Claros

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No podía perder a Tweek, no podía perder a su único hijo.

Marrie nunca fue la mejor mujer, ni esposa, madre, compañera. Nunca, nunca la amo.

Escribiré sobre la relación del padre y la madre de Tweek.

En la vida de él sólo existió una mujer, solo una.

Sara.

Ambos se enamoraron a causa de Tweek. Sara por esos entonces era la enfermera de Tweek, ella lo cuidaba y lo hacia olvidarse de sus problemas, cada terapia era una excusa para estos.

Después de un tiempo ella y él decidieron mantener una relación a escondidas puesto a que ninguno de los dos quería que Tweek tuviera más problemas.

Pero no duro mucho, un día Marrie los descubrió en la entrada de uno de los edificios en donde laboraba su esposo sin embargo ella no hizo escándalo alguno.

Solo miro la escena y saco fotos, sí saco miles de fotos de ese momento. Ella guardo las fotos y se fue del lugar sin expresión alguna. ¿Y saben por qué?

Porque esas fotos eran su pase al divorcio.

Cuando Jhon llego a casa, el escándalo se armo. Marrie le dijo que una "amiga" le envío las fotos, lo dijo desesperada y angustiada, era muy creíble.

Jhon no supo que hacer. Y Marrie aprovecho eso para botarlo de la casa y hacer que él dejara a una persona muy importante en su vida.

Lo que faltaba era el divorcio y la custodia de Tweek.

Y digamos que Marrie tiene todas las cartas a su favor.

El hombre entró al departamento mientras que maldecía por lo bajo, aún tenía que sacar las cosas de Tweek.

Entro a la habitación principal y tremenda sorpresa que se llevó. Un joven de cabellos negros descansaba en la cama. Él lo despertó.

- ¿Y tú quien carajos eres?

Craig se sorprendió por un breve momento pero después de unos segundos cambio a su fría expresión.

- La pregunta correcta seria ¿Quien es usted?

- No me vengas con juegos niños, soy él dueño del departamento.

- ¿Usted es el padre de Tweek?

- Sí, espera... ¿Cómo es que conoces a mi hijo? ¿Tú quien eres?

-Craig.