𝔅𝔲𝔱𝔱𝔢𝔯𝔣𝔩𝔦𝔢𝔰 RE-ESCRIBIENDO

XXVIII: El Agente De Ken.

Ambas decidieron bajar corriendo en busca del desayuno, solo por el mensaje que había recibido, era Silver, el erizo de anoche, el peligroso agente de Ken, el chico de melenas plateadas y, solo por esa vez, su cita de las 9:40 p.m.

Claro que aún faltaban 9 horas para eso, pero debía terminar con sus pendientes y luego investigar todo lo que podía en el lado oscuro del Internet, solo por precaución, algo que le causaba un revoltijo en el estómago a Cream.

- Es solo precaución, pero si algo me pasa, culpalo a él por todo. - informaba la peli-lila mientras pasaba a la "otra red" y buscaba a esos agentes, el lado oscuro de Internet era más para criminales y depravados que buscaban saciar sus fetiches con búsquedas ilegales, compras extrañas o, en este caso, contratar los servicios de alguien "especial" ; y aquí era donde Ken Peterson entraba, claro que era un prestigiado profesor en las artes ocultas y un gran ingeniero con tecnología avanzada, pero él no era sólo eso, poseía riquezas y dotes extrahumanos, los cuales había aprovechado al crear su organización, buscando competir con Dan y sus chicos, solo que ellos lo harían de forma especial; la fachada decía "servicios de seguridad" pero detrás de eso, sus empleados reciban órdenes de quien fuera que lo deseara, teniendo como objetivo investigar, rastrear o eliminar personas, dependiendo de lo que su arrendador dijera. Y si, ahí estaba, al entrar en su ordenador observó el listado de detectives del lugar, hasta detenerse en aquel erizo bien parecido, leyendo su información y anotandola lo más rápido posible, pues el sitio tenía una orden de no permitir una visita de más de 5 minutos en su página, ¿qué pasaba si excedía el tiempo?, no tenía ganas de saberlo. - Silver The Hedgehog, tiene 21 años, lleva trabajando para ellos 6 años, dice que su efectividad es de 10/10, misiones en las que puede participar, investigación y eliminación. - siguió leyendo, más la sensación de intranquilidad la poseyó por completo, pensando en que estaba posiblemente atrapada, en la boca del lobo (o en este caso, del erizo), agregando también un poco de miedo, pues estaba claro que no tenía ventaja alguna, saber su nombre no serviría de nada, él era una estrella, se libraría de todo adjuntando que era su misión, ¿qué le quedaba?, confiar en que el tipo solo deseaba hablar e intercambiar información, pero... ¿pondría en juego su vida y la de sus amigos por un "salto de fe"?, no estaba segura, pero ella era Blaze The Cat, no permitiría que eso la detuviera, lograría su cometido y saldría a salvo, y en caso de no ser así, lo alejaría todo lo posible de Amy y el resto de sus amigos... De toda su familia.

Amy y Mighty fueron los siguientes en salir de la habitación, solo para correr a la cocina y encontrarse con las dos chicas aferradas al borde de la computadora, para después tomar velozmente el mouse y cerrar todo, terminando con un azotón para bajar la tapa y cerrar por completo la laptop, y ahí estaban, como si no hubiera pasado nada, luciendo una enorme sonrisa y ocultando sus objetivos, y en el caso de Cream, escondiéndo detrás de ella la hoja con la información obtenida hace poco.

- ¿Okey?.- dijo el armadillo al ver el extraño comportamiento a lado de Amy, quien intentaba descifrar el rostro de sus mejores amigas, buscando sacarles información.

- Blaze tiene una cita. - informó Cream astutamente, desviando la atención de ella a la gata. - cuéntales nena. - volvió a decir actuando sorprendentemente de forma muy natural, para impulsar a Blaze hasta ellos, teniendo tiempo suficiente para desaparecer de su vista y guardar la hoja de cuaderno en su habitación.

- Es con ese chico de la fiesta, no creo que lo recuerden... El que ayudó a Knuckles. - les dijo la verdad a medias, pues era muy bien sabido que ella no podía mentir, entonces al revelar eso no lo estaba haciendo. - Estaba checando la ubicación, quiere verme en un lugar interesante. - añadió ella mostrándoles el mapa en su celular, solo para convencerlos de que ese era el único problema ahí.

