XXVI: Amanecer Del Primer Día. - Amy.

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Ella llevaba un par de horas despierta, pero no encontraba la fuerza para levantarse de la cama, la fiesta de anoche había sido un completo caos para ella, y estaba sufriendo los estragos de sus decisiones.

Por un lado maldecía en su mente la forma en la que había caído en el engaño de Shadow, se tenía tanto asco a sí misma, ¿qué le diría a sus amigos? Seguramente estarían decepcionados, habían pasado por bastantes cosas y ella había echado todo el esfuerzo a la basura con ese beso; al final de cuentas había entendido aquella frase que el azabache le daba después de todas sus pelas, quizás después de todo ella estaba destinada a "siempre volver".

Luego pasaba a Sonic y Sally, se sentía traicionada, pero ellos aún no tenían nada, no habia compromiso alguno, después de todo no le había "sido infiel", pero se sentía como tal, sentía la apuñalada por la espalda la cual atravesaba su corazón de par en par; pero las circunstancias no le permitían quejarse, recordandose lo que ella hizo con su antiguo amor.

¿Aún lo amo?

Se cuestionó por primera vez en mucho tiempo, claro que recordaba lo malo, ella se estaba esforzando por odiarlo; pero lo bueno era más,  recordó la forma en la que Shadow la protegía de todo, los pequeños detalles que le daba y las memorias que, en su momento de anoche, le había demostrado que él recordaba y las tenía presentes.

¿Acaso él la amaba después de todo?

Pasó a la siguiente pregunta, sin poder tener una respuesta clara, ella podía pensar que así era, pero sus acciones se contradecían, a veces podía apostar a que estaba en lo cierto, pero luego solo pensaba en que ella era una obsesión más para él, aquella chica que le elevaba el ego; eso lo hacía más difícil.

Sus manos apretaron con fuerza la sábana que la cubría y le elevó hasta su rostro, buscando ahogar los nervios que la invadían, además de pasear su mano por encima de sus labios, recordando el apasionante beso robado por parte del de betas; a quien le concedería la victoria solo esa vez.

Había cerrado sus ojos y recordó cada momento, la forma con la que la miraba, su rostro que demostraba orgullo y pasión, el sabor amargo del whisky en sus labios y la textura de los mismos, siendo suaves y dulces, recordando sus movimientos una y otra vez, el agarre fuerte que sus manos ejercían sobre su cintura y cuello, las cuales no tuvieron la descencia por preguntar para explorar todo su cuerpo en ese instante, cuestionandose si realmente estaba "molesta" por ese encuentro, pues el palpitar de su pecho decía lo contrario,  y sus labios y otras partes de su cuerpo pedían más y más.

Olvidando el detalle del azul por completo.

Toc, toc, toc. Llamaron a la puerta y con un grito le permitió pasar a Mighty, quien se recostó a lado de ella y la acompañó en su sufrimiento, pidiéndole que le contara que había sucedido ayer y porqué su reacción de anoche, escuchando atentamente todo, la plática con Sonic, la llegaba con Sally y el beso con Shadow.

- Es increíble, ¿Crees que Scourge sepa algo?.- cuestionó ella primero, mirándolo fijamente, esperando que no la juzgara, pero no fue así, después de todo él era su mejor amigo, jamás la trataría de tal forma.

- Seguramente fue un plan en conjunto. - aseguró él con temple serio, muy seguro de lo que había dicho. - sólo piénsalo, de seguro a la tal Sally le gustó Sonic, entonces ellos le dijeron que estaría contigo, y que una buena forma de apartarte sería diciendo eso, obligandote a buscar a Scourge para mantenerte distraída y lejos, para que ella pudiera hacer su jugada y tú...

- Y yo ... ¡me la hizo el infeliz!. - Gritó exasperada, dando un brinco de la cama. - el mal parido quería tenerme para él solamente y yo caí directo en su juego, ¡maldito seas, erizo de pacotilla!. - maldijo dando vuelta por toda la habitación, terminando por sentarse nuevamente en la cama, rendida pues había gastado la poca energía que poseía en ese arrebato.

- Se salió con la suya esta vez, pero... debo preguntar... ¿A quien de ellos quieres?, creo que es momento que escojas a uno.

Finalizó su amigo mirándola fijamente, aunque eso la puso en un estado peor, deseaba decir que elegía a Sonic, él era un buen partido, el mejor que había tenido en su vida, pero su terco corazón aún tenía sentimientos por el rudo y áspero Shadow.

- Yo... yo. - titubeó dudosa de que decirle. - yo... me elijo a mi. - finalizó con sus orbes llorosos, lo que bastó para que el armadillo esbozara una sonrisa de par en par.

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𝔅𝔲𝔱𝔱𝔢𝔯𝔣𝔩𝔦𝔢𝔰  RE-ESCRIBIENDOWhere stories live. Discover now