Una Invocación Demoníaca

Three

Advertencia:ninguno de los animes o imágenes me pertenecen:créditos a sus correspondientes creadores.

El duelo entre caballeros se llevaba a cabo, batalla que trascendía por completo a la de dos simples humanos, demostrando por que son héroes legendarios.

Aunque pareciese un choque parejo de estilos de combate, la maestría del pelinegro con esas dos lanzas no dejaba punto ciego en su defensa.

Saber tampoco sufría demasiado al atacar con su espada invisible, siendo capaz de evadir los osciladores golpes de las lanzas, ya sea la de largo o corto alcance.

El apuesto guerrero de Fianna hasta ahora no sufrió más que un ínfimo corte en su mejilla, mientras que la portadora de la espada sagrada no presentó ni un daño y con una fatiga casi nula, se relajaron en frente del otro.

Sinceramente el Gremory se sorprendió por ambos combatientes, más por el amante de Gráinne de quien no se esperó tan dichosos movimientos con dos lanzas en mano.

Bufó por lo bajo cuando interrumpieron su combate para adular al otro, siendo que el Maestro de Lancer habló y confirmó la especulación del demonio: Diarmuid no había usado ningún tipo de maná, por lo que se estuvo conteniendo hasta ahora.

-[Deja de jugar, Lancer. Saber es un oponente temible, acaba ya con este combate. Te permito usar tu Fantasma Noble]-.

-(¿Fantasma Noble?... Si es una especie de arma como la espada santa de esa chica, entonces deben tener similitudes con las Sacred Gears)- Teorizó de inmediato, viendo como el traidor de Fionn deshacía el hechizo que cubría su lanza larga, dejando ver que era completamente de color rojo -(...Ja, esto va a ser más divertido de lo que creí, y pensar que quería mantenerme inactivo otro tiempo)-.

Después de sentir ese hormigueo recorrer por sus poros, sabía que debía pelear con alguno de ellos para experimentar de primera mano lo que los héroes de esta realidad eran capaces, talvez después de que alguno de los dos muera para que así le sea menos pesado hacer su trabajo.

Volviendo al campo de batalla, el Sirviente clase Lancer dijo lo obvio de por qué usaba magia eolia en la hoja de su espada, a lo que golpearía de frente con su lanza roja, siendo contrarrestado por la espada de la rubia pero en cuanto chocó contra la lanza, un intenso brillo dorado surgió de la espada.

-(Hasta aquí arde la aura de su espada, y ahora ya no puede esconderla pero, ¿qué es esa lanza?)- No había duda de que la lanza roja no había derribado su magia de viento, sino que la había anulado momentáneamente con un simple toque, dejando una hipótesis en Gokú sobre la lanza cuya habilidad sería la de cancelar la magia -...Veré como continúa-.

...

Tal y como predijo, aquella lanza roja fue capaz de atravesar la armadura mágica de la británica y causarle un corte que fue prontamente curado por la albina que actuaba como su Maestro, así que sólo aguardaría unos segundos hasta que la mujer lo descubra y renueve su estrategia.

-...(¿Qué?)- Cuando vio a la rubia liberándose de su armadura, no le pareció el mejor ardid de las distintas variantes que existían para llevar su batalla, pues quedaba vulnerable ante un mínimo descuido.

Además, el pelinegro aún tenía otra lanza e inevitablemente no sería una arma cualquiera, por lo que dejar su vida a la suerte tan temprano era prácticamente rendirse ante los pies de él.

Comprendió el movimiento que hizo y parece que Lancer también, pues desbloqueó el poder de su lanza corta(cuyo color era un dorado brillante) y asestó un corte justo en un tendón del brazo izquierdo de Saber, aunque recibiría una devolución igual de grave que le incapacitaría usar su mano izquierda a ambos.