Ambos divisaron la ubicación que su amiga les había dado, pero su sorpresa fue grande al descubrir que el lugar de encuentro no era nada más y nada menos que el restaurante familiar de Cassiedy, situado exactamente una calle atrás de su hogar. - Blaze, ¿le diste nuestra dirección?, Porqué parece que no quiere que te molestes en caminar demasiado. - comentó Amy alzando una ceja un tanto confundida.

- No, no recuerdo haberle comentado. - murmuró ella incrédula, era también su primera vez viendo esa ubicación, pero tenía sentido, "mantén a tus enemigos cerca, muy listo, Silver." Pensó la gata en su mente. - pero me contó que era su lugar favorito, quizá sea una linda coincidencia. - añadió con una sonrisa casi forzada, pero ese argumento bastó para calmar a sus amigos, quienes ahora sonreían por ella, era claro que escuchar eso era algo sorprendente, pues sabían de la antigua relación de su amiga y lo horrible que la había pasado, ellos creían que ya era tiempo de que volviera a salir con alguien, y por fin estaba sucediendo, aunque tenían dudas la apoyarían.

- Bien, te ayudaré a ponerte linda. - agregó Amy de inmediato abrazando de soslayo a la chica, quien se sonrojo al tener ese contacto.

- Yo prepararé el desayuno, debemos alimentarnos bien. - respondió Mighty.

- Yo te ayudo. - dijo Cream de inmediato llegando nuevamente a la escena y comenzando a bajar el café y la harina de hotcakes.

Y sin darse cuenta, ya eran más de las 8 de la noche, teniendo a dos ocupadas chicas preparándose para la cita de una de ellas, la más alta de ellas recibía consejos por parte de la erizo, quien además de eso revisaba el closet, buscando con que combinar la blusa alta de lentejuelas marrones y los mallones negros que había preparado para Blaze.

Luego de eso dejó la ropa en el banquillo del baño, para que cuando ella estuviera lista saliera y se cambiara, hasta revelar la bella figura de ella con ropa femenina, pues su estilo no era ese, pero le quedaba bastante bien, y hasta ella misma se sorprendía de tan inesperado cambio que podía tener con prendas de ese estilo.

Finalmente salió de la ducha con su conjunto ya listo y la toalla envuelta en su melena, siendo rápidamente arrastrada por Amy hasta el banco de su tocador, comenzando con rociarla con spray purificador en el rostro y luego siguió retirando la toalla húmeda pata revelar el corto cabello morado; ella lo haló todo hacia atrás y luego untó crema para peinar, buscando desenredarlo, para terminar cepillandolo todo, dejándolo acomodado hacia atrás; luego giró el banquillo teniéndola frente a frente, viendo como su rostro ahora estaba listo, luego de colocar un poco se crema, inició con su maquillaje, teniendo la orden de hacer algo sencillo, pues no quería que pareciera que en serio le importaba esa reunión, al final de cuentas, solo la gata sabía el verdadero motivo de la cita.

Amy acató la orden y colocó una base de sombra rosa hasta degradarla en un morado más fuerte que el de su pelaje, solo para destacar el párpado, siguiendo con un delineado discreto de color blanco, luego un poco de Blush y finalmente un labial rosado, teniéndola ahora perfectamente bella. - Listo, eres realmente hermosa. - finalizó volteandola al espejo, observando el nuevo tono rojo de su amiga al verse así.

- Gracias, Amy, realmente me veo bien. - susurró ella agachando su mirada.

Por fin podian salir ambas del cuarto, topandose con el gran reloj del pasillo, informando que ya eran las 9:25.

- Te ves genial. - agregó Knuckles al verlas ahí, guiñandole un ojo a Blaze, quien solo pudo agradecer apenada.

- ¡¡Estás lista!!, maravilloso. - habló ahora la coneja con una sonrisa más bien nerviosa.

Pero todo se detuvo al escuchar la puerta, el equipo ahí se congeló, pues la "cita" de su amiga no conocía la dirección, ¿entonces, quién era?.

Mighty se adelantó y bajó velozmente los escalones, siendo seguido por Amy, quien temía lo peor en ese momento, entonces abrieron las puertas revelando a...

- ¡¿Tú?!

- Con permiso jeje. - dijo él abriéndose paso y entrando a la casa sin invitación alguna, observando a todos ahí.

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