POV

619 67 11
                                    




¡Hey, hey!

Ha pasado algo de tiempo, lo sé. El trabajo, demasiadas cosas que solucionar... no he tenido precisamente tiempo ni ganas, pero al fin tenéis el primer capítulo de POV de Alarick.

Soy consciente que algunas partes se habrán leído, pero mi intención es que, desde este punto de vista, se descubran nuevas situaciones que desde el otro libro no se vieron, además de comprender con exactitud qué sucede con los Harris y cómo piensa Al.


Iré actualizando tanto como me sea posible. De verdad que con el trabajo, trabajando maña y tarde, poco tiempo tengo :(.

Seguramente haga un libro a parte, pero hasta que encentre título... Iré actualizando en el mismo libro.


Os quiero, xx





_

Misma rutina:

Pelear como críos, decirle lo capullo que era, mi madre suplicar porque me comportase, mientras mis hermanos se regodeaban por ser mejores hijos que yo, y vuelta a empezar.

Al menos Dave parecía divertirse con ello.

Días como hoy no soportaba aguantar la compostura y ponerle buena cara todo el mundo. ¿Por qué teníamos que ser todos así? Nada eral real. Y lo peor de todo es que tan sólo él y yo lo sabíamos.

Le di un trago a mi cerveza y observé de nuevo el interior del bar donde había quedado con ella. ¿Sinceramente? Hoy no me apetecía un carajo aguantarla. Era uno de esos días.

Yo sentía un gran aprecio por Beck —en cierto aspecto, y si queremos llamarle así—, dado que hemos estado siendo compañeros durante un largo año, pero nada más. Y sabía que las cosas para ella se estaban volviendo algo más profundas, todo lo contrario a lo que yo buscaba o quería. Además, tampoco teníamos nada en común.

Todo esto había sido una completa estupidez. 

Simplemente, cuando la conocí, fue todo algo físico. Era guapa, modelo y me servía para ahuyentar a la familia. Pero es que todo se alargó demasiado. Aunque ellos se acostumbraron a ella, como yo, supongo. Y apreciaba su presencia, bastante, pero no del modo en el que ella deseaba que lo hiciese. Estaba enamorándose, quería más, pero yo no era la persona que iba a darle eso.

Ni quería ni podía.

Tenía que decírselo.

Y hasta me mosqueaba sentirme mal al respecto.

Quizá no era la más inteligente, lo que yo buscaba en un ser humano, pero era buena conmigo y pasábamos mucho tiempo juntos al fin y al cabo. Era la única cosa que alegraba, mínimamente, mis días gracias al sexo y el mantenerme alejado del control de mi familia.

A pesar de que me salía un ojo de la cara.

Definitivamente, nunca tuve que traspasar la barrera del sexo.

Nada de esto habría pasado.

Resoplé, intentando ordenar mis pensamientos.

Hoy no. Necesitaba pensar antes de actuar.

Al desviar la mirada, intentando obtener cualquier otro tipo de información y bajar el colocón que llevaba, divisé a una chica entrar en el bar y captó mi completa atención, de una manera...

No tenía palabras.

Pareció entrar asustada, insegura, y eso me hizo, de algún modo, gracia. Era guapa, joder que si lo era. De esas que no comprendes, porque desprenden algo que te atrapa desde la primera vez que posas la mirada sobre ellas. Mis ojos la siguieron curiosos, viéndola recolocar su atuendo y su pelo mientras los suyos buscaban a alguien. Su pelo largo, castaño, brillaba, aunque su mirada desprendía algo totalmente distinto de lo que ella quería demostrar con su vestimenta.

UN TRATO Y POCO AMOR ✔ [ ¡¡EN PAPEL!!]Where stories live. Discover now