𝘾𝙍𝙐𝙎𝙃 ♡ 𝙔𝙖𝙣𝙜 𝙅𝙪𝙣𝙜𝙒𝙤𝙣

≡ ˖ ⋆໋ Epílogo ⁺◦

Jungwon no estaba nada familiarizado con el ambiente.
Música a todo volumen, gente en todos lados impidiéndole hacer cualquier cosa, fuerte olor a alcohol y cigarro, luces neón que en unas horas le causarán dolor de cabeza. Sí, una discoteca.

Las vacaciones habían comenzado hace apenas tres días luego de un largo año en la universidad.

Hace once meses Yang JungWon había comenzado la universidad, con una carrera que le apasionaba desde pequeño. Estaba totalmente entregado a su sueño de ser abogado por lo que estudiaba arduamente, claro, él resultado de su estudio se veía reflejado en sus calificaciones y Yang no podía estar más orgulloso de si mismo.

Luego de los exámenes finales, él y sus amigos decidieron que se merecían unas vacaciones para compensar el agotador año.

Y así pasó.

Jungwon, Wonyoung y su grupo de amigos se pusieron de acuerdo en un tiempo record.

New York, el lugar perfecto para sus vacaciones. Los chicos del grupo nunca habían visitado la ciudad por lo que a todos les pareció perfecto.

El primer día ninguno salió de sus habitaciones del hotel, todos descansaron del pesado viaje.

Pero el segundo día decidieron salir y hacer turismo por la ciudad, dejando evidencias de lo bien que la pasaban a través de fotos con la cámara instantánea de Minseo.

Para acabar el día todos salieron juntos a una discoteca, donde supuestamente se la pasarían juntos, pero ya Jungwon estaba perdido entre la gente.

No había bebido nada, pero estaba mareado por lo que decidió alejarse un poco de todo el tumulto de personas.

(...)

—¡No me quiero ir!

—Hey, Lily. Tienes que ir a casa, mira el estado en el que estás.

—Estoy perfecta. ¿No me ves? —silencio. —Haeri, no me veas así. Solo fueron un par de copas.

La mencionada negó con la cabeza mientras Jay; su primo, se acercaba a su amiga que estaba algo ebria.

—¿Puedes llevarla a casa? —el chico asintió. —Dejala en mi habitación.

Haeri soltó un suspiro cuando Jay se llevó a Lily, por lo menos sabía que su amiga estaba en buenas manos.

Se acercó a la barra y llamó a Joseph, uno de los chicos que atendía esa noche, eran compañeros de universidad por lo que existía confianza entre ambos.

Park le pidió un refresco, ya había bebido suficiente alcohol.

Sintió unos brazos posarse en su cintura desde atrás y una voz en su oído.
—¿Estás sola, princesa? 

Haeri comenzó a reír dándose la vuelta, encontrándose con Jake; su mejor amigo. El australiano vestía una camisa negra muy elegante con la mitad de los botones sueltos, típico, y unos jeans rasgados en las rodillas.

(...)

Jungwon tomaba su Margarita muy pacientemente, mirando un punto fijo, sin intenciones de levantarse del cómodo asiento de la barra. Escuchaba algunas conversaciones de personas que estaban cerca de él, mas no les prestaba atención. Agradecía estar alejado de toda la cantidad de gente y ruido, se sentía más tranquilo y con más libertad para pensar.

Si viniste aquí fue para divertirte. Había dicho Haruto unas horas atrás, cuando recien habían llegado.

Pero la verdad, a Yang no le parecía tan divertido como sus amigos lo pintaban.