𝒪𝓊𝓇 𝒽𝒾𝓈𝓉𝑜𝓇𝓎 [Satoru Gojo]

𝟘𝟝 𝕕𝕖 𝕖𝕟𝕖𝕣𝕠 𝕕𝕖𝕝 𝟚𝟘𝟙𝟟

El día estaba soleado, dando a resplandecer la belleza de la naturaleza, aunque también hacía resplandecer sus cabellos blancos, tenía un leve olor a cabello lavado junto a perfume varonil y no podía mentir, su sonrisa era la guinda del pastel.

-¿qué escribes?-la voz de itadori me hizo pegar un pequeño brinco y en un abrir y cerrar de ojos esconder mi cuadernillo-oh perdón...no fue mi intención interrumpirte-negué con mi cabeza-

-tranquilo, ya había acabado-volví a mirar al peli blanco, quien molestaba a megumi, por su puesto megumi tenía la cara de pocos amigos gracias a eso-¿qué hace el profesor gojo?-itadori rio--está intentando hacer que megumi te lleve a una misión... aunque no creo que lo logre-los dos se acercaron a nosotros-hablando de los reyes de roma-megumi rasco su nuca con incomodidad-

-hoy iras conmigo ____-asentí sin dudar-bien, nos vemos en unas horas en la entrada de la escuela-sin nada más que decir comenzó a caminar alejándose de nosotros-

-hey meg, espera-itadori corrió detrás de megumi dejándome sola con gojo, mis mejillas ardieron, desde ese día no podía mirarle a los ojos-

-hey _____-asentí sin mirarle a la cara, concentrándome en el cuello de su blusa-mírame a la cara-bromeo, sin más dirigí mi mirada a aquella tela que cubría sus ojos-¿por qué evitas mirarme?-¿Por qué era tan directo?... dios moriré de vergüenza-

-pues, hace unos días hice el ridículo en tu presencia-admití culposamente-

-a mí me pareció adorable-tomo mi cara con su mano, su mano calentaban levemente mi mentón-estás fría, acaso... ¿Es una manera de pedirme que te dé calor?-moví mi cara avergonzada para luego ponerme de pie quedando frente a frente-

-deberías dejar de insinuarte, te recuerdo que soy tu alumna-mentí, por dentro quería tenerlo más cerca aun, mi vientre era un nido de mariposas por su culpa-por favor...-finalice-

-no existe ninguna regla que impida que me acerque a tus lindos labios-me acerco a él tocando mi labio inferior con su dedo, yo automáticamente puse mis dedos sobre aquella tela que cubría sus ojos-vaya de nuevo quieres ver-rio suave-

-no existe ninguna regla que lo impida-lo imite, comencé a levantar la tela, pero él rápidamente me detuvo-

-prometo que podrás verlos, pero no ahora-hice un puchero a lo que él reaccionó con una risa ronca-

-¿cuándo?-se quedó pensativo unos segundos, yo me deleitaba con tenerle cerca-

-que te parece... ¿Este once de enero?-asentí entusiasmada-bien es un trato, pero a cambio tú debes darme algo-lo miré curiosa-te lo diré después de mostrarte mi pequeño secreto-asentí suave mientras me alejaba de él poco a poco-

-bien, hasta ese día... mantén tu distancia satoru-este sonrió-y deja de darme esas sonrisas pícaras-acomode mi bolso en mi hombro-nos vemos-agite mi mano mientras me alejaba de él para ir a lugar que megumi había mencionado, él tardaría horas en aparecer, así que tenía el tiempo suficiente para escribir en mi libreta-

-pensé que nos veríamos aquí más tarde-el pelinegro me miro extrañado-

-no tengo nada que hacer... así que pensaba en pasar las horas aquí-me encogí de hombros, el río suave por mi respuesta-

-vamos entonces, no tenemos tiempo que perder-tome mi bolso y lo seguí hasta un auto negro que esperaba a que lo abordáramos-la misión es simple, solo te enviaron como espectadora, así que mantén calma-asentí mientras me ponía el cinturón de seguridad. El auto no tardó en llegar a nuestro destino, una escuela abandonada-¿lista?-asentí y nos bajamos del auto-

-crearé la barrera protectora, recuerden que está dura quince minutos-ambos asentimos y nos adentramos a aquella escuela, megumi mostró todas sus habilidades mientras yo miraba, una pequeña silueta me hizo separarme de megumi perdiéndole el rastro-

-ayuda-un pequeño comenzó a sollozar, yo comencé a buscarlo entrando en las aulas, después de varios minutos di con el dueño de la voz-

-pequeño, tranquilo, puedo ayudarte-toque el hombro del pequeño, pero este se volvió una pequeña parte de un monstruo, este me empujo contra la pared-maldito engendró, lo pagarás- intenté concentrar mi energía en la pequeña cuchilla que gojo me había entregado, pero no funcionaba y aquel monstruo comenzaba a acercarse peligrosamente a mí-mierda funciona de una vez-agite el arma esperando una respuesta pero fue nula-

-veo que...-esa voz se hizo presente, haciendo explotar al monstruo en un segundo-aún no estás lista para salir a misiones-se giró sonriendo, yo lo mire con el ceño fruncido-¿qué pasa?-

-no sé quizás... quede llena de mierda de ese maldito-el río-¿qué haces aquí?-

-acaso no puedo venir a ver a mi nueva alumna en acción- rodeé los ojos-

-eres un picaflor- tomé mi bolso que estaba en el suelo-ya vamos-

Una parte de mí estaba feliz por volver a verlo, se estaba convirtiendo en una parte muy importante de mi día a día