Golden Retriever | Heartstopper

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Los partidos de rugby en ningún momento fueron su área. Realmente sólo estaba allí por Nick, eso estaba claro para todo el mundo. Así que lo mejor que podía hacer durante todos esos minutos que duraba el partido, que se sentían eternos para él, era mirar a su novio (novio, todavía le costaba creérselo), correr, pasar la pelota, taclear gente y anotar puntos. Vamos, lo que se supone que se hace un partido de rugby. Sin embargo, la parte favorita de Charlie a un lado del campo de juego era ver a Nick siendo él en todo su esplendor.

Había algo de lo que el rubio no se había dado cuenta, y Charlie se anotó mentalmente decírselo cuando tuviera la oportunidad. Aunque sintiera que no había podido ser nunca cien porciento él, tratando de encajar y seguir siempre a sus amigos, Nick siempre había sido el mismo mientras jugaba rugby. Podía parecer una tontería, pero dentro del campo de juego mostraba todas sus cualidades a la vez. Era el líder absoluto, a la vez que se preocupaba por el bienestar de todos sus compañeros (e incluso los rivales), les daba ánimos justo en los momentos necesarios y, sobre todo, tenía la energía y determinación para conseguir y no perder la pelota, anotando todos los puntos que fueran posibles.

- Aquí - se oyó el grito de Nick desde el otro lado. - Aquí - repitió para que le pasaran la pelota. Y en cuanto la tuvo logró esquivar a tres de sus rivales y anotar.

Se dio la vuelta con los brazos en alto, mirando directo hacia Charlie, quien respondió con sus pulgares en alto. Allí estaba también otra cualidad más, la increíble ternura que lo caracterizaba.

*

- Has estado increíble - rodeó el cuello de Nick con sus brazos, felicitándolo por la victoria del equipo.

- Bueno... hemos sido todos... - se sonrojó un poco ante las palabras del menor.

- Pero el mejor has sido tú - finalizó juntando sus labios.

- Gracias, Char - susurró justo sobre sus labios, la ternura era perceptible en su voz.

Habían tenido que esperar a que se fueran todos para besarse así. Porque si bien habían decidido no esconderse más, y le habían contado a la gente importante, todavía era difícil mostrar ese tipo de demostraciones de afecto frente a todo el mundo, sobre todo en la escuela, y particularmente con el equipo de rugby. Sabiendo cómo eran, preferían evitarlo. Pero estaban bien, todo estaba bien.

*

Charlie no podía dejar de sonreír viendo a Nick interactuar con sus amigos.

Una semana después del día del partido, habían decidido que sería divertido ir al bowling todos juntos como hace un tiempo atrás.

Había costado mucho (más de lo que quería recordar) pero Tao había logrado aceptarlo del todo y ahora, aunque seguía respetando su espacio y no quería ir siempre para que Charlie pudiera pasar tiempo solo con sus amigos, se unía bastante seguido a ellos.

La primera vez que había ido con ellos no había salido muy bien. A pesar de que en su cumpleaños todo acabó mejor de lo que parecía que sucedería en un principio, el tiempo que compartieron sus amigos junto a Nick no fue el mejor, aún observando de cerca con temor a que el mayor le hiciera daño a su amigo. Sobre todo Tao que, bueno, podía ponerse un poco sobreprotector cuando quería. Y con Charlie lo había sido el triple, especialmente en aquella situación, cuando todavía ni siquiera sabía que Nick estaba saliendo con él de verdad y creía que estaba jugando con él.

Era un buen amigo. Nick se lo había dicho ese día, y no se había equivocado.

Pero ahora era diferente. Isaac y Elle ya lo habían aceptado hacía rato, Tao también aunque le hubiera costado un poco más, pero ahora incluso podría decirse que todos eran amigos, Darcy y Tara integradas también al grupo.