Coachella, o.s || j.b ©

Uno.

Abro los ojos una vez más y observo a mi alrededor admirando todos los detalles que me presenta mi vista.

La gente alegre con sus llamativas ropas, la suave brisa de la costa y el radiante sol del atardecer y sin duda el toque que les da las palmeras y la rueda de la fortuna al lugar.

Es mi primera vez aquí, desde hace años he querido venir para despejar mi mente a través de la música y con la compañía de buena gente.

Y aún no podía creer que al fin estuviese aquí con mis dos mejores amigas, cumpliendo uno de nuestros sueños de nuestra lista "Cosas que hacer antes de morir". Quizás nos saltamos varios puntos como "Tatuarnos" "Tener sexo en la piscina" o "Saltar de un paracaídas", pero ya había una menos.

--Esto es tan lindo como en las fotos de tumblr --Chilló Danna.

Y sí que lo era, incluso, aún más lindo.

--¡Lo logramos chicas! --Grité para envolvernos en un apretado abrazo.

Nos sentamos en el suave y brillante pasto acomodándonos en el ambiente.

De pronto el ritmo de una canción se hizo presente haciendo que todo el público que se incorporara para tener una mejor ubicación de show de Drake.

Amaba a ese negro.

Cada canción de él es poesía, no es ningún cliché o estereotipo de canciones de ese estilo. Eran palabras sacadas de más profundos momentos, cosas que de verdad se sentía y el ritmo que llevaba cada canción lo hacía aún más perfecto.

Miré hacia mis costados para ver a mis amigas, lo que sorpresivamente no estaban. Solo personas desconocidas llenas de energía.

--¿Estás bien? --Preguntó el chico que estaba a mi lado. Quizás mi expresión buscando a mis amigas fue muy preocupante.

--Oh, sí. Sólo que no encuentros a mis chicas --Grité por el ruido.

El solo asintió y se acercó más.

--¿Te gusta Drake? --Gritó.

--Me encanta.

--Pues somos dos.

Sonrió, haciendo que esta embelleciera su rostro. Joder, ¿Es que aquí todos los que vienen son guapos?

Tenía una pinta relajada, playera y pantalones negros, zapatillas adidas azules y un snapback negro tapando su cabello largo que sobresalía por el.

La voz de Drake interrumpió mi vista haciendo que toda mi atención -y la del público- se dirigiera hacia él.

Unas bellas e inspiradoras palabras soltó para luego seguir cantando.

--Oye, y...--Ya no estaba. ¿Es que acaso soy un repelente?

Sin más, me dediqué a disfrutar del show; las canciones, discursos, el beso de Madonna (vieja, que es mío) y la buena vibra.

Una vez que terminó el espectáculo de Drizzy, me retiré para buscar a las chicas mientras música de fondo sonaba.

Estaban en un puesto de hotdogs. No era de sorprenderse en todo caso.

--¡Hey, pensé que iban a ver el concierto conmigo!

--Lo siento, es que teníamos hambre y además por no nos gusta "Dreak"

--Es Drake.

--Eso.

Bufé. Sí, quizás no nos gusta lo mismo, pero así nos amamos.

--¿Quieres? --ofreció Tory con la comida en la boca mostrando hasta como su saliva lo hace almidón.

--No gracias --Respondí con la vista hacia mi horizonte.

Y aún el sol brillaba y quería aprovechar de hacer cualquier cosa, porque sin pensarlo ya podría acabarse y quizás que cosas pueden suceder si uno no lo intenta.

Aquí les dejo el primer capítulo, espero que les haya gustado<3