Yo sí te veo

Te cruzaste en mi camino

Se encontraban en plena persecución oficial; un asesino se encontraba suelto por la isla mientras amenazaba con tomar civiles de rehén; había entrado a una zona residencial mientras ellos se movían con precaución. 

-Luke, Kono ustedes a la izquierda; Chin y yo por la derecha-

Todos asintieron a las ordenes de su comandante mientras se movían con sumo cuidado si lograba entrar a algún lugar y tomar rehenes la situacion se volvería peligrosa. 

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Una hermosa niña de largo cabello castaño y ojos cafés sonreía mientras se guiaba por el olor proveniente de la cocina un joven alto y de cabello rubio hacia deliciosos pancakes para el desayuno de su mayor tesoro sus movimientos eran precisos y gráciles que te hacían ignorar casi por completo  el hecho de que sus ojos eran casi blancos, opacos a cualquier cosa frente a el, su nombre Daniel Williams.

-buenos días Grace, ¿te lavaste las manos?- 

-buenos días papi; ya lo hice- 

-no escuche el agua correr- 

La menor hizo pucheros mientras se levantaba de su asiento hambrienta seguramente y el rubio disimulaba una sonrisa; sus demás sentidos estaban completamente desarrollados y solo podía hacerse una idea de lo que pasaba a su alrededor; por eso su sensible oído lo escucho; una persona había traspasado la reja de su casa por sus pasos apresurados supuso que no planeaba nada bueno. 

Apago la estufa buscando su bastón mientras caminaba rápidamente hacia el baño y tocaba una vez. 

-coloca el seguro y no salgas hasta que te diga- 

 Su voz sin lugar a replica asustaron a su pequeña hija quien asintió escondiéndose en la bañera; lo mejor seria alejar al intruso de la casa principal así que siguió su camino pese a que fuera detectado hacia el garaje si el ladrón era tonto sabría que era presa fácil y lo seguiría.  

Cuando los pasos lo siguieron sonrió mientras llegaba hacia el sótano mientras a mitad de las escaleras giraba tirando de la playera de este y ambos rodaban había ido a clases de defensa personal así que no era un problema esa caída; escucho maldiciones mientras se enfrascaba en una lucha, era consciente de todo lo que había abajo y sabia que podría someterlo y luego llamar a la policía y eso hizo.  

Las patrullas llegaron poco después mientras subía y sentía a las personas en el lugar escuchando las vibraciones en la punta de su bastón. 

-eso fue rápido- 

El que parecía al mando coloco el seguro de lo que supuso era un arma mientras se acercaba a él, el olor a tierra y mar, y algo de sudor le dio un escalofrió pero lo disimulo. 

-esta abajo-