Bailando con el diablo

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- ¡Ya me tienen arto! - decía enojado Leonardo

- ¿Y si intentamos robar la mona lisa?- propuso Augusto

- Oye no suena mal - dice Nero

- ¡Nero! - le llama la atención Leonardo

- Vale, vale - se rinde Nero

- Ni se, ¿Por qué lo intentó?, ustedes son incorregibles - se lamentó el pintor

- Y usted una reina del drama, ni que un aguacate doliera tanto - dice sarcásticamente Sara ignorando el hecho de que casi dejaban paralítico a Leonardo y de pasó traumado con un miedo inmenso al aguacate.

- Agradezcan que hoy desperté de buenas, les voy a dar una oportunidad - Explicó Leonardo para la alegría de todos los presentes.

- ¿Y qué seria eso? - preguntan los guardianes

- Tienen que limpiar la central - propone Leonardo

- ¡Nel pastel! - dice Nero ante la idea

- ¿Entonces ponerse a bailar? - Bromea su jefe

- Yes yes - sonríe Nero ante la idea

- ¡Nero! - le gritan todos

- Lo se no necesitan agradecerme - sonríe Nero

- Dios dame paciencia - suplicaba Cecilia

- ¿Diosito te lo llevas tú o te lo mandó yo? - pensó Diana

No basta decir que todos se aventaron sobre Nero con intenciones no muy buenas.

Continuará..

El despido Club 57 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora