Capítulo 6

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Amelia

Dicen que la mayor suerte de una mujer es, ser madre, tener un niño de tu propia sangre, llevar nueve meses ese ser divino que llega a tu vida para darle luz; todos comentan que es la mejor sensación del mundo.

A mi edad he tenido la suerte de conocer muchas madres e incluyendo a Emma; todas tienen medios diferentes de educar, hay quienes son un poco radicales, otras llevan mano sueva y hay quienes solo los dejan hacer lo que quiera con el fin de que no molesten tanto. Ahora, obviando estos tipos de madres, nunca he tenido el desagradable gusto de coincidir con una madre que haya tomado la radical decisión de abandonar al hijo u hija a su suerte.

Aunque, que no haya conocido a una no significa que no existan; yo soy de las personas que no juzgo las decisiones de nadie por muy malas que puedan llegar hacer ya que como he dicho en reiteradas ocasiones, todos tenemos una razón detrás, ya sea válida o no. Lo que no logro comprender es, ¿Por qué tener hijos si no son capaces de criarlos y darles la familia que se merecen? Estas criaturas no pidieron nacer y si decides tener un bebe es porque ya estas preparada y es tiempo de formar una familia.

Cuando era adolescente le asegure a Emma que no tendría hijos; al principio ella me entendió ya que sabía las razones por las cuales yo no quería bajo ningún concepto, ser madre. Probablemente esto sonará demasiado duro, y habrá personas que no compartan mi opinión, pero tienen que saber que todas las mentes no son las mismas, así que nadie piensa igual porque si así fuera, el mundo, no sería mundo. En mi caso, yo tenía mucho miedo a no ser una buena madre, o que simplemente mis hijos no me vieran como una, me daba terror no poder con el sacrificio que conlleva ser mamá; por estas razones y además de que venía con un trauma anterior al no tener madre, decrete no ser una en ese momento.

Lo que pasa, que en sus días no pensé que era joven, que el mundo da muchas vueltas y que probablemente iba a estar en constante interacción con un infante; y es aquí donde entra mi pequeña sobrina. El primer día que la tuve en brazos sentí que se había formado una conexión tía-sobrina, no sé si eso existe, pero que fue tipo ''me le tocas un pelo y si, la madre te mata, pero detrás vengo yo, te revivo y te vuelvo a matar'' y fue a raíz del nacimiento de esta pequeña que mis sentimientos de crear una familia fueron surgiendo poco a poco.

En estos momentos está en la cunita bien dormida, la noche fue súper intensa, no paraba de pedir chuches o de querer ver la tele y cuando le di un dulce fue lo peor que pude hacer porque fue un chute de adrenalina que le entro de repente que hasta un jarrón rompió la condenada; para bañarse ese es otro cuento aparte, renuente a echarse un poco de agua, no había dios que la hiciera meterse en la maldita bañera, tuve que traer toda su juguetería, y mira que tiene, para que pudiera tranquilizarse y bañarse sin rechistar. El baño se ha quedado tan mojado, que por un momento me dio lastima con Cira, ya que ella es la que tiene que venir atrás y limpiar el desastre, pero luego recordé que no la soporto y como mismo vino mi lastima así mismo se va.

Luego de bañarla le tuve que leer un cuento ya que la madre y el padre la acostumbraron a eso, la tuve por un rato en mis brazos y mientras la mecía le conté la historia de La Bella Durmiente; para mi gran sorpresa a la mitad del cuento la niña ya andaba en los jardines de Morfeo. Acomode su diminuto cuerpo en la cuna y desde entonces he estado vigilando su sueño; es tan hermosa, tan inocente, en momentos como estos es que entiendo más a Emma y su amor hacia su hija, solo con ver esos hermosos ojos verdes, te dan ganas de comértela a besos y desear que todo su camino sea limpio y libre de personas malvadas.

Miro a mis alrededores y sonrió con la decoración de sus aposentos, las paredes son de un color rosa pastel, la hitación está decorada como el interior de un pequeño palacio en medio de la estancia hay una alfombra gris que contrasta perfectamente con el color predominante, encima de esta se encuentra la pequeña cuna donde duerme la infante, a un lateral de la habitación hay una cama con dos pisos y una escalera para subir al segundo que es tiempo un diminuto castillo lleno de peluches y más, la parte de abajo es algo "simple", y cuando me refiero a simple espero que se note mi sarcasmo, ya que las sabanas son Valentino en colores rosas, especialmente hechas para Nahomi, en el centro de estas esta su nombre inscrito con una tiara encima de la i de su nombre.

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⏰ Last updated: Jun 23, 2022 ⏰

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Dulce TorturaWhere stories live. Discover now