la biblioteca solitaria a mitad de la noche.