"Un Sentimiento Nuevo" [LevixMikasa]

Cap. 13

"Bajo la luna"

Ambos seguian contemplando el paisaje del cielo en un total silencio. El aire movía de vez en cuando el cabello de ambos y el césped soltaba un aroma delicioso.
Ella tenía una molestia en la cabeza,un pensamiento o más bien una pregunta que moría por hacerle y sabía que no volverían a tener un momento como ese. Respiró profundo y habló.

—¿Que soy para usted?— Rompió aquel silencio.

Una ola de nervios invadió su cuerpo,su corazón latía con más fuerza y velocidad que de costumbre. Su pregunta lo tomó por sorpresa y se quedó callado.

—Esta bien,ya entendí...— Se giró y comenzó a caminar hacia la entrada.

Por alguna razón su silencio le dolió y la decepcionó,pero tal vez eso era lo mejor para los dos ya que las cosas no estaban bien y el futuro de ambos no era seguro gracias a los Titanes. Por más fuertes que fueran corrían el mismo peligro que los demás soldados.
Regresó a la habitación y se quedó profundamente dormida,sin notar que Eren no estaba en su cama. A la mañana siguiente,ella fue la última en despertar debido a la desvelada de anoche.

—Mikasa,¿Podemos hablar?— Eren la detuvo del brazo antes de que saliera de la habitación.

—¿De que?— Se soltó de su agarre bruscamente.

—Bueno yo...¿Que hay entre el capitán Levi y tú?— Se le notaba enojo en sus palabras.

—Nada que te importe,Eren...—

Las cosas entre ellos habían cambiado drásticamente desde el día que los vio besándose. Mikasa se portaba hostil e indiferente con Eren y el ahora solo buscaba atraer su atención de cualquier forma.

—Los ví besándose y anoche tomados de la mano...— Se cruzó de brazos.

—¿A caso me espías?— Se molestó. —Crei que no te importaba—

—Aléjate de el,te lo ordeno,Mikasa— dijo con severidad.

—¿O si no que?— Lo retó con la mirada.

—¡No puede gustarte nadie más que yo!— Salió molesto y a grandes zancadas del cuarto.

Enfurecida, cerró la puerta y entre lágrimas y sollozos comenzó a deslizarse sobre ella hasta quedar sentada en el suelo con la cabeza sobre sus rodillas.

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Eren llegó al lugar donde sería el siguiente entrenamiento y los demás soldados no tardaron en sentir la ausencia de Mikasa a lo largo del día,lo cual para todos era raro que no estuviera puesto que es la mejor recluta que la legión haya tenido en mucho tiempo después del capitán Levi.
Los murmuros se hacían presentes en el jardín sobre la misteriosa ausencia de la pelinegra,cosa que la subordinada de Erwin,Hange Zoe no pasó por alto.

—Eren...¿En dónde está Mikasa?—

—Se quedó en nuestra habitación...— Respondió sin importancia. —¿Por qué no le pregunta al capitán Levi?—

—¿Levi?— Se sorprendió.—¿El que tiene que ver en esto?—

—Debería preguntarle...—

Hange no respondió nada más y solo se alejó de Eren para buscar al capitán.
Se llevó una enorme sorpresa al verlo entrar en la sección de dormitorios, específicamente en la de los nuevos reclutas.

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Mikasa seguía llorando en la habitación totalmente desconsolada y abrumada por todo que estaba pasando,por lo que comenzaba a sentir hacia alguien que ya no era Eren.
Por otro lado,Levi fue el primero en notar su ausencia y lo comieron las ganas de ir a buscarla,de ver si se encontraba bien. Al llegar a su puerta,su corazón se rompió en mil pedazos al escucharla llorar de esa manera tan desgarradora. Era algo nuevo para el ya que jamás imaginó escuchar a esa chica que parecía ser fuerte en un estado de debilidad,llorando, siendo tan delicada y estando indefensa y mucho menos se imaginó sentir esa necesidad de abrazarla y consolarla. Todo eso y más le provocaba la pelinegra,se sentía extraño porque es algo que no sintió estando con Petra Ral.

Tocó la puerta de una forma desesperada.

—¡Largo de aquí!— Gritó desde el interior.

—Niña,abre la puerta— Escondía su impaciencia por verla en las palabras.

—¡Dije que te fueras!—

—Mikasa... por favor...—

Su tono de voz cambió repentinamente,ahora se escuchaba más tranquilo y sus palabras se entrecortaron un poco. Pegó la frente en la puerta al igual que sus manos,entre sus palabras se escuchaba la súplica que le hacía para que abriera esa puerta que le impedía abrazarla.

→To be Continued←

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